El Estudiantes detiene al Pamesa Valencia

BALONCESTO Liga ACBEstudiantes, qui¨¦n si no, fren¨® en seco al l¨ªder, a un Pamesa deslumbrante, que hab¨ªa hecho de la victoria ley y que amenazaba con romper cuantos r¨¦cords se contemplan en la era reciente del baloncesto espa?ol. Es el valenciano un equipo que maneja una virtud impagable: juega de memoria. M¨¢s all¨¢ del talante de todos sus componentes, y del talento de los m¨¢s iluminados, l¨¦ase Rodilla y Tanoka, el Pamesa es como un reloj de precisi¨®n. No var¨ªa su discurso, vayan las cosas como vayan.Pero se asom¨® al Palacio y se acab¨® el jolgorio. "Los intocables", llamaban sus aficionados a Rodilla y compa?¨ªa. Tocados se fueron de Madrid. De ello se encarg¨® el equipo m¨¢s explosivo de la ACB, el Estudiantes, capaz de hacerle un monumento al baloncesto cuando menos se espera. Ten¨ªan los colegiales ganas de oscurecer al Pamesa. Parec¨ªa ficticia la diferencia que separaba al Pamesa de los dem¨¢s, como si el baloncesto espa?ol hubiera retrocedido un par de d¨¦cadas, resucitando aquellas dictaduras que protagonizaban Madrid o Bar?a. Pero el Pamesa es de carne y hueso. O al menos, si as¨ª se lo proponen tipos como Alfonso Reyes, Thompson o Azofra.

Estudiantes tuvo que dejar ver lo mejor de su juego para derribar a un enemigo que a ratos es una m¨¢quina. Y que lo fue en el inicio, cuando dejaba entrever que la primera derrota tendr¨ªa que esperar. Con 0-8 arranc¨® aquello. Hasta que Azofra y Gonzalo Mart¨ªnez decidieron cortarle la salida a Rodilla. Lo dem¨¢s lo puso Alfonso Reyes. Vaya por delante que al espa?ol le defend¨ªa Tanoka. Vamos, que le toc¨® la loter¨ªa. Por ah¨ª hall¨® el camino Estudiantes, que se fue al descanso con ventaja (43-40).

Pero aquello no inmut¨® al Pamesa. De nuevo se adelantaron los valencianos en el marcador (55-59) y de nuevo Estudiantes supo hacer frente a los malos vientos. ?C¨®mo? As¨ª: minuto 29, triple de Thompson (58-59); minuto 30, triple de Thompson (61-60); minuto 32, triple de Thompson (66-64).

Al Pamesa le estaba agujereando el que no imaginaba, Chandler Thompson, un jugador que se ha pasado medio siglo lesionado. Luego vinieron la fiesta, los ol¨¦s, la bocina final y el "?que salgan los toreros!", mientras el Pamesa, un l¨ªder con may¨²sculas, se retiraba con la cabeza alta, pero sin poder igualar el r¨¦cord de victorias consecutivas desde que se constituyera la ACB, que est¨¢ en poder del Madrid, que en la temporada 87-88 encaden¨® 21 triunfos. Con 20 se va a quedar el Pamesa.