El Casino de Barcelona duplica en el Port Ol¨ªmpic el n¨²mero de visitantes
La sociedad Inverama, explotadora del Casino de Barcelona, ha aumentado sus perspectivas de negocio con el traslado del casino de Sant Pere de Ribes al Port Ol¨ªmpic de Barcelona. Al menos, eso indica el volumen de visitantes que han recibido las nuevas instalaciones, ubicadas en los bajos de la torre del hotel Arts. En los primeros seis meses de actividad all¨ª, han acudido 319.990 personas frente a las 141.889 que visitaron las instalaciones de Sant Pere de Ribes en el mismo periodo de 1998.
El n¨²mero de visitantes se ha incrementado en un 226% entre julio y diciembre de 1999 respecto al mismo periodo de 1998. Las previsiones que el presidente de Inverama, Artur Suqu¨¦, present¨® el pasado 2 de julio, en la apertura del nuevo emplazamiento, se?alaban que la empresa esperaba tener 500.000 visitantes anuales y unos ingresos en torno a 5.000 millones de pesetas. En cuanto al n¨²mero de visitantes, el resultado de los primeros seis meses muestra que la cifra de medio mill¨®n puede alcanzarse. Respecto al volumen del negocio, un portavoz del casino de Barcelona manifest¨® ayer que todav¨ªa no se puede hacer un c¨¢lculo o comparar el incremento de ingresos desde que se instal¨® en el Port Ol¨ªmpic: "Ahora se acaba de cerrar el ejercicio, por lo que las cifras del negocio todav¨ªa no est¨¢n disponibles".El incremento de visitantes extranjeros en los ¨²ltimos seis meses ha sido realmente espectacular: el 512%. El cambio de divisas en las cajas del casino ha aumentado el 224% respecto al mismo periodo de 1998, cuando las instalaciones estaban en Sant Pere de Ribes. El contravalor del cambio de divisas fue de 320 millones de pesetas en los primeros seis meses de funcionamiento de las salas en el Port Ol¨ªmpic. Los dirigentes de Casinos creen que esa progresi¨®n demuestra el acierto del cambio de ubicaci¨®n porque ha servido para atraer a m¨¢s turistas que han encontrado en el casino una oferta m¨¢s de ocio de la ciudad.
En cuanto a las modalidades que han cosechado mayor ¨¦xito, las tradicionales mesas de juego son las que han aumentado m¨¢s el n¨²mero de usuarios. Por el contrario, la amplia oferta de m¨¢quinas tragaperras se ha demostrado excesiva para la cantidad de personas que las utilizaban en el casino. En consecuencia, los explotadores del casino optaron por retirar 94 m¨¢quinas de las 375 que se instalaron en su apertura. Para los responsables del casino de Barcelona, la falta de demanda en el caso de las tragaperras est¨¢ relacionada directamente con la obligatoriedad que impuso el Ayuntamiento de Barcelona de que la zona de las m¨¢quinas no fuera de libre acceso del p¨²blico. Es decir, restringi¨® el ¨¢mbito a un ¨¢rea en la que fuera necesario cumplimentar el control e identificaci¨®n de acceso. "No se trata de una cr¨ªtica a la imposici¨®n del Ayuntamiento, es lo que ha ocurrido", comentaba ayer un portavoz del casino que, no obstante, recordaba la completa libertad de acceso a las 30.000 m¨¢quinas tragaperras que hay instaladas en bares, bingos y salones de Barcelona. Los responsables del casino de Barcelona opinan que la nueva ubicaci¨®n de la sala de juego no ha comportado el incremento de ludopat¨ªas, uno de los argumentos que se esgrimi¨® contra el traslado.
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