El Espanyol neutraliza al Depor

El l¨ªder defraud¨® en Montju?c. El Deportivo, que llegaba de perder dos partidos consecutivos, doblar¨¢ la primera vuelta del campeonato en primer lugar pero viendo como se le acercan sus rivales. La entusiasta pero discreta r¨¦plica del Espanyol bast¨® para que el equipo gallego se dejara otros dos puntos en su carrera por el t¨ªtulo.El Espanyol plante¨® el partido desde una audacia ins¨®lita y asumi¨® el riesgo de caer en la ingenuidad de tutear al Deportivo. Fue a pecho descubierto a por el l¨ªder. Propuso un ritmo que por momentos se hizo insostenible. Naybet y Donato tuvieron que multiplicarse para romper las diagonales que trazaron los lebreles del Espanyol. En ese sentido la labor de De Lucas a espaldas de los puntas, Tamudo y Serrano, llev¨® por la calle de la amargura a la defensa del Depor. De Lucas, que releg¨® al banquillo a Arteaga, fue quien mejor sorprendi¨® a Songo"o porque su movilidad le proporcion¨® momentos para el remate seco e imprevisible.

Irureta renunci¨® al doble pivote y situ¨® a Jokanovic en el carril izquierdo, dejando a Mauro Silva en el centro y a Flavio en la derecha, mientras que Djalminha y Turu Flores actuaron por las bandas y Makaay bascul¨® partiendo desde la posici¨®n de delantero centro. El Deportivo cape¨® el trasiego constante con el que le busc¨® las vueltas el Espanyol. Y se pas¨® as¨ª un buen rato. Pero en sus primeras exploraciones en el terreno de los de Brindisi detect¨® que pod¨ªa obtener ping¨¹es beneficios. La defensa del Espanyol se desballest¨® de una forma tremenda. En dos o tres ocasiones quedaron hasta tres jugadores del Deportivo con el camino expedito para el remate. Mora le sac¨® un remate de cabeza a Jokanovic que, en su segunda incursi¨®n en el ¨¢rea del Espanyol, envi¨® el cuero al palo cuando, totalmente solo, hab¨ªa recibido un centro enviado desde la derecha por Djalminha. Fue una de las mejores pruebas de la superioridad que adquir¨ªa el l¨ªder cuando se mov¨ªa en vanguardia. Pero no acababa de desplegarse con el convencimiento preciso y que se le supone al equipo que viaja con varios largos de ventaja en el campeonato.

El Deportivo gan¨® metros en la segunda parte y eso provoc¨® que el toma y daca fuera mucho m¨¢s directo. Por momentos desapareci¨® la transici¨®n. El acarreo del bal¨®n fue visto y no visto o bien se eligi¨® el pase largo. As¨ª lleg¨® otra gran ocasi¨®n para el Deportivo. La excelente visi¨®n de Flavio, en un pase al hueco, se combin¨® con la lentitud de Nando. Makaay se qued¨® solo ante Mora pero su env¨ªo, con el exterior del pie, sali¨® demasiado alto.El Espanyol replic¨® con un remate a quemarropa de Serrano que detuvo Songo"o saliendo todav¨ªa no se sabe donde.

Brindisi volvi¨® a demostrar su audacia. Si empezar el partido con s¨®lo dos extranjeros -Galca y Navas- ya es un farol en los tiempos que corren, decidi¨® hacer debutar a David Garc¨ªa, otro m¨¢s de los muchos canteranos que est¨¢ promocionando el t¨¦cnico argentino. De esta forma hizo que Navas abandonara el lateral izquierdo -que por falta de efectivos ocupa como titular- y lo devolvi¨® por una vez a su puesto natural de volante derecho. David Garc¨ªa se asoci¨® en la banda izquierda con Toni Velamaz¨¢n mientras que Ben¨ªtez trat¨® de aportar m¨¢s madera al fuego relevando a un desfondado De Lucas. No tuvo bastante con ello Brindisi. Acab¨® el entrenador del Espanyol gan¨¢ndose la bronca del p¨²blico cuando, a 20 minutos para el final, retir¨® a Tamudo y dio entrada a Arteaga. Un cambio, delantero por centrocampista, que parec¨ªa delatar que se contentaba con el empate. El Espanyol efectivamente se tap¨® atr¨¢s y trat¨® de ofrecer respuesta ya ¨²nicamente a base de contraataques.

Irureta relev¨® a Makaay y Turu Flores para dar entrada a Fran e Iv¨¢n P¨¦rez y el dominio del Deportivo acab¨® siendo descarado. Pero en esos minutos no logr¨® acabar ninguna acci¨®n. Se perdi¨® en sus intentos de llegada por la derecha -Manuel Pablo se incorpor¨® desde atr¨¢s ya de forma permanente- y en el caracoleo excesivo de sus talentosos centrocampistas. Un desperdicio. El juego no dio nada de s¨ª. Ni una sola ocasi¨®n m¨¢s hubo. El Deportivo tuvo el bal¨®n pero no supo c¨®mo administrarlo. El l¨ªder no encontr¨® manera de plasmar su superiodad te¨®rica y territorial ante el aplicado repliegue espa?olista. El equipo gallego se llev¨® de Montju?c las mismas malas sensaciones de las dos ¨²ltimas jornadas en las que cay¨®. Ayer empat¨® pero su juego no estuvo muy por encima del que le llev¨® a caer ante el Zaragoza y el Racing.