La joven violada por polic¨ªas en Bilbao sostiene que fue golpeada en la comisar¨ªa

La joven Rita Margarete R., violada en los calabozos de la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Bilbao en 1995, sostuvo ayer en la Audiencia Provincial de Vizcaya que fue golpeada en la comisar¨ªa por varios agentes para que confesara que se dedicaba a la prostituci¨®n. En la primera sesi¨®n del juicio sobre esos presuntos hechos, los dos agentes del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa acusados negaron las imputaciones.En su interrogatorio, el fiscal trat¨® de desacreditar las explicaciones de la joven brasile?a, que irrumpi¨® en sollozos en varias ocasiones, y trat¨® de mostrar ante la secci¨®n primera de la Audiencia que los olvidos y contradicciones en su relato se deben a que miente. El fiscal no acus¨® a los dos agentes sentados en el banquillo -acompa?ados en la sala por varias decenas de compa?eros-, les pregunt¨® como si la agresi¨®n no estuviera acreditada y trat¨® de sostener que Rita Margarete R. ejerc¨ªa la prostituci¨®n cuando fue arrestada, en agosto de 1995.

"Es intolerable; esta Fiscal¨ªa ha resultado a¨²n m¨¢s terrible que la del juicio por violaci¨®n", afirm¨® posteriormente, indignado, el abogado de la acusaci¨®n particular en ambos casos, Alfonso Matas. La Audiencia de Vizcaya y posteriormente el Tribunal Supremo sentenciaron que la joven brasile?a fue violada en los calabozos de la comisar¨ªa de polic¨ªa, si bien quedaron absueltos los agentes acusados. El letrado pide dos penas de seis a?os de prisi¨®n y otros tantos de inhabilitaci¨®n para el inspector Juli¨¢n Alca?iz y el funcionario Eustaquio Ramiro D¨ªaz.

A Alca?iz, Rita Margarete R. le implic¨® en amenazas verbales contra su persona y de tratar por todos los medios de forzarla para que reconociera que ejerc¨ªa la prostituci¨®n. El inspector, que asegur¨® no tener dudas de que la mujer ejerc¨ªa la prostituci¨®n, neg¨® las acusaciones. A preguntas de la defensa, calific¨® de "provocativa" la forma en que vest¨ªa la mujer cuando fue detenida: "Un chaleco y una minifalda".

A Ramiro D¨ªaz, la testigo lo acus¨® de ser el polic¨ªa que le sujet¨® por los brazos "mientras sonre¨ªa" cuando otro funcionario, que no ha sido reconocido, le golpeba fuertemente en la espalda. El imputado lo neg¨® y asever¨® que se limit¨® a trasladar a la detenida desde las oficinas a los calabozos. La v¨ªctima afirm¨® que mientras le pegaban le dijeron que no se preocupara porque no le quedar¨ªan marcas.