Un viejo conocido de Radovan Karadzic

El asesinato de Pavle Bulatovic se produce tres semanas despu¨¦s de la eliminaci¨®n del paramilitar Zeljko Raznatovic, Arkan. Han utilizado el mismo sistema: uno o varios pistoleros descerrajan sobre la v¨ªctima un n¨²mero indeterminado de disparos; la muerte es casi instant¨¢nea y el terror est¨¢ asegurado. Para la oposici¨®n ¨¦ste es un s¨ªntoma del deterioro del r¨¦gimen de Slobodan Milosevic. Anoche, Zoran Djindjic, l¨ªder del opositor Partido de la Democracia, dijo que "se ha convertido en costumbre solucionar los problemas con asesinatos" en Yugoslavia. Y a?adi¨®: "La ¨²nica soluci¨®n para este tipo de actos es acabar con la fuente del caos legal que reina en el pa¨ªs y eso s¨®lo se lograr¨¢ cambiando el r¨¦gimen". Para otros, sucesos como el de anoche son el producto de una lucha por el poder o por el control del contrabando.

Bulatovic, quien fue ministro de Defensa en las guerras de Bosnia y Kosovo, era montenegrino como Radovan Karadzic y presum¨ªa de amistad con Ratko Mladic, dos de los principales criminales de guerra de la antigua yugoslavia. Bulatovic no se encontraba inculpado en la lista p¨²blica (existe otra secreta) del Tribunal Penal Internacional.

Tras la muerte de Arkan, la esposa del presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, visit¨® la semana pasada a su viuda para garantizarle que ellos no estaban detr¨¢s del atentado que le cost¨® la vida a su marido. La polic¨ªa. precisamente, dijo anoche que hay varios detenidos en relaci¨®n con la muerte de Arkan, pero no explic¨® que relaci¨®n tienen con el suceso.

La fiscal del tribunal penal Carla del Ponte sostiene que el asesinato de Arkan es una se?al para aquellos con responsabilidad en el ba?o de sangre balc¨¢nico: el ¨²nico lugar seguro es La Haya. "Aqu¨ª podremos garantizar su vida", dice Del Ponte.