Macao gozar¨¢ de autonom¨ªa de Pek¨ªn los pr¨®ximos 50 a?os
La ¨²ltima colonia portuguesa pasar¨¢ esta medianoche a soberan¨ªa china
A medianoche de hoy (siete horas antes en la Pen¨ªnsula), las autoridades de Lisboa arriar¨¢n la bandera portuguesa en Macao. El acto pondr¨¢ fin al imperio ultramarino portugu¨¦s y acabar¨¢ con la presencia europea en China, tras la entrega de Hong Kong en 1997. La devoluci¨®n de Macao, el primer establecimiento europeo en Asia (1557), cierra el proceso descolonizador portugu¨¦s, con heridas abiertas en Timor y Angola, y prepara el camino para la ansiada reunificaci¨®n china, ahora con los ojos puestos en Taiwan.
La devoluci¨®n de Macao es el ¨²ltimo acto de un proceso descolonizador ciertamente traum¨¢tico que comenz¨® durante la revoluci¨®n de los claveles, en 1974. Este territorio chino bajo administraci¨®n portuguesa (de 22 kil¨®metros cuadrados y unos 450.000 habitantes) es una r¨¦plica en min¨²sculo de la vecina Hong Kong, pero ha alcanzado una renta per c¨¢pita de 17.000 d¨®lares, el doble que la metr¨®poli. A pesar de la proximidad en su entrega a Pek¨ªn, ambas regidas por el modelo chino "un pa¨ªs, dos sistemas", sus historias son completamente diferentes. Hong Kong fue invadida por los brit¨¢nicos durante las guerras del opio, a mediados del siglo pasado, y Macao fue cedida por un emperador mediante sobornos. Londres se resisti¨® a perder Hong Kong y Lisboa intent¨® en dos ocasiones la devoluci¨®n de Macao. La transici¨®n de Hong Kong fue crispada (el ¨²ltimo gobernador, Chris Patten, fue calificado de "criminal" por Pek¨ªn), mientras la transferencia de Macao ha sido amigable y ejemplar, a juicio de ambas partes.La diferencia entre sus econom¨ªas es abismal, pero los 10 casinos abiertos d¨ªa y noche en Macao rentaron el a?o pasado m¨¢s de 380.000 millones de pesetas de beneficios, constituyendo la base de su econom¨ªa y el 60% de su presupuesto oficial. El Casino de Oriente no es s¨®lo juego, prostituci¨®n y mafias. Las autoridades portuguesas dejan una herencia discreta. Su cultura y tradiciones forman parte de la idiosincrasia local y Macao constituye el ¨²ltimo reducto de una lengua latina con estatuto oficial en Asia (aunque s¨®lo sea hablada por un 2% de la poblaci¨®n), frente al difuminado castellano de Filipinas. Adem¨¢s se ha convertido en un nuevo s¨ªmbolo de la reunificaci¨®n china, cuyas autoridades consideran ahora "urgente" el regreso de Taiwan a la soberan¨ªa de Pek¨ªn.
La nueva Regi¨®n Especial de Macao, con similar estatuto al de Hong Kong, dispondr¨¢ de un alto grado de autonom¨ªa pol¨ªtica, al menos en los pr¨®ximos 50 a?os. Las libertades principales (expresi¨®n, prensa, asociaci¨®n, huelga o religi¨®n) est¨¢n formalmente garantizadas, si bien Amnist¨ªa Internacional (AI) ha denunciado esta semana una situaci¨®n preocupante. A juicio de AI, Pek¨ªn han negociado con Lisboa una legislaci¨®n "vaga e imprecisa" que podr¨ªa provocar en alg¨²n momento la sustituci¨®n de las leyes de Macao por las del r¨¦gimen comunista, abriendo de esta forma las puertas para una posible suspensi¨®n de los derechos constitucionales. Asimismo, no se descartan medidas de Pek¨ªn para controlar el negocio del juego e ilegalizar a la secta Falun Gong, autorizada en Hong Hong y Macao.
Este riesgo no es compartido por las autoridades de Lisboa ni por el nuevo gobernador de Macao, que esta noche tomar¨¢ posesi¨®n de su cargo. El ex banquero Edmund Ho, de 44 a?os y quien se define como "no comunista", garantiza la continuidad del r¨¦gimen especial y defiende el modelo chino para ambos enclaves: "Ser¨¢n necesarios muchos a?os, tal vez una generaci¨®n, para valorar y comprender los beneficios que producir¨¢ este sistema".
Portugal deja un territorio moderno, con buenas infraestructuras y una econom¨ªa estable. No obstante, muchos se quejan de que Lisboa ha perdido decenas de a?os en afianzar una cultura que poco a poco ir¨¢ desapareciendo. Entre los m¨¢s cr¨ªticos se encuentran los representantes de la Iglesia cat¨®lica. El padre Teixera, con 60 a?os en Macao, afirma que "muy poco se puede hacer ahora para invertir 450 a?os de historia". Y el responsable de los jesuitas, Luis Sequeira, explica: "No hay que hacerse ilusiones. Es preciso ser conscientes de que, en ¨²ltima instancia, quien va a mandar en Macao es la China continental. De todas formas, tenemos confianza y pensamos que su devoluci¨®n puede ser un punto de partida, y no de llegada".
La Iglesia cat¨®lica (con una comunidad de unas 40.000 personas, la mayor¨ªa chinas) ha sido el gran motor del territorio, al dirigir m¨¢s de 30 escuelas donde estudian unos 50.000 ni?os, adem¨¢s de mantener numerosos centros de asistencia social, asilos y guarder¨ªas. El obispo Domingos Lam, el primer prelado chino de la historia de Macao, explica, diplom¨¢tico: "No veo para el pr¨®ximo milenio el dominio de una filosof¨ªa, china u occidental. Creo que se organizar¨¢n v¨ªas de compromisos a escala global".
En cualquier caso, el primer ministro, el socialista Ant¨®nio Guterres, ha transmitido su "confianza" en el futuro de Macao, y el presidente de la Rep¨²blica, Jorge Sampaio, cree que "el balance ha sido muy positivo en el territorio. Salimos con la cabeza bien alta y podemos decir: vali¨® la pena".
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