Los soci¨®logos Morin y Vidal-Beneyto advierten sobre la "ambivalencia" positiva y negativa de Internet

Para analizar c¨®mo influir¨¢ en nuestras vidas el ciberespacio hay que huir de enfoques unilaterales: Internet es un instrumento que ofrece a la humanidad grandes posibilidades, pero que a la vez entra?a peligros inquietantes. Esa visi¨®n equidistante entre catastrofismo y triunfalismo fue compartida ayer en Santiago de Compostela por el soci¨®logo franc¨¦s Edgar Morin, director de la Agencia Cultural Europea, y su colega espa?ol Jos¨¦ Vidal-Beneyto, secretario general de ese organismo, que depende de la Unesco.Vidal-Beneyto subray¨® que Internet puede contribuir a mejorar la educaci¨®n en el Tercer Mundo y tambi¨¦n favorecer¨¢ a los pa¨ªses m¨¢s atrasados porque abarata los costes de cualquier clase de intercambio. Sin embargo, no pas¨® por alto los peligros: se puede radicalizar el individualismo, propiciar el nacimiento de un neocorporativismo -comunidades cerradas con intereses o aficiones comunes, que son las que m¨¢s utilizan hoy la Red- , ensanchar las desigualdades entre ricos y pobres, contribuir a la "privatizaci¨®n sistem¨¢tica del saber y el desmantelamiento del dominio p¨²blico" y aumentar la dependencia europea de Estados Unidos. Vidal- Beneyto abog¨® por una regulaci¨®n de la Red, aunque se?al¨® que est¨¢ abierto el debate sobre qui¨¦n debe encargarse de ello.

Edgar Morin fue m¨¢s all¨¢. "Desde que nuestros antepasados prehist¨®ricos construyeron su primer instrumento hasta la moderna gen¨¦tica, la tecnolog¨ªa siempre ha tenido un car¨¢cter ambivalente", dijo. Y retom¨® un tema cl¨¢sico de la ciencia-ficci¨®n para apuntar que la red planetaria de la informaci¨®n puede convertirse en una especie de "sistema nervioso mundial" y erigirse en un ente aut¨®nomo, una especie de inteligencia artificial capaz de reconocerse a s¨ª misma, de autorreproducirse e incluso de caer en la tentaci¨®n de poner a los humanos a su servicio.

Morin y Vidal-Beneyto iniciaron as¨ª las sesiones del foro Europa Mundi, un conjunto de seminarios que se prolongar¨¢n durante todo el a?o pr¨®ximo como parte del programa de la capitalidad europea de la cultura, que Santiago compartir¨¢ en el 2000 con otras ocho ciudades del continente. "Dentro de la capitalidad europea", coment¨® el alcalde de Santiago, Xos¨¦ S¨¢nchez Bugallo, "nosotros hemos querido que personalidades de prestigio internacional reflexionen sobre los grandes problemas del siglo XXI".