Mart¨ª Dom¨ªnguez Escritor "En algunas cosas, Cavanilles era un chorizo"
Pregunta. ?Su vocaci¨®n literaria guarda alguna relaci¨®n con el hecho de que su abuelo fuera escritor?Respuesta. Inevitablemente. En mi casa siempre se habl¨® de literatura. Y sobre todo, de arte. Era m¨¢s complicado hablar con mi abuelo de literatura que de arte, pero el gusto por los libros siempre estaba presente. Aunque mi abuelo nunca ley¨® nada m¨ªo. Siempre me dec¨ªa: "Mante, t¨² a los animalitos, a los animalitos", porque a ¨¦l le gustaba mucho la Historia Natural. Lo m¨¢s interesante es que era un hombre con curiosidad: le interesaba todo. Ten¨ªa libros raros, como el de La vida de las mariposas, que me llam¨® mucho la atenci¨®n de peque?o y, en cierto modo, determin¨® mi inter¨¦s por la biolog¨ªa.
P. La gente que conoci¨® a su abuelo y le conoce a usted asegura que son iguales.
R. El hecho de que mi padre fuese hijo ¨²nico condicion¨® una relaci¨®n muy intensa entre ¨¦l y yo. Aunque ¨¦l ten¨ªa una moralidad mucho m¨¢s estricta, que determin¨® su obra literaria. Nunca pudo zafarse del sentimiento cat¨®lico que inundaba su modo de escribir, de ver el mundo. Era una persona de orden, pero dentro del seny, en el sentido bearniano de rechazo a las cosas modernas. Pero mi abuelo, pese a ser un representante de la Derecha Regional Valenciana, se la jug¨® al criticar al r¨¦gimen porque no llegaban las ayudas prometidas a Valencia tras la riada. A partir de entonces fue el gran proscrito: terminaron con ¨¦l. Le cost¨® la profesi¨®n de periodista, aunque quiz¨¢ por eso pudo hacer novelas, teatro y poes¨ªas.
P. Usted tambi¨¦n empez¨® haciendo versos, ?no?
R. S¨®lo he hecho poes¨ªa excremencial. O fisiol¨®gica, si quiere. Es inevitable hacer poes¨ªa, si realmente tienes pasi¨®n literaria. Es lo primero que te sale, pero luego eliges tu camino.
P. ?Su obra ser¨ªa distinta si no fuese bi¨®logo?
R. Eso me ha permitido tener una visi¨®n diferente de las cosas. Puedo describir paisajes de un modo que un escritor quiz¨¢ no har¨ªa. Incluso personas, porque las m¨ªas no son balzaquianas, ni freudianas, sin¨® m¨¢s darwinianas. Es curioso que los escritores no hayan asimilado El origen de las especies. Todav¨ªa tienen un visi¨®n divina de la existencia.
P. ?La biolog¨ªa fue la que le llev¨® a Buffon?
R. La biolog¨ªa y, adem¨¢s, que Buffon se exig¨ªa un modo de escribir y una serie de planteamientos intelectuales. Rousseau fue el gran escritor franc¨¦s, por encima de La Bruy¨¨re, pero quien ense?¨® a Rousseau fue Buffon. Ese personaje, que ten¨ªa una gran pasi¨®n por la Historia Natural, pero a la vez escrib¨ªa, reflexionaba y buscaba ideas que creasen caminos, es el que me interesaba. Lo mismo que Goethe, que no s¨®lo se dedicaba a escribir.
P. ?Los contempor¨¢neos han perdido esa capacidad de diversificar el inter¨¦s?
P. Era m¨¢s propia del siglo XVIII, donde el conocimiento no era tan amplio y era m¨¢s f¨¢cil acceder a las distintas disciplinas. La actual especializaci¨®n me parece muy perjudicial. Es lo que explica que los escritores no hayan asimilidado los pensamientos cient¨ªficos del ¨²ltimo siglo y que todav¨ªa exista una desconexi¨®n entre los conocimientos de lo que es el hombre desde el punto de vista biol¨®gico. Eso antes no se daba. Goethe incorpora las teor¨ªas cient¨ªficas, y Rousseau, y Voltaire...
P. Hasta ahora ha demostrado una predilecci¨®n por esa ¨¦poca. ?Es incapaz de escribir sobre el presente?
R. No me ha interesado tanto ese periodo como las ideas de ese per¨ªodo. Lo que me gustar¨ªa es hacer una novela que mantuviese esas ideas y que estuviese ambientada en la ¨¦poca contempor¨¢nea, y as¨ª me evitar¨ªa la discusi¨®n sobre si lo que hago es novela hist¨®rica o no.
P. Y usted qu¨¦ dice que es.
R. Novela, y punto. Es muy perjudicial a?adir adjetivos a los g¨¦neros. Es novela, ficci¨®n absoluta. Reconstruyo los escenarios para que sea veros¨ªmil, pero me da igual si es verdadero o no. Dicho eso, el escenario de mi pr¨®xima novela es contempor¨¢neo y cercano. Valencia, para m¨¢s se?as.
