La escuadrilla "Espa?a" JOAN DE SAGARRA

Paul Nothomb es un joven belga de 22 a?os cuando, en septiembre de 1936, llega a Madrid para pasar el examen que le dar¨¢ acceso, seg¨²n su propia solicitud, a la tripulaci¨®n de la escuadrilla Espa?a, creada y capitaneada por Andr¨¦ Malraux para combatir a las ¨®rdenes del Gobierno de la Rep¨²blica espa?ola.El joven Nothomb es hijo de una familia mon¨¢rquica, cat¨®lica y de derechas. El padre, escritor, senador, muestra una viva simpat¨ªa por Mussolini. Alumno de los jesuitas, el joven Nothomb parece destinado a un brillante porvenir, pero el chico rechaza pasar por la Universidad y decide, a los 17 a?os, buscarse un oficio que le permita independizarse econ¨®micamente de su padre, con el que las relaciones se han vuelto muy conflictivas. Nothomb ingresa en la escuela de cadetes del Ej¨¦rcito belga, de donde sale en 1933 con el grado de subteniente. Se incorpora al ej¨¦rcito del aire y se convierte en un flamante piloto-bombardero.

Mientras tanto, Paul Nothomb se ha vuelto comunista. Sus superiores le descubren haciendo de correo de unos camaradas bolcheviques y debe abandonar el servicio activo. Al estallar la guerra civil en Espa?a, Nothomb pide a su partido que le env¨ªe all¨ª. La respuesta se har¨¢ esperar. Finalmente, atendiendo a sus "conocimientos en materia de bombarderos", Nothomb es autorizado a viajar a Espa?a. El ej¨¦rcito del aire belga lo considera desertor y su nombre es borrado de la lista de oficiales en la reserva.

Cuando Paul Nothomb llega a Madrid ya no se llama Nothomb: se llama Paul Bernier. Su familia, sus amigos y compa?eros han quedado atr¨¢s. Comienza una nueva vida, pero Paul Bernier se ha tra¨ªdo consigo a su novia, Margot Develer, comunista como ¨¦l, que participar¨¢ junto a ¨¦l en la guerra civil, con unos falsos papeles de corresponsal de guerra.

La primera sorpresa del joven Paul Bernier, su nombre de guerra, cuando es convocado por Malraux a pasar su examen en el aer¨®dromo de Barajas, es que la escuadrilla Espa?a est¨¢ compuesta principalmente por una patrulla de mercenarios. El oro de la Rep¨²blica espa?ola sirve para pagar, y bien pagar, contratos mensuales a pilotos, artilleros, t¨¦cnicos, mec¨¢nicos... incluso al cocinero, todos mercenarios. Malraux los prefiere as¨ª. ?Por qu¨¦? Por varias razones. Por la pol¨ªtica de no intervenci¨®n de Francia en la guerra civil de Espa?a. Porque un mercenario, norteamericano o h¨²ngaro, no titubear¨¢ llegado el momento de bombardear una columna de los nacionales, en la que bien puede encontrarse alg¨²n pariente; ni tendr¨¢ la tentaci¨®n de aterrizar con su aparato en un aer¨®dromo enemigo. Adem¨¢s, los mercenarios, gentes experimentadas, siempre son preferibles a j¨®venes revolucionarios, cargados de buenas intenciones, como Paul Bernier.

Pero Bernier, el joven comunista belga, es aceptado por Malraux, en condici¨®n de mercenario, como los dem¨¢s, con contrato mensual, pagado con el oro republicano. ?Por qu¨¦? ?Por comunista? Lo dudo. ?Por sus "conocimientos en materia de bombarderos"? Tal vez. Pero me inclinar¨ªa a pensar que la decisi¨®n de Malraux se debi¨®, en ¨²ltima instancia, a que Paul Bernier, de todos los aspirantes a formar parte de la escuadrilla Espa?a, era el ¨²nico que hab¨ªa le¨ªdo a Nietzsche, y le agradaba (am¨¦n de que Bernier era un espl¨¦ndido ejemplar de muchachote rom¨¢ntico, a lo Byron, con la novia adecuada). Y Malraux, puestos a rizar el rizo, no s¨®lo lo admitir¨¢ en la escuadrilla, sino que har¨¢ de Bernier el comisario pol¨ªtico de la misma. Huelga decir que Bernier no ejercer¨¢ jam¨¢s de comisario pol¨ªtico, salvo cuando tiene que acompa?ar al coronel Malraux en sus visitas al general Ignacio Hidalgo de Cisneros, jefe de la Aviaci¨®n republicana, o al embajador de la URSS. A Malraux le encantaba el teatro.

Con los a?os, no muchos -en 1943-, Paul Bernier abandonar¨ªa el partido comunista, la aviaci¨®n de combate, se casar¨ªa con Margot y se convertir¨ªa en escritor. Hoy, con el nombre de Paul Nothomb, nos ofrece su Malraux en Espagne (?ditions Ph¨¦bus, Par¨ªs, 1999. 157 p¨¢ginas, 198 francos). Un libro con unas fotograf¨ªas espl¨¦ndidas, muchas de ellas in¨¦ditas, sobre la escuadrilla Espa?a, la de los mercenarios, que luego, ya sin los mercenarios, se pas¨® a llamar escuadrilla Andr¨¦ Malraux, hechas por Raymond Mar¨¦chal, miembro de la escuadrilla, que luego fue ayudante de Malraux durante el rodaje de Sierra de Teruel, y que caer¨ªa en una emboscada con los nazis, en Corr¨¨ze, en 1944.

Un libro "utile et grave, simple et tragique", como dice Jorge Sempr¨²n en el pr¨®logo. Un libro sobre aquella "guerre d"hommes... sans doute la derni¨¨re", como la llam¨® Malraux. Un libro y unas fotos de las que he seleccionado, para ilustrar estas l¨ªneas, la que hizo Mar¨¦chal en Torrente, en el mes de diciembre de 1936, donde, "avant la prochaine bataille", se ve a un Malraux (centro) sonriente, con el eterno pitillo (que le censuraron en la emisi¨®n francesa de sellos), rodeado de gentes de la escuadrilla (Paul Bernier es el primero a la izquierda), de milicianos, de camaradas y amigos. Ser¨ªa bueno que ese libro se editase aqu¨ª. Qu¨¦ gozada para un hijo o un nieto de Torrente poder decir, respectivamente: "??ste es mi padre!". "??ste era mi abuelo!". "Estuvieron con Malraux".