El control de la libertad condicional de Ferr¨¢ndiz se limit¨® a si iba al trabajo

Los miembros de la comisi¨®n de seguimiento de asistencia social penitenciario sobre los que reca¨ªa el control de la libertad condicional de Joaqu¨ªn Ferr¨¢ndiz, condici¨®n en la que permanec¨ªa cuando se produjeron las cinco muertes por las que es juzgado, no ejecutaban vigilancia de ning¨²n tipo. Durante la sesi¨®n de ayer, los responsables reconocieron que s¨®lo le entrevistaban una vez al mes y controlaban si iba al trabajo.

Las declaraciones efectuadas por los mismos, durante la sesi¨®n celebrada ayer, dej¨® patente que estas comisiones no realizan ning¨²n tipo de vigilancia sobre los liberados condicionales porque no la consideran de su competencia pese a que, te¨®ricamente, es una de las labores que marca el reglamento por el que se rigen.El secretario de la comisi¨®n, Manuel Blanco, m¨¢ximo responsable de la misma, reiter¨® ayer en varias ocasiones que la vigilancia "considerada como tal" no es de su incumbencia sino de las fuerzas de seguridad del Estado, tal como ocurre con cualquier otro ciudadano. Es decir, nadie vigilaba a Ferr¨¢ndiz.

Blanco manifest¨® que el total de personas que se encargaban de todos los presos en libertad condicional de la provincia se limitaba a tres, en el mejor de los casos, ya que hab¨ªa temporadas en las que por bajas o jubilaciones, fue ¨¦l el ¨²nico que permanec¨ªa efectuando el control. Todo ello pese a que, por ejemplo, en 1995 hab¨ªa m¨¢s de ochenta presos bajo su tutela.

El mecanismo que se llevaba a cabo para el seguimiento de los liberados, no s¨®lo en Castell¨®n sino, seg¨²n dijo Blanco, en todas las comisiones de asistencia social del pa¨ªs, se limitaba, en muchos casos, a dos actuaciones. Ferr¨¢ndiz, considerado en el grupo de los peligrosos por sus antecedentes por violaci¨®n, hab¨ªa de presentarse una vez al mes en la sede de la comisi¨®n, un d¨ªa prefijado, donde era sometido a una entrevista que duraba de tres a cinco minutos, tal como se?al¨® ayer el responsable del servicio.

Principal informador

Adem¨¢s, de vez en cuando, los funcionarios telefoneaban a su casa para preguntarle a su madre c¨®mo se desarrollaba la evoluci¨®n del ex recluso. ?se era el ¨²nico control al que estaba sometido y durante el que, adem¨¢s, s¨®lo se preguntaba por su situaci¨®n laboral y familiar. En el aspecto laboral era el propio Ferr¨¢ndiz el que comunicaba las caracter¨ªsticas de su situaci¨®n ya que los miembros de la comisi¨®n no se comunicaban con compa?eros o jefes para no perjudicar su reinserci¨®n. Tampoco ten¨ªan los encargados de este seguimiento la obligaci¨®n de interesarse por sus relaciones personales o sus ocupaciones durante el tiempo de ocio. Nunca le sometieron a ning¨²n control imprevisto ni hablaron con sus amigos. "?l era la principal fuente de informaci¨®n sobre ¨¦l mismo", admiti¨® ayer Blanco.

En los objetivos que se les marcaron a los miembros de esta comisi¨®n para efectuar el control a Joaqu¨ªn Ferr¨¢ndiz s¨®lo figuraba el que su actividad laboral fuera estable, su rendimiento bueno y sus relaciones familiares buenas, tal como indica el informe de la junta de tratamiento, que dictamina c¨®mo se efect¨²a la vigilancia.

En cualquier caso y pese a que la mayor¨ªa de los informes sobre Ferr¨¢ndiz fueron positivos, hecho por el cual Blanco manifest¨® ayer haberse sentido "enga?ado", existe uno en el que se menciona que su actitud frente a la violencia es de "agresividad alta pero sometida a control". En el mismo se indica que, dado el ¨ªndice de reincidencia de los violadores "se considera conveniente el tratamiento psicol¨®gico o psiqui¨¢trico" del exrecluso. ?ste, pese a que Instituciones Penitenciarias ten¨ªa conocimiento de la recomendaci¨®n, nunca se llev¨® a cabo.

Otra conclusi¨®n de las declaraciones de los miembros de la comisi¨®n se refiere a la descoordinaci¨®n existente entre polic¨ªa, juzgados e instituciones penitenciarias. El hecho es que los encargados del control de Ferr¨¢ndiz tuvieron conocimiento de que exist¨ªa una denuncia por agresi¨®n sexual contra ¨¦l por una conversaci¨®n informal y m¨¢s de cuatro meses despu¨¦s de que se produjera. Tampoco fueron informados de una sanci¨®n que se le impuso a Ferr¨¢ndiz tras un control de alcoholemia, hecho que, de haberlo sabido, seg¨²n Blanco, hubiera podido conllevar la imposici¨®n de medidas cautelares a su condicional.