M¨ªnimos problemas en el tajo

Los inmigrantes marroqu¨ªes volvieron ayer al tajo en los invernaderos que tapizan la comarca del Poniente almeriense. Con las claras del d¨ªa, miles de braceros se aplicaron a la recolecci¨®n de las verduras y hortalizas que dan fama a esta tierra.Mejor suerte tuvieron aquellos que tienen un puesto fijo en un invernadero que los que se apostan en las zonas de recogida, donde los empresarios los eligen y hacen levas para llev¨¢rselos a sus explotaciones.

Unos 200 magreb¨ªes que se concentraron en la zona de Santa Mar¨ªa del ?guila, el n¨²cleo de El Ejido en el que se cometieron los tres cr¨ªmenes, se quedaron compuestos y sin trabajo.

Los ¨²nicos momentos de tensi¨®n se vivieron all¨ª donde los marroqu¨ªes hab¨ªan sido sustituidos durante los paros.

Eduardo L¨®pez, secretario provincial de COAG, dijo que se hab¨ªan registrado incidentes m¨ªnimos "all¨ª donde los empresarios se han encontrado con dos trabajadores para el mismo puesto". No obstante, precis¨® que esta situaci¨®n ser¨¢ temporal porque la sustituci¨®n, en muchos casos con inmigrantes de otras provincias y nacionalidades, "se ha hecho para afrontar necesidades de producci¨®n".

Esto fue lo que le ocurri¨® a cuatro mujeres marroqu¨ªes en el semillero Ejidoplant, que a su llegado al tajo se encontraron con que hab¨ªan sido sustituidas. La empresa explic¨® que hab¨ªa mantenido el puesto de trabajo a aquellos empleados que hab¨ªan avisado de que secundar¨ªan la huelga.

Mayor Oreja dijo en Le¨®n que los incidentes de El Ejido exigen un consenso social y pol¨ªtico. "Tenemos una oportunidad hist¨®rica de saber adminsitrar razonablemente una inmigraci¨®n desde el sentido com¨²n, la humildad y la prudencia".