Una lista injusta

La prestigosa revista L"?quipe Magazine ha publicado la lista de los que considera los 100 mejores deportistas del siglo tanto por sus actuaciones y su palmar¨¦s como por su personalidad, su impacto en el deporte y en su ¨¦poca, y su carisma. En ella no est¨¢ Miguel Indur¨¢in. Tampoco Severiano Ballesteros. Tampoco est¨¢n ellos, ni ning¨²n deportista espa?ol, en un ap¨¦ndice de 30 atletas m¨¢s que merecer¨ªan ser, seg¨²n el jurado, el deportista 101?. Se acepta que sea subjetiva. Pero tambi¨¦n es injusta.Miguel Indur¨¢in no gan¨® un Mundial porque no quiso traicionar a un compa?ero de equipo que se hab¨ªa rebelado contra su liderato. Un gesto que deber¨ªa haberle valido para llegar a los altares. Miguel Indur¨¢in no gan¨® ning¨²n maillot arcoiris, pues, pero gan¨® cinco Tours (todos seguidos, de 1991 a 1995, una gesta ¨²nica), gan¨® dos Giros, una medalla de oro ol¨ªmpica y un Mundial contrarreloj. Bati¨® el r¨¦cord de la hora. Gan¨® unas cuantas carreras. Muchas contrarreloj. No es un mal palmar¨¦s. No peor, por lo menos, que el de Bernard Hinault, Fausto Coppi, Alfredo Binda o el de Jacques Anquetil, tres de los ciclistas que est¨¢n en la lista de 100. O al de Gino Bartali o Daniel Morelon, dos que est¨¢n en el ap¨¦ndice.

Miguel Indur¨¢in fue un deportista serio y poco hablador, o sea, un marciano en una ¨¦poca en que muchos deportistas caen en la frivolidad m¨¢s detestable por salir en los peri¨®dicos. Una personalidad ¨²nica. ?Carisma? ?Qu¨¦ es el carisma? ?La sensaci¨®n superficial que hace que muchos, a primera vista, digan de alguien que es especial o un sentido m¨¢s profundo que despu¨¦s de los a?os queda como un poso ¨²nico? ?Qu¨¦ fue Indur¨¢in?

Hubo un ciclismo antes de Indur¨¢in y otro muy diferente, el que qued¨® tras su retirada el 2 de enero de 1997. Lo transform¨® el navarro, un caso de estudio para fisi¨®logos, biomec¨¢nicos y dem¨¢s especialistas. Un tipo de 1,88 y 80 kilos capaz de contrarrelojear mejor que nadie, porque para eso ten¨ªa motor; capaz de escalar mejor que nadie, porque para eso ten¨ªa una calidad ¨²nica. Riis, Ullrich... el ciclismo del siglo XXI se busca en su ejemplo. La palabra ¨¦pica, el t¨¦rmino sufrimiento, tienen otro significado despu¨¦s de su tr¨¢nsito por el ciclismo. ?Y el impacto social? Miguel Indur¨¢in fue el primer deportista espa?ol que hizo a los espa?oles sentirse superiores a todos sus vecinos, el primer deportista europeo en cuanto moderno salido de la Espa?a de la transici¨®n, tecnolog¨ªa de primer nivel mundial salida de un pa¨ªs que ven¨ªa del subdesarrollo..

Si Indur¨¢in fue producto silencioso de un deporte como el ciclismo, con tradici¨®n de d¨¦cadas en Espa?a, Severiano Ballesteros invent¨® de forma chillona y exuberante (?quer¨ªan carisma?) el golf para Espa?a y tambi¨¦n para Europa. Hay, seguro, historiales mucho mejores que el suyo (tres Open brit¨¢nicos y dos Masters), pero ninguno con el valor simb¨®lico del que fue el primer europeo que gan¨® el Masters de Augusta (1980), del de la persona gracias a la cual la Ryder Cup es un vibrante enfrentamiento entre Estados Unidos y Europa, y no lo que llevaba camino de ser, una rutinaria competici¨®n de exhibici¨®n entre americanos y brit¨¢nicos.