Desnudo masculino

JOSU BILBAO FULLAONDO

Representante destacado de la foto de glamour en el Pa¨ªs Vasco, Pedro Usabiaga (San Sebasti¨¢n, 1959) est¨¢ exponiendo estos d¨ªas un breve retazo de su amplio portafolio en el Gran Casino Nervi¨®n. Se trata de una retrospectiva de veinte a?os de trabajo intenso en la fotograf¨ªa de moda. La colecci¨®n es un amplio abanico donde un torero como El Litri comparte espacio con Sharon Stone, Arnold Schwarzenegger o el futbolista Rafael Alkorta. Entorno a los modelos, desvestidos o medio desnudos, entre los que prevalece la presencia masculina, teje con precisi¨®n una sutil atm¨®sfera cargada de atracci¨®n sensual que le ha llevado a un sobresaliente reconocimiento profesional.

Despu¨¦s de unos estudios frustrados de imagen y sonido en Madrid marcha a Par¨ªs donde aprende con Jean Louis Spieff los rudimentos m¨¢s importantes de la foto de moda y el desnudo. Su bachillerato en el colegio franc¨¦s de San Sebasti¨¢n y la c¨¢mara fotogr¨¢fica que le regal¨® su padre cuando ten¨ªa diez a?os, para que estuviese entretenido, fueron precedente estimable para la carrera que iniciaba Pedro Usabiaga cuyos recuerdos, seg¨²n ¨¦l mismo afirma, son todos en instant¨¢nea.

Vuelve a Madrid en 1979 y trabaja en una agencia de modelos. Eran los ¨²ltimos a?os de la movida madrile?a y se interesa por la foto masculina, por entonces, una especialidad pr¨¢cticamente inexistente en toda Espa?a. Su actividad se diversifica. Colabora con revistas nacionales y prepara portadas de discos. Pero el primer premio del Festival Internacional de la Foto de Moda en 1989, celebrado ese a?o en Deauville (Normand¨ªa), compitiendo con m¨¢s de mil seleccionados, es el trampol¨ªn desde donde se proyecta a los circuitos internacionales. Se abren las puertas de revistas como Vogue y Cosmopolitan. Llegan contratos de uno y otro lado. El cine le llama para hacer la foto fija, la ¨²ltima pel¨ªcula es La copa dorada, de Henry James, rodada en Inglaterra y Roma. La editorial alemana Bruno Gmunder publica en 1990 su primer foto-libro, Besame mucho. Distribuido por numerosos pa¨ªses las ventas superan los 200.000 ejemplares. Luego viene Piel de Serpiente, Pedro Usabiaga y actualmente prepara Senxo, como el t¨ªtulo del film de Visconti, y una recopilaci¨®n de sus retratos de actores y actrices.

Al servicio del star system, su fotograf¨ªa frecuenta el blanco y negro cuando se trata de un tema surgido por iniciativa personal y el color cuando proviene de alg¨²n encargo que as¨ª lo exija. Dice inspirarse en la pintura para resolver los problemas que plantean las tomas. Caravaggio es uno de sus referentes. De esta manera surgen las bocanadas de luz dura con las que ilumina los rostros. Im¨¢genes claras y de f¨¢cil comprensi¨®n; repletas de los m¨¢s variopintos est¨ªmulos emocionales. Dominadas por una ¨®ptica esteticista, marcan rigor geom¨¦trico en los decorados y una teatralizaci¨®n de las escenas que recuerda a distintos autores del g¨¦nero. De Cecil Beaton se extrae cierto tono barroco con aire modernista, incluso, la sofisticaci¨®n y la fantas¨ªa. De Helmut Newton llegan algunos gestos ariscos y provocadores cargados de morbo er¨®tico; un ligero gusto por la provocaci¨®n que estimula sabores agridulces.

Las im¨¢genes expuestas ahora en el Casino se acoplan perfectamente al escenario de mesas de juego y ruletas. La sofisticaci¨®n crece cuando el horario de visita es de cinco de la tarde a cinco de la ma?ana. Entre estos par¨¢metros el bailar¨ªn Igor Yebra posa con el torso desnudo mientras se apoya sobre un lujoso aparador con encimera de m¨¢rmol. A escasa distancia, un hombre desnudo, sentado en un silla de estilo a la orilla del mar se deja batir suavemente por las olas y repetirse en un tr¨ªptico virado en tonos distintos. Las variaciones compositivas pasan por primeros planos con diferentes personajes en perspectiva escalonada, por la ruptura de los noventa grados para encontrar inclinaciones coincidentes con la diagonal, todo ello alternando con tomas m¨¢s convencionales donde nunca falta el toque lum¨ªnico adecuado para engrandecer el instante.