"La pantalla no ha sido capaz a¨²n de modificar el coraz¨®n del ni?o"

Enkarni Genua (San Sebasti¨¢n, 1942), titiritera, cre¨® en 1971 junto a su marido, Manolo G¨®mez, el grupo de marionetas Txotxongillo. Ahora exponen en la Casa de Cultura de Loiola de San Sebasti¨¢n una muestra de los espect¨¢culos que han construido y que han emocionado a los ni?os vascos de las tres ¨²ltimas d¨¦cadas.Pregunta. ?Cu¨¢ndo empez¨® con el mundo de las marionetas?
Respuesta. Tanto a m¨ª como a mi marido nos gustaba el teatro y hace 29 a?os hicimos unas marionetas para una funci¨®n escolar. En t¨ªteres fuimos el primer grupo del Pa¨ªs Vasco y durante a?os el ¨²nico. Hab¨ªa un hueco necesario de llenar y por eso naci¨® Txotxongillo. El panorama cultural vasco entonces era muy escaso y nos fuimos a Barcelona a aprender y despu¨¦s fueron surgiendo las marionetas, los cuentos y los espect¨¢culos.
P. ?A pesar de la falta de una tradici¨®n titiritera, ha cambiado el panorama en el Pa¨ªs Vasco?
R. En este momento hay muchos grupos , alguien ten¨ªa que empezar y fuimos nosotros, y hacen buenos espect¨¢culos de marionetas. Nosotros optamos por el mundo infantil, pero hay obras para adultos que son fant¨¢sticas. A nivel europeo y mundial se ha ampliado el panorama de los t¨ªteres.
P. ?Qu¨¦ relaci¨®n existe entre la luz y la marioneta?
R. Es importante, pero no siempre va unida. Hay mucho teatro de calle que se hace con la luz de sol. Los juegos de luces tienen su papel en el arte teatral. Est¨¢n las luces negras, las cortinas de luz que hace que la atenci¨®n recaiga sobre la marioneta y al titiritero no se le vea. Es un aspecto que los titireros tienen que cuidar mucho.
P. ?Qu¨¦ puede crear una marioneta?
R. Es capaz de comunicar lo que el tititero quiera. Cualquier texto teatral puede ser comunicado lo mismo a trav¨¦s de actor que de las marionetas, aunque hay veces que la marioneta supera al actor. El t¨ªtere es mejor que no tenga un discurso largo, que comunique m¨¢s a trav¨¦s del movimiento, del gesto de la sugerencia. En lo que se refiere al ni?o la marioneta entra en el mundo del juego y ¨¦ste va unido a ¨¦l. Todos los ni?os del mundo juegan, a¨²n en las condiciones m¨¢s dif¨ªciles; si no lo hacen es que est¨¢ viviendo dentro de una gran tragedia. La marioneta est¨¢ dentro de su juego, al igual que el cuento es una forma de conocer y percibir la realidad.
P. En el mundo actual de los ni?os, la inform¨¢tica ocupa un papel importante. ?Son capaces de atender a los txotxongillos?
R. Delante de un t¨ªtere que les llegue se comportan igual que cuando nosotros empezamos las representaciones en 1971. Lo que es cierto es que la infancia se est¨¢ acortando. Los ni?os que lo eran antes con 14 a?os ahora ya no lo son. El cuento Erreka mari llevamos 22 a?os represent¨¢ndolo y los ni?os vibran exactamente igual, porque es un cuento que llega al coraz¨®n y la tecnolog¨ªa y la pantalla todav¨ªa no ha modificado el coraz¨®n del ni?o. Y es igual aqu¨ª que en cualquier parte del mundo. La emoci¨®n que sienten ante las marionetas vivas no es la misma que tienen ante un televisor.
P. ?Qu¨¦ tipo de obras son las que representan?
R. Nuestro repertorio tiene tres fuentes: una de creaci¨®n propia, otra de cuentos tradicionales de la literatura vasca, principalmente las obras recopiladas por Joxe Miguel Barandiar¨¢n y Resurrici¨®n Mar¨ªa Azkue, y otros de la tradici¨®n universal.
P. ?Por qu¨¦ en una de sus ¨²ltimas obras optaron por hablar de la solidaridad entre los seres humanos?
R. A los ni?os, y desde muy peque?os hay que decirles que en el mundo hay desequilibrios, queellos pueden llorar por un juguete, pero que hay otros que lo hacen por un plato de comida. Eso es lo que cuenta Eman eta gero y creo que tendr¨¢ mucha vida.
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