"Un cineasta debe ser un humanista" RAM?N DE ESPA?A
Pregunta. Feliz Navidad, Isabel.Respuesta. Si t¨² lo dices...
P. Deduzco de ese comentario displicente que eres de esas personas que no disfrutan especialmente en estas fiestas tan entra?ables.
R. Con el tiempo lo voy llevando mejor, pero la verdad es que todo esto de la Navidad siempre me ha dado cierto asco.
P. Pero ahora tienes una hija. Se supone que, gracias a los ni?os, hasta los m¨¢s fieles seguidores del se?or Scrooge aprenden a amar la Navidad.
R. Es que a mi hija esto de la Navidad tampoco creas que le hace mucha ilusi¨®n. Las pel¨ªculas de Disney la dejan fr¨ªa y prefiere cosas m¨¢s raras, como Pesadilla antes de Navidad, aquella chaladura que produjo Tim Burton. Se la compramos en v¨ªdeo y ya la ha visto 20 veces. ?Y corre por la casa cantando "This is halloween, this is halloween!...". Me asusta, la verdad, porque me temo que ha salido a m¨ª. ?Y esto es espantoso! Yo quiero que mi hija sea una ni?a normal, popular en el colegio, querida por sus amiguitos. ?No quiero que sea una freak como su madre!
P. Yo te encuentro bastante normal.
R. Pues yo a ti no. A ver, a ti, de peque?o, ?te gustaba el f¨²tbol?
P. Intent¨¦ aficionarme para ser como los dem¨¢s ni?os, pero la verdad es que me aburr¨ªa mortalmente.
R. A m¨ª me daba asco, y comet¨ª el error de decirlo en voz alta. En el colegio no me ajuntaba nadie, y encima un d¨ªa me preguntan de qu¨¦ equipo soy y respondo que de ninguno, que a m¨ª esto del f¨²tbol me da igual. Entonces empiezan a insultarme: ?charnega, charnega!
P. ?Charnega?
R. Bueno, mi madre es de Salamanca... El caso es que me pusieron verde y yo estuve a punto de pedir perd¨®n. S¨®lo para que me aceptaran.
P. Te han acabado aceptando.
R. A buenas horas, ahora que ya no les necesito para nada.
P. Quiero decir que eres una persona respetada, que hace pel¨ªculas y rueda anuncios. Por cierto, a diferencia de otros cineastas, t¨² nunca te quejas de tener que vivir de la publicidad.
R. ?C¨®mo quieres que me queje con el dinero que gano? Adem¨¢s, a m¨ª me gusta mucho rodar. Rodar lo que sea. Una pel¨ªcula o un anuncio de compresas. Me gusta levantarme pronto, llegar al plat¨®, repartir unas cuantas broncas. En la publicidad todo est¨¢ m¨¢s claro que en el cine. Recibes un encargo, lo aceptas, lo haces lo mejor que puedes, y aire. En el cine tienes que hablar con los productores. Y lo que es peor: hacer ver que sus sugerencias te parecen interesantes.
P. Yo no s¨¦ cu¨¢les son peores, si los magnates con puro, los de toda la vida, o esos chavales con chupa de cuero y masters en universidades norteamericanas que no saben d¨®nde les da el aire.
R. Yo me quedo con los del puro, la verdad. Con ¨¦sos, por lo menos, sabes a qu¨¦ atenerte.
P. ?Por eso tienes tan poca prisa en rodar otro largometraje?
R. Cada vez que termino uno, pienso que ha sido el ¨²ltimo. Pero acabo volviendo a la carga. Tengo un proyecto, pero no quiero hablar con ning¨²n productor. Prefiero financi¨¢rmelo yo. Ya lo hice con Cosas que nunca te dije, cuyo gui¨®n propuse a un mont¨®n de gente que ni se pon¨ªa al tel¨¦fono ni me devolv¨ªa las llamadas.
P. Para esto hay que rodar muchos anuncios de compresas.
R. No tantos si ruedas en v¨ªdeo digital. Una pel¨ªcula de 150 a 200 millones de pesetas reduce su presupuesto a 40 si grabas en v¨ªdeo. He localizado una empresa en Canad¨¢ a la que le das el material y te devuelve una pel¨ªcula en 35 mil¨ªmetros. El transfer cuesta tres millones de pesetas. No est¨¢ mal, ?verdad? Y el v¨ªdeo cada d¨ªa est¨¢ m¨¢s perfeccionado. No va a ser f¨¢cil su implantaci¨®n porque Kodak y dem¨¢s se van a poner de los nervios, pero ofrece grandes posibilidades.
P. O sea, que te vas a alistar en el Dogma.
R. Todo por el Dogma, pero sin el Dogma. Ese es mi lema. El dec¨¢logo de Von Trier est¨¢ lleno de chorradas, como eso de que una pel¨ªcula no puede tener m¨²sica, pero la base del asunto est¨¢ muy bien.
P. Es que se exagera un poco con la importancia de la t¨¦cnica, ?no?
R. Totalmente. Yo siempre digo, cuando me invitan a dar una conferencia en una universidad o algo as¨ª, que un cineasta debe ser ante todo un humanista, alguien que tiene algo que decir, no un exhibicionista que mueve muy bien la c¨¢mara.
P. ?De qu¨¦ va tu proyecto?
R. Son tres historias que transcurren en Espa?a, Italia y Estados Unidos. El gui¨®n est¨¢ un poco verde. Lo ¨²nico que est¨¢ claro, de momento, es que hay un personaje inspirado en la artista Louise Bourgeois.
P. Tu cine no tiene mucho que ver con el que se est¨¢ haciendo en Espa?a, ?no?
R. Yo soy un marciano, Ram¨®n, cre¨ª que lo sab¨ªas. Por estas fechas me llegan las pel¨ªculas que me env¨ªa la Academia para las votaciones de los Goya... ?y veo cada cosa que no doy cr¨¦dito a mis ojos! Se ruedan unos guiones que no entiendes como un productor les ha podido dar el visto bueno. Y luego hay personas con historias estupendas a las que nadie les da ni los buenos d¨ªas.
P. Va por rachas, ?no? Ahora, comedias con drag queens; despu¨¦s thrillers futuristas con mucha violencia. Y de vez en cuando una superproducci¨®n con la que no hay manera de recuperar la inversi¨®n.
R. A m¨ª me gustan las historias peque?as. Por eso me gustaban las pel¨ªculas de John Cassavetes, hechas con cuatro duros, pero trufadas de sentimientos. ?Te gusta Aki Kaurismaki?
P. M¨¢s que su hermano Mika. Me encant¨® Nubes pasajeras, aquella historia del matrimonio de infelices pasmados ante lo mal que les sale todo en la vida.
R. A Kaurismaki le preguntaron una vez qu¨¦ le interesaba a la hora de filmar y dijo: "Bueno, a m¨ª me basta con una pareja hablando delante de un muro. Tambi¨¦n me conformo con una sola persona delante del muro. Y con ninguna, ya que, ahora que lo pienso, a m¨ª lo que de verdad me interesa es el muro". No puedo estar m¨¢s de acuerdo.
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