No quiero un AVE

Todos los d¨ªas leo estupefacto el debate sobre el AVE. La supuesta pol¨¦mica por los trazados oculta una cuesti¨®n m¨¢s profunda y que s¨ª ser¨ªa necesario debatir. ?Realmente necesitamos un AVE?Tiene gracia que la vertebraci¨®n de la Comunidad tenga que pasar por Madrid. Este AVE parece ser un flamante juguete con la utilidad de gastarse el m¨¢ximo dinero posible, con el mayor coste energ¨¦tico, ecol¨®gico y social, para unir dos puntos, s¨®lo superado por el avi¨®n. Cualquiera que viaje por Europa ver¨¢ que por all¨¢ tienen una red ferroviaria much¨ªsimo m¨¢s moderna que la nuestra, que es casi preindustrial. ?Ojo! Lo moderno es la red, a saber, cercan¨ªas, regionales, grandes l¨ªneas, no uno o dos trenes puntuales. ?O es que nos van a poner alta velocidad para ir a Elche, a Villena o a Alcoi?

Pues as¨ª esta el patio. Las l¨ªneas de toda la vida no tienen ni presupuesto y pretenden gastarse miles de millones en un tren de dudosa rentabilidad social. La alta velocidad s¨®lo se consigue quitando todo lo que haya por medio. Vamos, que para que este ibertren vaya a las velocidades que promete ir, no puede hacer parada en ning¨²n sitio, ni puede cruz¨¢rsele nada en su camino, ni puede haber curvas, montes, etc. ?No es est¨²pido pagar una millonada por un tren que solo lo veremos pasar... muy, muy deprisa?

Claro, que las bondades del AVE son otras. Esa millonada que cuesta puede ser un lucrativo negocio para los que lo construyan (sin suponer irregularidades como las del Madrid-Sevilla), aunque no cree empleo estable. Para todos aquellos que miran hacia Madrid, es estupendo, pues les sale m¨¢s barato que el avi¨®n y es m¨¢s c¨®modo, as¨ª como para los ejecutivos madrile?os. A los pol¨ªticos les viene de perlas, pues se vende bien el progreso tecnol¨®gico, y eso es muy rentable de cara a unas elecciones.

En resumen, que conmigo no cuenten. Me reafirmo: no quiero el AVE. Quiero una red ferroviaria moderna y ¨²til, un tren poco contaminante y respetuoso (y adaptado) al medio, un transporte para todos, barato y p¨²blico ?y de calidad! ?Que eso no es posible? Si tuvi¨¦semos unos pol¨ªticos responsables con la tarea que se les han encomendado, se gastar¨ªan en todo eso el dinero que cuesta el AVE y entonces, comenzar¨ªamos a hablar de utop¨ªas.

P.D. El Talgo es un invento espa?ol y los ¨²ltimos modelos son una gozada que circulan por media Europa y EE UU, tiene una velocidad m¨¢s que aceptable y no necesita tanta propaganda para comunicar eficazmente una regi¨®n, que es de lo que se trata.- .