Juanele tira del Zaragoza

El Zaragoza sobrevivi¨® bien a los efectos colaterales de un Milosevic sentado en la grada por sanci¨®n y con un Van Gaal suspirando por los huesitos del serbio. Ya de antemano ten¨ªa el equipo aragon¨¦s la mosca tras la oreja: tres partidos seguidos con su marcador a cero, como si se hubiera perdido atrevimiento y osad¨ªa. Pero en esas apareci¨® tempranamente la fragilidad defensiva del Sevilla que un Juanele madrugador no desperdici¨®.El asturiano le dio alegr¨ªa a su equipo; el despliegue y la multiplicaci¨®n en el campo nunca fueron su fuerte, al menos en un Tenerife que no dud¨® en traspasarlo a cambio de Pier y de 25 millones. Pero en Zaragoza se ha convertido en algo m¨¢s que el complemento de Milosevic y ha encontrado una buena relaci¨®n, cuerpo a cuerpo, con la afici¨®n. El Sevilla no vino entregado, ni mucho menos, pero las inseguridades defensivas llegaron a su m¨¢xima expresi¨®n cuando Hibic col¨® el segundo gol del Zaragoza en propia meta.

Juamni se qued¨® in¨¦dito la primera parte, en la que el Sevilla s¨®lo lleg¨® a bal¨®n parado, mientras los de casa desperdiciaban varias buenas ocasiones. Eso s¨ª, el griego Tsartas fue afinando poco a poco su punter¨ªa: la primera falta que lanz¨®, roz¨® el larguero, la segunda toc¨® la madera y la tercera entr¨® por la escuadra en uno de esos balones imposibles para cualquier portero. Tras el gol el partido gan¨® en emoci¨®n, el Sevilla se acerc¨® con m¨¢s peligro y las postrimer¨ªas se jugaron con m¨¢s nervios y derroche f¨ªsico en el campo, mientras la afici¨®n aplaud¨ªa los goles contra el Deportivo y ten¨ªa tambi¨¦n el buen gusto de aplaudir cordialmente el debut de Reyes con 16 a?os en el Sevilla. Al futbolista m¨¢s joven de la Primera Divisi¨®n, un zurdo nato, no se le pas¨® por alto que fue tambi¨¦n en La Romareda donde debut¨® Raul. Y en medio de la tensi¨®n final se hicieron m¨¢s clamorosos un par de remates fallidos del gaditano Yordi, un especialista en desatascar marcadores que ayer, a pesar de su combatividad, no tuvo su tarde.

Con la derrota, el conjunto andaluz queda varado en el fondo de la clasificaci¨®n, sin seguridad, con un precario techo donde refugiarse. Empieza a ver medio vac¨ªa la botella de la Liga. De jugar como ayer, lo de la permanencia parece devenir, m¨¢s que en objetivo prioritario, en utop¨ªa primaveral. El Zaragoza, por su parte, sigue encaramado en el tejado de la clasificaci¨®n.