La ilusi¨®n
Cometido a plena luz del d¨ªa, en el centro de Argel, el asesinato del l¨ªder islamista Abdelkader Hachani eclipsa el bello optimismo que ha prevalecido durante los ¨²ltimos meses en torno a la vuelta de la seguridad. Recuerda brutalmente que el punto de mira popular est¨¢ a¨²n en el orden del d¨ªa de los grupos terroristas, como durante los primeros a?os de la tragedia, y que ninguna personalidad estaba protegida, incluidos los pol¨ªticos isl¨¢micos. Los argumentos de los grupos terroristas son bastante simples: es la guerra total y todos aquellos que no est¨¦n en la resistencia ser¨¢n abatidos. (...) Es en nombre de estos argumentos que cada Ramad¨¢n se transforma anualmente en una nueva matanza. No existe, por tanto, ninguna novedad dentro de esta l¨®gica de los grupos terroristas: ser¨ªa l¨®gico esperar que aumentara la movilizaci¨®n de todos los medios de lucha de que dispone el Gobierno acompa?ados de una intensa campa?a dirigida a la poblaci¨®n con el fin de que no se relaje la vigilancia. Esta respuesta no deber¨ªa ser incompatible con la b¨²squeda pol¨ªtica de medios para devolver la paz. Lo urgente es traer de nuevo a los argelinos a la dura realidad para que no contin¨²en viviendo en la ignorancia del peligro. Incluye a las fuerzas de seguridad que hayan bajado la guardia. (...) El cansancio general despu¨¦s de ocho a?os de terror no explica que parte de esta hecatombe (otra parte se debe buscar en la idea de la clase pol¨ªtica de que la crisis la hemos dejado detr¨¢s y que los d¨ªas del terrorismo est¨¢n contados) deba ser combatida sobre todo con los resultados sobre el terreno., 24 de noviembre
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.