Se entrega el hombre acusado de matar a otro a martillazos, y la juez le deja libre
El supuesto homicida de Miguel ?ngel Rubio Miguel, de 33 a?os, que falleci¨® el pasado s¨¢bado tras recibir varios martillazos en la cabeza, se entreg¨® ayer en el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 25. La juez dej¨® en libertad provisional a Javier M. C., de 19 a?os, tras tomarle declaraci¨®n, aunque, seg¨²n inform¨® su abogado, Jaime Sanz de Bremond, debe volver a presentarse la pr¨®xima semana.El suceso ocurri¨® en la madrugada del pasado s¨¢bado en la calle de Roger de Flor, n¨²mero 8, en Carabanchel. Rubio volvi¨® a su domicilio y puso la m¨²sica muy alta. Javier M. C., su vecino de enfrente, llam¨® a su puerta y le pidi¨® que bajara el volumen, seg¨²n inform¨® la polic¨ªa.
Rubio no le hizo caso, por lo que se inici¨® una discusi¨®n. Comenzaron a gritar y a insultarse. En un momento dado, Rubio sali¨® con un cuchillo y un destornillador y comenz¨® a ara?ar y golpear la puerta del piso de Javier. Seg¨²n los vecinos, le grit¨® que saliera, "que le iba a matar". Entonces sali¨® Javier y le golpe¨® en la cabeza con un martillo. La v¨ªctima qued¨® inconsciente y muri¨® alrededor de las 5.30 en el hospital Doce de Octubre por aplastamiento del cr¨¢neo con p¨¦rdida de masa encef¨¢lica.
Javier M. C. se present¨® ayer en el juzgado con su abogado, Jaime Sanz de Bremond. El joven asegur¨® ante la juez que pidi¨® a su vecino que bajara la m¨²sica porque otros residentes ya lo hab¨ªan hecho antes y no hab¨ªa hecho caso.
Seg¨²n la versi¨®n de Javier, llam¨® a la puerta de Rubio y, cuando ¨¦ste abri¨®, le requiri¨® que bajara la m¨²sica. ?ste se neg¨® y se meti¨® en su casa sin hacer caso. Pero al rato apareci¨® con un cuchillo y un destornillador y empez¨® a golpear su puerta.
Esposa embarazada
La esposa de Javier se hab¨ªa quedado fuera de la vivienda, ya que estaba hablando con una vecina. La mujer est¨¢ embarazada de tres meses y hab¨ªa comenzado a sangrar, por lo que quer¨ªa ir a un centro sanitario donde la atendieran de la hemorragia. Seg¨²n la declaraci¨®n de Javier M. C., Rubio se dio cuenta de que la mujer bajaba por las escaleras y empez¨® a gritar a Javier que saliera de su casa o, en caso contrario, la emprender¨ªa a golpes con su esposa.
El supuesto homicida aprovech¨® que estaba arreglando su casa y que hab¨ªa una caja de herramientas en la entrada para coger un martillo y golpear a Rubio. "?l ha reconocido en el juzgado el martillo que era de su propiedad, pero desconoc¨ªa si realmente era el arma que utiliz¨® para golpear a su vecino. Asegura que cogi¨® lo primero que ten¨ªa a mano para defender a su esposa de las amenazas", se?al¨® Sanz de Bremond.
Tras producirse la agresi¨®n, Javier y su mujer se fueron a la casa de un familiar. El mismo s¨¢bado hab¨ªa decidido entregarse a la justicia, seg¨²n Sanz de Bremond, pero un familiar le convenci¨® de que lo hiciera acompa?ado de un abogado. Hasta el lunes no pudo contactar con el despacho de Sanz de Bremond, pero ¨¦ste se hallaba en Par¨ªs, por lo que, seg¨²n el letrado, decidi¨® esperar a su regreso.
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