Cacerolas y cohetes en Venezuela

ENVIADO ESPECIALLos cacerolazos por el no y las ollas mondongueras y cohetes por el s¨ª convocan en Caracas al refer¨¦ndum constitucional que el pr¨®ximo mi¨¦rcoles aprobar¨¢ o rechazar¨¢ la nueva Carta Magna venezolana, un documento que recoge los mecanismos pol¨ªticos, jur¨ªdicos y econ¨®micos ambicionados por la rupturista coalici¨®n que lidera el presidente, Hugo Ch¨¢vez, y abre un nuevo periodo en la historia nacional. Defendida como imprescindible para impartir justicia y abatir una corrupci¨®n de decenios, la oposici¨®n rechaza buena parte de su articulado por l¨ªrico, militarista o ideado para acentuar la intervenci¨®n del Estado y el poder presidencial. La Constituci¨®n so?ada por el comandante ser¨¢ refrendada el d¨ªa 15, seg¨²n anticipan todas las encuestas.

Su probable victoria no significa que la campa?a haya sido un paseo. Los sectores sociales partidarios del no sustituyeron a los partidos tradicionales, liquidados por Ch¨¢vez en cinco elecciones, y arrancaron con vigor, sumando adeptos entre la clase media. "Arrancada de caballo y parada de burro", se burl¨® el jefe de Gobierno, quien, coherente de palabra y obra con su trayectoria militar, compareci¨® en una tribuna el 24 de noviembre para anunciar: "Hoy me pongo las botas militares y desenvaino el sable". Su movilizaci¨®n espada en mano, echando plomo contra el adversario, respond¨ªa a la inesperada suma de fuerzas contrarias a los fundamentos de su "revoluci¨®n democr¨¢tica". "Necesito esta otra Constituci¨®n para gobernar eficazmente Venezuela. (...) Amarrado como estoy al Congreso, a partidos, a sindicatos (...) ser¨ªa por dem¨¢s dif¨ªcil, por no decir imposible, realizar todo el proyecto que nosotros tenemos", declar¨® el gobernante m¨¢s controvertido de la historia nacional contempor¨¢nea, el jefe castrense que el 4 de febrero de 1992 se alz¨® en armas contra Carlos Andr¨¦s P¨¦rez y el 6 de diciembre de 1998 arroll¨® en las urnas.

Los cuatro opositores de la Asamblea Nacional Constituyente, copada por el oficialista Polo Patri¨®tico en las elecciones del 25 de julio, sacaron pecho advirtiendo contra el autoritarismo e improvisaciones peligrosas. Los empresarios, secundando los avisos de esos cuatro mosqueteros, denunciaron que el Estado asfixia la iniciativa privada e impedir¨¢ el desarrollo econ¨®mico.

Los alcaldes entraron en liza. El nuevo contrato social, dijeron, lesiona sus intereses al reducir la participaci¨®n de las alcald¨ªas en la recaudaci¨®n de impuestos. La mayor¨ªa de las 330 existentes pertenecen al partido socialdem¨®crata Acci¨®n Democr¨¢tica y algunas al democristiano Copei, las dos formaciones acusadas de haber arruinado Venezuela durante sus cuarenta a?os de hegemon¨ªa. Trece de los 24 gobernadores, invocando centralismo, repudiaron tambi¨¦n la Constituci¨®n que sustituir¨¢ al texto aprobado en 1961. La jerarqu¨ªa cat¨®lica se inclina por el no. El obispo de la ciudad de Coro, Roberto Luckert, no se anduvo por las ramas. "El presidente Hugo Ch¨¢vez, con su actitud prepotente y arrogante, nos puede hacer caer en una dictadura constitucional, cosa peor que una dictadura militar porque tendr¨¢ el poder absoluto legitimado por la Constituci¨®n". Tampoco fue blando Baltasar Porras, presidente de la Conferencia Episcopal. "No creo que el para¨ªso de la democracia y el espejo en que debamos mirarlos sea Cuba". Se refer¨ªa el prelado a la glosa de la revoluci¨®n cubana efectuada por Ch¨¢vez durante la Cumbre Iberoamericana de la Habana. Los empresarios y los independientes m¨¢s moderados de la coalici¨®n oficialista se echaron las manos a la cabeza, y, seg¨²n las fuentes consultadas, tambi¨¦n un buen grupo de jefes castrenses.

Pero los venezolanos domiciliados en chabolas, los nacionales cansados del sistem¨¢tico saqueo bipartidista, hartos de los gobernadores y alcaldes a su servicio, el electorado adscrito a transfomaciones nacionales sin medias tintas, son mayor¨ªa en el padr¨®n y aplauden las invectivas o perdonan los exabruptos de un presidente todav¨ªa en alza. El s¨ª obtendr¨¢ un 67% de los votos, contra el 33% del no, seg¨²n el ¨²ltimo sondeo de Datan¨¢lisis.

Tampoco el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Luis Miquilena, concede mucha consideraci¨®n a los empresarios agrupados en la patronal Fedec¨¢maras. "Est¨¢n aliados con el comercio exterior y han convertido a Venezuela en un pa¨ªs de importadores de baratijas y no en un pa¨ªs productos, esos son los que est¨¢n en contra de la Consituci¨®n".