El programa radiof¨®nico "Hablar por hablar", de la SER, se convierte en una obra de teatro
Desde su primera emisi¨®n en 1990, el programa de la cadena SER Hablar por hablar se ha consolidado como el de m¨¢s audiencia de las madrugadas radiof¨®nicas. La periodista Gemma Nierga, que impuls¨® el espacio y fue su primera conductora -hasta 1997, cuando la relev¨® Fina Rodr¨ªguez- reuni¨® en un libro historias recogidas en el espacio, basado en llamadas que realizan los oyentes para explicar sus problemas. El libro ha servido de base para la versi¨®n teatral del programa, que se estrena ma?ana en la barcelonesa sala Artenbrut bajo la direcci¨®n de Josep Costa.
El director se ha responsabilizado tambi¨¦n de la adaptaci¨®n de los relatos que Nierga recogi¨® en su libro. Costa asegura que el resultado final es absolutamente fiel al original, s¨®lo que se han seleccionado las historias con m¨¢s fuerza esc¨¦nica y se han descartado las m¨¢s morbosas. "Me daba mucho miedo hacer un reality show", reconoce el director. "He intentado escoger las historias m¨¢s absurdas, aquellas que confirman el dicho de que la realidad supera a la ficci¨®n, para que el resultado se parezca a lo imaginado", dice, y cita el sexo, el f¨²tbol y la religi¨®n como los temas recurrentes del espect¨¢culo.Gemma Nierga, muy satisfecha con la adaptaci¨®n teatral de Hablar por hablar asegura que, con este criterio de selecci¨®n, el montaje est¨¢ muy pr¨®ximo al esp¨ªritu con que ella se enfrent¨® al espacio radiof¨®nico durante sus cinco a?os al frente del mismo: "Aunque yo le tengo mucho cari?o, reconozco que es un tipo de programa que roza siempre la ordinariez, el morbo, y yo siempre intentaba no traspasar la l¨ªnea", indica.
La versi¨®n teatral del programa se ha titulado en catal¨¢n, Parlar per parlar, y los cuatro actores que la interpretan (?ngel Amazares, Gemma Charines, Juan Jim¨¦nez y Luc¨ªa Leiva) combinan indistintamente esta lengua y el castellano; de este modo se remite a los or¨ªgenes del espacio radiof¨®nico, cuando se emit¨ªa s¨®lo en Barcelona y las intervenciones de los oyentes eran biling¨¹es.
Con un vestuario neutro, sin caracterizaci¨®n y con la ¨²nica ayuda de los cambios de luces, los int¨¦rpretes se van desdoblando en diferentes personajes. Adem¨¢s, todos ellos se alternan la funci¨®n del locutor, de la persona que estimula la confesi¨®n de los personajes. "La idea es presentar aquellas situaciones en las que una persona con un problema determinado se ve con fuerzas para explicarlo en p¨²blico", se?ala Costa. La obra estar¨¢ en cartel hasta el 12 de febrero en horario de medianoche.
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