El pa¨ªs con la pol¨ªtica m¨¢s restrictiva de toda Europa
Austria, un pa¨ªs con ocho millones de habitantes, limita el establecimiento de extranjeros no procedentes de la UE en un cupo inamovible, que cada Estado federado fija anualmente. Para el 2000 se ha reducido la cuota en un 9%. El Ministerio del Interior inform¨® de que se conceder¨¢n en total 8.235 permisos de residencia. De ¨¦stos, 5.000 se destinan a familiares de extranjeros ya residentes, que probablemente podr¨¢n vivir en este pa¨ªs, pero sin trabajar legalmente. Porque hay otro cupo que limita los permisos de trabajo, de modo que los extranjeros no superen en n¨²mero el 8% del mercado laboral austriaco.Este freno perjudica la integraci¨®n y favorece el desarrollo de la econom¨ªa sumergida. Como en el caso del esposo de Lili. Ella, empleada de servicio de limpieza de nacionalidad yugoslava, tiene desde hace ocho a?os los papeles de residencia y trabajo en regla. Su hijo, de cinco a?os, naci¨® en Austria. Su marido, residente legal desde hace dos a?os, no consigue regularizar su trabajo pese a la buena voluntad de su patr¨®n, porque el cupo del mercado laboral est¨¢ completo.
Ilegal tras el divorcio
No es ¨¦sta la ¨²nica paradoja. Los inmigrantes, sumergidos en absurdos laberintos kafkianos, sucumben a veces en la desesperaci¨®n. Pero la opini¨®n p¨²blica apenas advierte las tragedias que ocurren al margen de la sociedad pudiente de este peque?o pa¨ªs alpino, uno de los ocho m¨¢s ricos del mundo. S¨®lo unos pocos, como Peter Zuser, experto del Fondo de Integraci¨®n del Municipio de Viena, registraron el pasado verano el suicidio de un ciudadano nigeriano que se quit¨® la vida al constatar que no pod¨ªa evitar ser repatriado. Llevaba m¨¢s de un decenio viviendo legalmente en Austria, casado con una austriaca, con quien ten¨ªa un hijo. Al divorciarse perdi¨® el permiso ilimitado de residencia y qued¨® autom¨¢ticamente convertido en un "clandestino".
Zuser constata que la pol¨ªtica de extranjer¨ªa austriaca es de las m¨¢s restrictivas de Europa. Para instalarse en Austria hay que solicitar el permiso de residencia desde el exterior, pero una respuesta positiva es casi imposible porque los cupos est¨¢n pr¨¢cticamente completos ya para los pr¨®ximos a?os. A los inmigrantes clandestinos -sobre los cuales no existe cifra oficial- no se les da ninguna oportunidad de regularizaci¨®n y son deportados a sus pa¨ªses de origen. Hay pocas excepciones de los "sin papeles" menores de 14 a?os, autorizados a permanecer en el pa¨ªs por motivos humanitarios mediante intervenci¨®n directa del ministro del Interior. Un caso aparte son los solicitantes de asilo pol¨ªtico, que no son expulsados mientras no concluyan los tr¨¢mites.
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