El nuevo partido del Kremlin gana votos gracias a la guerra de Chechenia
La sorpresa de la campa?a para las legislativas del domingo en Rusia se llama Unidad. El partido inventado por el Kremlin tres meses antes de los comicios, y que dirige el ministro para las Situaciones de Emergencia, Sergu¨¦i Shoig¨², de 44 a?os, ha seguido la estela del jefe del Gobierno. Para pasmo de los analistas, Unidad se ha situado como la segunda fuerza en intenci¨®n de voto, por detr¨¢s s¨®lo de los comunistas. Putin y la guerra le est¨¢n dando un impulso decisivo.Te¨®ricamente, Shoig¨², superviviente de todas las crisis de Gobierno de los ¨²ltimos ocho a?os, se tom¨® unas vacaciones como ministro para hacer campa?a electoral. En la pr¨¢ctica, gana m¨¢s votos como ministro que como candidato. Sus viajes a los campos de refugiados de Ingushetia y a la zona de Chechenia controlada por Mosc¨², junto a sus esfuerzos para la evacuaci¨®n de los civiles de Grozni, reciben una amplia cobertura de la televisi¨®n estatal.
Los campos modelo que el Ministerio para las Situaciones de Emergencia est¨¢ abriendo en territorio liberado son tambi¨¦n un escaparate magn¨ªfico de la eficacia de Shoig¨², que se hab¨ªa ganado un s¨®lido prestigio en un puesto en el que es dif¨ªcil tener un momento de respiro, dada la frecuencia de las cat¨¢strofes en Rusia.
La "operaci¨®n antiterrorista" en Chechenia proporciona el alimento de que se nutren ahora la popularidad de Putin y Shoig¨². ?ste se ofreci¨® a entrevistarse con el presidente checheno, Asl¨¢n Masj¨¢dov, para tratar de la evacuaci¨®n de las decenas de miles de civiles de Grozni. Y, ya sobre el terreno, se convirti¨® en protagonista (y beneficiario) de la operaci¨®n.
Su desfachatez al utilizar la guerra con fines electorales llega al extremo de aceptar la participaci¨®n en un debate por televisi¨®n con Yevgueni Primakov, cabeza de lista de Patria-Toda Rusia, siempre que se celebre en cualquier punto de Chechenia en el que "sea necesaria" su presencia.
Todo es posible en Rusia. Que haya un Gobierno sin partido propio; que el Kremlin se lo invente a ¨²ltima hora para hacer la pascua a su rival m¨¢s temible, que la ideolog¨ªa no sea determinante a la hora de votar (Unidad ni siquiera tiene un programa pol¨ªtico claro), que se creen y se destruyan reputaciones en cuesti¨®n de semanas, que el juego sucio eche por tierra todas las previsiones y que los pron¨®sticos salten en pedazos sin que cambien las variables fundamentales.El pasado agosto, el panorama era ¨¦ste: tensi¨®n en el C¨¢ucaso, esc¨¢ndalos que afectaban al c¨ªrculo m¨¢s estrecho del l¨ªder del Kremlin; Gobierno, dirigido por Sergu¨¦i Stepashin, que lo hac¨ªa razonablemente bien; y un nuevo movimiento, Patria-Toda Rusia, forjado por el alcalde de Mosc¨², Yuri Luzhkov, con apoyo de influyentes gobernadores regionales, que acababa de pescar al pol¨ªtico m¨¢s influyente del pa¨ªs: el ex primer ministro Yevgueni Primakov. Su objetivo era superar a los comunistas en diciembre y conquistar la presidencia en junio del 2000. No parec¨ªa del todo imposible.
Nada que ver con la situaci¨®n actual, en la que ni siquiera cabe contar con que los comunistas vayan a ser la fuerza m¨¢s importante de la nueva Duma. La popularidad de Primakov y la de Luzhkov han ca¨ªdo en picado. El alcalde de Mosc¨² s¨®lo parece aspirar ya a ser reelegido.
Shoig¨² arriesg¨® su reputaci¨®n, probablemente por lealtad a Bor¨ªs Yeltsin, al aceptar dirigir Unidad, una idea surgida al parecer de la mente calenturienta de Bor¨ªs Berezovski, que no descansa ni en sue?os para intentar que de los dos procesos electorales salga una situaci¨®n que le permita conservar sus privilegios y protegerle de la ira de sus enemigos. El nuevo partido, que concurre a las urnas con un acr¨®nimo que quiere dar sensaci¨®n de fuerza (Medved, Oso), logr¨® sumar a su causa, con ayuda del Kremlin, a m¨¢s de treinta l¨ªderes regionales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.