El vestuario se rebela contra Rub¨ª

Todo comenz¨® tras el ¨²ltimo entrenamiento antes de las vacaciones de Navidad. El administrador judicial del Atl¨¦tico, Luis Manuel Rub¨ª Blanc, convoc¨® a los jugadores en la sala de juntas del Calder¨®n. Nunca antes se hab¨ªa dirigido a la plantilla, y los jugadores le desoyeron. "?C¨®mo vamos a subir treinta t¨ªos?, ?que baje ¨¦l!", opin¨® un veterano. Rub¨ª, despistado ante la respuesta, mont¨® en c¨®lera. Supuso que se trataba de un desplante. Baj¨® al vestuario, y lo que all¨ª vio tampoco le agrad¨® demasiado: indiferentes a todo, los jugadores cantaban, se duchaban, se perfumaban, se afeitaban, o, simplemente, le esperaban con impaciencia para irse de vacaciones lo m¨¢s r¨¢pido posible. "Y de pronto apareci¨® este t¨ªo" -record¨® ayer un jugador joven-, "sin presentarse ni decir qui¨¦n era, ni saludar a nadie... se debi¨® creer que le conoc¨ªamos de tanto verle en los peri¨®dicos, pero de alguien que es el nuevo presidente te esperas otra cosa. S¨®lo dijo que ¨¦l se encargar¨ªa de pagarnos los contratos. Que cobrar¨ªamos. Estaba muy nervioso. Le costaba hablar". A su alrededor, algunos de los jugadores le escuchaban completamente desnudos, reci¨¦n salidos de la ducha.Hoy, el divorcio entre la plantilla y Rub¨ª Blanc es total. Indiferentes a un persona a la que consideran extra?a, los futbolistas esperan con ansiedad los primeros ingresos en sus cuentas bancarias desde que el club est¨¢ bajo administraci¨®n judicial. Presumiblemente se producir¨¢n el pr¨®ximo mi¨¦rcoles, d¨ªa en que se enfrentan al Sevilla en el S¨¢nchez Pizju¨¢n. Sospechan que el nuevo administrador les rebajar¨¢ los emolumentos y reclaman el regreso de la familia Gil a la gesti¨®n del club. Kiko, Santi, Molina y Toni representaron a la plantilla para leer ayer un comunicado que ped¨ªa, en ¨²ltima instancia, una intervenci¨®n judicial -"si la justicia quiere intervenir... que lo haga"- pero siempre con la familia Gil a cargo de la gesti¨®n, lo que implica el rechazo al actual administrador.

Las entrevistas que concedi¨® Rub¨ª a los diarios deportivos As y Marca, el pasado fin de semana, terminaron por quitarle cr¨¦dito. "?Apareci¨® posando, cogido a un escudo del Atl¨¦tico!", record¨® un futbolista con indignaci¨®n. La entrevista del As, a doble p¨¢gina -"No s¨¦ si hay dinero negro aqu¨ª, pero yo s¨®lo pago en blanco, el que se quiera marchar que pague su cl¨¢usula de rescisi¨®n", asever¨® el administrador- irrit¨® especialmente al vestuario, que no soporta su repentino protagonismo.

Conocedor del efecto de su proceder, Rub¨ª Blanc ha optado por no conceder m¨¢s entrevistas, seg¨²n reconoci¨® ayer a este peri¨®dico el jefe de relaciones externas del Atl¨¦tico, Gordon Savic: "Se ha dado cuenta de que lo mejor es no hacerlo porque lleva poco tiempo en el club y tiene que dar respuesta a cuestiones que todav¨ªa no acaba de estudiar completamente".

La plantilla habla a diario con Gil, a quien considera su "presidente". El propio Gil se ha ocupado de asesorar a los jugadores. Instalado en su centro de operaciones, en el Club Finanaciero, Gil se afana desde hace una semana en establecer lazos con la plantilla y con Claudio Ranieri, el t¨¦cnico. Sobre todo, a la hora de coordinar sus discursos a la prensa. A trav¨¦s de su mensaje, los futbolistas pidieron ayer algo que sugiri¨® Ranieri en su discurso del 31 de diciembre y que est¨¢ pidiendo la familia Gil: que el juez les deje administrar el Atl¨¦tico, aunque para ello deban soportar una intervenci¨®n judicial de su gesti¨®n.

Por otra parte, Rub¨ª Blanc visit¨® ayer al presidente de la federaci¨®n espa?ola, ?ngel Mar¨ªa Villar, para informarle sobre la situaci¨®n del Atl¨¦tico. Rub¨ª expres¨® su confianza en que el club no resulte afectado en el aspecto deportivo.

Un ojo en la cuenta bancaria

Los futbolistas advirtieron de que podr¨ªan dejar el Atl¨¦tico si reciben ofertas y la crisis se prolonga -porque "es humano y comprensible"-. De hecho, viven desde hace dos semanas con un ojo en sus cuentas bancarias, seg¨²n confesaron ayer algunos miembros de la plantilla. Se trata de una "inquietud" propiciada por el rumor -difundido por Jes¨²s Gil- de que un buen porcentaje de los contratos se paga en dinero negro.

La plantilla imagina estrepitosas reducciones en sus emolumentos. Por l¨®gica, los jugadores entienden que un administrador judicial asesorado por seis inspectores de Hacienda no pagar¨¢ en negro. Mientras tanto, desde la familia Gil reciben mensajes contradictorios. Jes¨²s Gil insinu¨® que sus m¨¦todos de pago eran poco claros. Su hijo, el director general del Atl¨¦tico Miguel ?ngel Gil, asegura que sus pagas no se hacen en negro y cobrar¨¢n todo. Se tratar¨ªa, seg¨²n han sido informados los jugadores, de procedimientos "no contemplados por la ley", artilugios de ingenier¨ªa financiera contra los que Rub¨ª no puede hacer nada porque "no son delito". Aunque, para muchos, s¨®lo el banco podr¨¢ dar buenas noticias. Como confes¨® ayer un jugador: "Hasta ahora s¨®lo escuch¨¦ palabras pero el hecho es que yo estoy preocupado; vivo pendiente del banco. No s¨¦ si voy a cobrar".