Chechenia

Un d¨ªa m¨¢s he buscado en la prensa informaci¨®n sobre la evoluci¨®n del conflicto que acontece en Chechenia. Un d¨ªa m¨¢s he buscado en mi correspondencia alguna convocatoria o alg¨²n manifiesto que suscribir sobre esta guerra que est¨¢ produciendo unos resultados bastante parecidos al no tan lejano conflicto de Kosovo. Pero un d¨ªa m¨¢s encuentro mi buz¨®n vac¨ªo y muy escasas referencias al conflicto en los medios de comunicaci¨®n. Ni que decir tiene que no encuentro ning¨²n an¨¢lisis de la situaci¨®n medianamente objetivo y extenso.L¨®gicamente, a estas alturas soy consciente de que la OTAN nunca intervendr¨¢ en este conflicto. No espero tampoco que lo haga la ONU; ni ning¨²n tipo de organismo internacional o regional. Rusia es lo suficientemente potente, aun hoy, como para que nadie se lo plantee siquiera. Pero debo confesar que me abruma no encontrar voces, cualificadas o an¨®nimas, que llamen la atenci¨®n sobre lo que all¨ª ocurre.

Lo poco que nos est¨¢ llegando ofrece un panorama desolador. El n¨²mero de refugiados se equipara ya al de otros conflictos que nos hicieron reaccionar y que incluso provocaron intervenciones armadas o, cuando menos, humanitarias. ?Nadie va a reivindicar esa intervenci¨®n ahora?, ?nadie le dir¨¢ a Yeltsin que acabe con esta masacre?, ?nadie de las Naciones Unidas, o de la OTAN, nos explicar¨¢ nunca por qu¨¦ la suerte de las v¨ªctimas de los conflictos depende de su lugar de nacimiento?-