"Vamos a ir hasta el final en el 'caso Pinochet"

"B¨¦lgica va a ir hasta el final en el caso Pinochet para que prevalezcan los principios y porque siente que es deber del Gobierno", afirm¨® ayer a este diario el ministro belga de Asuntos Exteriores, Louis Michel. La admisi¨®n del recurso presentado por B¨¦lgica por parte del Alto Tribunal brit¨¢nico es, afirma, "una satisfacci¨®n para nosotros, es la prueba de que B¨¦lgica ten¨ªa raz¨®n desde el principio del procedimiento judicial".Michel dej¨® entrever que su Gobierno agotar¨¢ todas las v¨ªas y que elevar¨¢ el caso hasta la C¨¢mara de los Lores si el tribunal finalmente estima que no hay fundamentos para que el ministro del Interior brit¨¢nico, Jack Straw, haga p¨²blicos los resultados del examen m¨¦dico sobre la salud del exdictador chileno, ni para permitir un nuevo informe cl¨ªnico por parte de otros doctores, como desean el Gobierno de Bruselas, Amnist¨ªa Internacional y Human Rights Watch.

En una conversaci¨®n realizada en el avi¨®n oficial que le condujo ayer a mediod¨ªa a Madrid, donde tuvo un almuerzo de trabajo con su hom¨®logo espa?ol, Abel Matutes, el nuevo jefe de la diplomacia belga subray¨® que su Gobierno ha mantenido desde la llegada al poder, el pasado junio, una actitud inequ¨ªvoca en el caso Pinochet, ha presentado dos peticiones de extradici¨®n en respaldo de los familiares de las v¨ªctimas de la dictadura que residen en B¨¦lgica y en sinton¨ªa con su pol¨ªtica de defensa de los derechos humanos.

"Los cr¨ªmenes contra la humanidad no prescriben jam¨¢s", sentenci¨® rotundo Michel, quien dijo que su Gobierno est¨¢ siendo "consecuente" en su conducta en el caso Pinochet y el apoyo a la creaci¨®n de un Tribunal Penal Internacional: "La comunidad democr¨¢tica internacional quiere que el tribunal deje de ser una construcci¨®n virtual y se convierta en una realidad. El concepto de cr¨ªmenes contra la humanidad ha sido completado desde hace poco con el de derecho de injerencia por razones humanitarias. De ah¨ª que si un pa¨ªs se suma a este concepto, como es el caso de B¨¦lgica, me parezca que sea un deber ir hasta el final " para hacer valer los principios morales y jur¨ªdicos. Con tono franco y abierto, Michel habl¨®, adem¨¢s, de las sanciones bilaterales que los 14 pa¨ªses de la Uni¨®n Europea (UE) han impuesto a Viena. Tuvo palabras muy duras para el Gobierno de Wolfgang Sch¨¹ssel y su ministra de Asuntos Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, a pesar de las se?ales de distensi¨®n incluidas en el programa pol¨ªtico presentado por Sch¨¹ssel el mi¨¦rcoles en el Parlamento. "Siguen sin entender el problema. Quieren banalizar la extrema gravedad que representa la participaci¨®n de la extrema derecha neonazi en la coalici¨®n. Han colocado una bomba contra la estabilidad de la Uni¨®n Europea".

Ferrero-Waldner ha declarado que la reacci¨®n internacional ha sido "injusta y desproporcionada" y pedir¨¢ el pr¨®ximo lunes en Bruselas a sus colegas europeos, en la reuni¨®n del Consejo de Asuntos Generales, que pongan fin al aislamiento diplom¨¢tico de su pa¨ªs. "Nosotros no queremos aislar a Austria, sino a su Gobierno", declar¨® el ministro Michel. "No estoy completamente seguro de que asista a la reuni¨®n del lunes", dijo el dirigente liberal y senador, de 53 a?os. El miembro del nuevo Gobierno de centro-izquierda (liberales, socialistas y ecologistas) neg¨® que la actitud de B¨¦lgica obedezca a razones de pol¨ªtica interna para controlar el auge de la extrema derecha flamenca representada por el Vlaams Blok, que cuenta aproximadamente con el 10% de apoyo del electorado (17 diputados y 7 senadores) y tiene puestas sus esperanzas en las elecciones regionales de octubre.

El ministro Michel considera correcta la postura adoptada por la Comisi¨®n Europea respecto a Austria, al afirmar que es el guardi¨¢n de los tratados, pero dijo que la crisis ense?a que se debe ir "a una amplia revisi¨®n de los tratados y debatir una verdadera Constituci¨®n europea, que defina las normas ¨¦ticas, culturales, pol¨ªticas, democr¨¢ticas m¨ªnimas a las cuales los Estados miembros deben someterse, incluyendo las condiciones y comportamientos que exige la democracia".