P. ?Qu¨¦ fue de su obra acad¨¦mica?
R. Me d¨ª cuenta que me mor¨ªa de hambre, por lo que con gran dolor tuve que abandonar la investigaci¨®n y encauzarla por la vertiente literaria y period¨ªstica. Ahora he llegado a un punto en que ya no s¨¦ cu¨¢l es mi profesi¨®n.
P. ?Le interesan m¨¢s los bichos que las personas?
R. He aprendido mucho de las personas gracias a los bichos. Sobre todo, de las polillas, que son las que m¨¢s informan del comportamiento humano. En el fondo, todo es biolog¨ªa animal. Tienes una tendencia a ver las cosas de una manera m¨¢s materialista y m¨¢s dura. Quiz¨¢ m¨¢s intransigente tambi¨¦n. Te cuesta m¨¢s creer en las buenas intenciones y la caridad, porque ves la biolog¨ªa por debajo de todo.
P. ?Cu¨¢l es la mayor ense?anza de los bichos?
R. El egoismo. El canto del ruise?or, que nos parece tan bello, es un canto de guerra, una afirmaci¨®n egoista. Desde la forma de la flor hasta la telara?a, todo est¨¢ dise?ado desde el egoismo, con el objetivo de la supervivencia y la posteridad.
P. ?El hombre es la m¨¢s ben¨¦vola de las criaturas?
R. En cierto modo, s¨ª, porque a¨²n llega a plantearse un comportamiento altruista que no existe en la naturaleza. Por eso es necesario conocer qu¨¦ somos para poder combatirnos, porque si adoptamos la actitud de que el hombre es bueno por naturaleza y que es el ambiente quien los hace malos, estamos perdidos. Estamos determinados a la violencia, a la xenofobia y a evitar que el pr¨®jimo pise nuestro territorio. Es un animal territorial y act¨²a en consecuencia. Lo vemos todos los d¨ªas. Estos pensamientos me comportan muchos problemas, pero los veo en la biolog¨ªa.
P. ?En qui¨¦n cree m¨¢s en Joan Fuster o en Antonio Jos¨¦ Cavanilles?
R. Cavanilles era un hombre de un egoismo desmesurado. Aqu¨ª se glorifica a Cavanilles sin saber qui¨¦n era. Era una persona muy conflictiva, d¨¦spota en su trabajo y que no s¨®lamente no ech¨® una mano a otros bot¨¢nicos cuando lo necesitaban, sino que les cogi¨® muchas plantas y las describi¨® en su nombre. En algunas cosas era un chorizo. Lo que ocurrre es que hizo un buen trabajo, Las observaciones, pero no es como para creer en ¨¦l. Tampoco es que crea en Fuster, pero es le¨ªdo y m¨¢s interesante. Puedes aprender m¨¢s con Fuster, porque un autor no es lo que te dice sino lo que te hace leer.
P. Quiz¨¢ crea en Mayans.
R. Gregorio Mayans era un gran ilustrado, pero menos le¨ªdo que Cavanilles.
P. ?Los valencianos hemos tenido m¨¢s ilustrados que Ilustraci¨®n?
R. Ahora tenemos much¨ªsimos. M¨¢s que cuando tocaba. Es la nueva epidemia. El ilustrado es aquel que tiene una clara vocaci¨®n de ilustrar con su trabajo y sus obra a los dem¨¢s, y no comunicarse en lat¨ªn con un acad¨¦mico de Holanda. ?sta es la vocaci¨®n de Diderot, de Rousseau y los hermanos ilustrados: llevar la ciencia y la literatura al pueblo contra el academicismo de los eruditos. Lo que ha ocurrido aqu¨ª es que hemos tenido una serie de eruditos, quiz¨¢ no tan notables y m¨¢s interesados en el politiqueo que en la cultura. Y no influyeron aqu¨ª en absoluto, aunque est¨¢ bien que aqu¨ª se recuerde a los eruditos. Pero construir un Museo de la Ilustraci¨®n en una ciudad que es pr¨¢cticamente analfabeta parece un contrasentido. Ser¨ªa m¨¢s razonable que la casa del gran ilustrado, que fue Fuster, la reparasen e hiciesen un centro de cultura importante.
P. ?C¨®mo se llevaron su abuelo y Fuster?
R. Mi abuelo era muy religioso, y eso lo alej¨® de Fuster. Fuster en muchos sentidos fue bueno para el pa¨ªs, pero en muchos otros, no. En cierto sentido, con sus ri?as fisiol¨®gicas, es el causante de todo lo que ha pasado luego. Mi abuelo nunca toler¨® que escribiese en catal¨¢n oriental, porque cre¨® mucha confusi¨®n. Pero pese a todo yo me considero fusteriano.
P. ?C¨®mo valora el Museo de las Ciencias que se est¨¢ construyendo?
R. Cuando estuve en Washington investigando en el centro de Smithsonia, uno de los directores de exposiciones me cont¨® que unos valencianos hab¨ªan estado all¨ª para comprar todas las exposiciones, incluso las que ellos no quer¨ªan exponer, para el Museo de las Ciencias. Eso es lo que no tiene sentido: un museo no tiene que venir de fuera sino salir desde dentro de la Universidad y de la sociedad. De lo contrario, siempre ser¨¢ una falla. Disneylandia pura.
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