El mundo de la sonata

Pasadas las fiestas, Iberm¨²sica reanud¨® sus ciclos con un concierto de la violinista Midori y el pianista Robert McDonald. Una de las grandes estrellas Sony, la violinista Midori, que todav¨ªa no ha cumplido 30 a?os, ha grabado ya lo m¨¢s importante del repertorio con orquesta y numerosas p¨¢ginas violin¨ªsticas, d¨²os y sonatas. Realmente, el arte de esta artista de Osaka posee no s¨®lo nobleza, facilidad y dominio, sino tambi¨¦n una especial fascinaci¨®n: es un arte singular e intransferible hecho de sutilezas, refinados colores, sentimientos moderados y sonoridades y expresiones confidenciales. Midori es de las int¨¦rpretes que parece dirigirse a todo el p¨²blico, unidad por unidad.

Colabora con la violinista japonesa el pianista norteamericano Robert McDonald, un virtuoso que dedica la mayor¨ªa de su tiempo a los g¨¦neros de c¨¢mara en los que es un aut¨¦ntico maestro.

El tercer elemento con que cuenta Midori es un instrumento Guarnerius, de 1734, que perteneci¨® al legendrio Bronislaw Hubermann (1882-1947), con lo que el "c¨ªrculo m¨¢gico" se completa para ofrecernos versiones tan prodigiosas como la de la Sonata compuesta en 1943 por Francis Poulen? en memoria de Federico Garc¨ªa Lorca. Hermosa y original p¨¢gina, evidencia el talento, la riqueza de ideas y la perfecci¨®n de escritura que cualific¨® al autor franc¨¦s.

Antes, el d¨²o Midori-McDonald hicieron, con grave y natural estilo, la Sonata en mi mayor (BWV 1016) de Juan Sebasti¨¢n Bach y despu¨¦s las Piezas Op. 7, de Ant¨®n Webern, entendidas de forma maravillosa en su concisi¨®n, ordenaci¨®n exacta y ejemplar concentraci¨®n. Termin¨® el concierto con la siempre admirable Sonata a Kreutzer, todo un universo musical nuevo en su pensamiento y en su lenguaje, que, junto a otras muchas creaciones del compositor de Bonn, contribuy¨® decisivamente a la conquista de una nueva ¨¦poca (la del Romanticismo) y a la humanizaci¨®n dram¨¢tica de la m¨²sica, incluso en sus formas m¨¢s objetivas. Un soberano recital acogido con entusiasmo por los asiduos de estos grandes ciclos.

Al margen del comentario sobre Midori, no estar¨¢ de m¨¢s recordar que esta violinista, asidua en los programas de la televisi¨®n CNN, mantiene una fundaci¨®n -Midori and Friends- de conciertos y actividades educativas para ni?os a fin de descubrirles el mundo de la m¨²sica al que, por lo general, no ten¨ªan acceso.