Pisos nuevos para un activo Nou Barris
Lo que hoy es un solar al final del paseo de Valldaura, junto a la plaza de Karl Marx, en el distrito de Nou Barris, dentro de un par de a?os se habr¨¢ convertido en una de las renovadas zonas del distrito: un grupo de 250 viviendas -todas de protecci¨®n oficial- y la segunda fase del parque Central se encargar¨¢n de cambiar la cara de la entrada norte del distrito. De eso hablaron ayer el alcalde de Barcelona, Joan Clos; el concejal del distrito, Manuel P¨¦rez, y el presidente del Instituto Municipal de la Vivienda (IMU), Antoni Santiburcio, en el acto de la colocaci¨®n de la primera piedra de las viviendas.Un gran cartel de la empresa p¨²blica Regesa junto al paseo de Valldaura dibujaba el futuro pr¨®ximo de la zona. Algunos vecinos segu¨ªan el acto y los discursos desde los balcones de sus domicilios y no pocos preguntaban a d¨®nde "hay que ir" para tener informaci¨®n sobre los pisos. Los m¨¢s enterados explicaban que, en la pr¨¢ctica, todos tienen ya propietario.
Se trata de una promoci¨®n de viviendas por las que se interesaron cerca de 11.000 personas, que entraron en el sorteo de estos pisos y de otras 50 viviendas en el paseo de Urrutia, tambi¨¦n en el distrito de Nou Barris. El precio de los pisos, de entre 60 y 90 metros cuadrados, oscila entre 14,7 y 19,5 millones de pesetas y se entregar¨¢n en la primavera del 2001. Para esa fecha tambi¨¦n est¨¢ prevista la construcci¨®n de la segunda fase del parque Central de Nou Barris, un distrito que ha encarado este mandato con parecidos br¨ªos a los que tuvo en el anterior.
Inversiones millonarias
Si en los ¨²ltimos cuatro a?os, Nou Barris concentr¨® una considerable porci¨®n del pastel de la inversi¨®n municipal -cerca de 14.000 millones de pesetas-, el panorama es parecido para el cuatrienio 2000-2003. "La inversi¨®n directa ser¨¢ de unos 7.000 millones de pesetas", explic¨® Manuel P¨¦rez, quien a?adi¨® que a esa cifra se pueden sumar otros 6.000 millones de pesetas de inversi¨®n indirecta.
A diferencia de lo ocurrido en el mandato anterior, en el que Nou Barris estren¨® grandes espacios -la primera fase del parque Central-, transform¨® viejos paseos en modernos bulevares -el de Pi i Molist y el de Valldaura- y cambi¨® la fisonom¨ªa de plazas -la de Virrei Amat-, ahora el esfuerzo se concentrar¨¢ m¨¢s en los espacios interiores. "Hay que seguir mejorando el espacio p¨²blico de todos los residentes, y eso significa que despu¨¦s de los grandes paseos, que han servido para revitalizar, ahora le toca el turno a lo que no se ve tanto, a los rincones, para conseguir que tengan la misma calidad que los bulevares", explic¨® el concejal que ha sustituido al frente del distrito a Antoni Santiburcio, actualmente segundo teniente de alcalde del gobierno de Clos. Al igual que Santiburcio, P¨¦rez es defensor del llamado estilo Nou Barris, que se plasma en una urbanizaci¨®n con elementos de dise?o propios: como la iluminaci¨®n de las calles.
De acuerdo con los planes del distrito para este mandato, ahora ha llegado el turno de otras actuaciones, en Ciutat Meridiana, Canyelles y la avenida de Vallbona, y Torre Bar¨®, entre otras, adem¨¢s de la siempre aplazada renovaci¨®n forzosa de las viviendas de Trinitat Nova.
Nou Barris es un distrito que, a juicio de los propios responsables municipales, tiene bastantes carencias tanto en equipamientos como en plazas de estacionamiento. Estas ¨²ltimas se pretenden paliar con un plan de aparcamientos.
A la espera de conocer cu¨¢les son las posibilidades reales presupuestarias y de disponibilidad de suelo, los responsables del distrito calculan que son necesarios 17 aparcamientos adem¨¢s de las 3.000 plazas que se pusieron en el mercado en el mandato anterior. "Como en el resto de la ciudad, la mejora del espacio p¨²blico significa la p¨¦rdida de espacio para el veh¨ªculo en la calle, y eso en el distrito de Nou Barris, con una poblaci¨®n de 170.000 personas, es importante", comenta el concejal.
En cuanto a los equipamientos, la estrella del mandato ser¨¢, en opini¨®n de P¨¦rez, el espacio que quedar¨¢ liberado en las cocheras de autobuses de la avenida de Borb¨®n, "cuyo contenido se definir¨¢ con la participaci¨®n vecinal", subray¨®.
Desde el distrito tambi¨¦n se espera que el proyecto de la multinacional brit¨¢nica Heron para el centro l¨²dico de Renfe Meridiana comporte una importante inyecci¨®n de vitalidad para Nou Barris. "Por ejemplo, Nou Barris no tiene ni un hotel y es el ¨²nico distrito que no tiene un espacio de salas de cine", ilustr¨® el concejal.
El proyecto de Heron, que deber¨ªa estar concluido en la primavera del 2001, prev¨¦ la apertura de 16 salas de cine y un hotel con 143 habitaciones, adem¨¢s de un aparcamiento para 1.600 coches y una amplia oferta de espacios l¨²dicos. Se trata de un proyecto que tiene un valor a?adido ya que ha sido impulsado por la iniciativa privada. Este hecho es nuevo en Nou Barris donde, hasta ahora, pr¨¢cticamente toda la inversi¨®n ha llegado de la mano de las administraciones.
El transporte contin¨²a siendo otra prioridad del distrito, que sigue sin renunciar a la prolongaci¨®n del metro, una antigua reivindicaci¨®n de cientos de vecinos que se ven obligados a realizar m¨²ltiples y lentas combinaciones para sus desplazamientos.
La decisi¨®n de la Generalitat de optar por el tranv¨ªa de Nou Barris -que en principio tendr¨ªa cuatro estaciones: Trinitat Nova, Torre Bar¨®-Vallbona, Ciutat Meridiana y Can Cuy¨¤s, ya en Montcada i Reixac- sigue sin gustar a los responsables municipales. Tampoco convence al concejal de Nou Barris, quien considera que el tranvia puede ser s¨®lo una soluci¨®n provisional, "pero siempre sin descartar la posibilidad de que, en un futuro, se pueda convertir en un metro si las necesidades de la poblaci¨®n as¨ª lo requieren".
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