Mestalla le pide a C¨²per que se vaya tras sustituir al Piojo Del Bosque valora el punto tras el fren¨¦tico ritmo de las ¨²ltimas semanas
Corr¨ªa el ¨²ltimo minuto del partido, la gente estaba enfadad¨ªsima con su equipo por su conformismo y en ¨¦sas C¨²per decidi¨® hacer un cambio dif¨ªcil de explicar: retir¨® al Piojo y sac¨® a S¨¢nchez. La grada entonces irrumpi¨® en un c¨¢ntico espont¨¢neo e inesperado: "C¨²per, vete ya, C¨²per, vete ya, C¨²per, vete ya", con la misma sinton¨ªa que hace tres a?os despach¨® a Francisco Roig de la presidencia, pero sin tanta virulencia. En todo caso, H¨¦ctor C¨²per no ha conseguido, desde que lleg¨® el pasado verano al Valencia, llegar a calar en Mestalla, que despidi¨® con grandes honores al italiano Claudio Ranieri despu¨¦s de ganar la Copa del Rey. A C¨²per se le reprochan, principalmente, actitudes m¨¢s propias de un entrenador de equipo modesto, como aquellas declaraciones tras haber empatado la semana pasada en Valladolid: "Cuanto m¨¢s atacantes pone el rival, m¨¢s defensas tenemos que tener nosotros", se?al¨®.Los jugadores salieron ayer en defensa de su entrenador y en contra de la grada. "La gente estaba muy ilusionada en ganar y despu¨¦s la pag¨® con el entrenador. La afici¨®n no tuvo una reacci¨®n muy buena con nosotros", se quej¨® el centrocampista Gerard.
Tras el partido, C¨²per justificar¨ªa el cambio del Piojo por el cansacio de L¨®pez, que hab¨ªa estado enfermo de faringitis durante la semana. Respecto a la demanda de los aficionados, el t¨¦cnico declar¨®: "El p¨²blico expresa su estado de ¨¢nimo; un estado de ¨¢nimo que puede ser el de 50.000 personas o el de una ciudad entera, pero eso se produce porque hemos perdido".
El empate de Mestalla dej¨® sensaciones opuestas en ambos bandos. As¨ª, mientras todo el valencianismo se lament¨® de que el Real Madrid se escapara vivo, el t¨¦cnico blanco, Vicente Del Bosque, qued¨® satisfecho tras la mejor¨ªa que su equipo demostr¨® despu¨¦s del descanso, pese a la ajetreada agenda madridista, con cuatro partidos en ocho d¨ªas.
"El primer tiempo lo jugamos con una pasividad exagerada. S¨®lo miramos lo brillantemente que jugaba el Valencia y nos superaron en todos los aspectos", critic¨® el t¨¦cnico del Madrid.
M¨¢s satisfecho qued¨® con "el buen sabor de boca que me dej¨® el segundo acto, que abre las esperanzas de futuro" y, sobre todo, la valoraci¨®n global de esta ¨²ltima semana: "En estos cuatro partidos, hemos ganado siete puntos en Liga y obtenido el pase a las semifinales de Copa. Es un saldo positivo". Lo que no quiso evaluar el entrenador fue si el Valencia le regal¨® el empate o ¨¦ste se lo gan¨® el Madrid. "En el f¨²tbol hay cuestiones indemostrables", afirm¨®, muy aliviado con el empate.
La alegr¨ªa de Del Bosque contrastaba con el pesar de su hom¨®logo valencianista. C¨²per se lament¨®: "Perdimos la posesi¨®n del bal¨®n tras el descanso y no pudimos repetir el rendimiento de la primera mitad. Se me queda un sabor amargo, porque hubo varios momentos para sentenciar. Hemos perdido dos puntos".
En el mismo sentido que su t¨¦cnico se expres¨® Carboni. "No hicimos lo que deb¨ªamos y al final nos empat¨® el Madrid. Con un 1-0 a nuestro favor, no nos pueden hacer un gol al contragolpe. Hemos cometido varios errores que habr¨¢ que analizar para evitar que vuelvan a repetirse". Tambi¨¦n Gerard se quej¨® de que su equipo no supo c¨®mo finiquitar un encuentro que tuvo ganado durante los primeros 45 minutos, en los que acorral¨® al Madrid en su ¨¢rea: "Es una pena perder un partido as¨ª, porque ten¨ªamos al rival totalmente dominado. Perdonamos muchas ocasiones en ataque y nos fuimos atr¨¢s hasta que al final lograron el empate".
La sensaci¨®n final que le qued¨® al Valencia y a su afici¨®n, que ayer por primera vez en toda la temporada llen¨® Mestalla, es que nunca el cuadro blanco se lo hab¨ªa puesto tan f¨¢cil para ganarle. Por este motivo, el propio Ca?izares, que apenas tuvo trabajo durante los noventa minutos, record¨® que su equipo hab¨ªa desperdiciado "un momento especial e inmejorable para alcanzar la zona alta de la tabla".
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