Miles de serbios exigen permanecer en Kosovo
"Conservar Mitrovica". Bajo ese lema, m¨¢s de 4.000 serbios del norte de esa conflictiva ciudad de la provincia de Kosovo se concentraron ayer de forma pac¨ªfica para plantar cara a sus vecinos albanokosovares del sur y dejar claro que no se van a rendir. "Nuestro destino est¨¢ aqu¨ª, en Mitrovica", clam¨® Oliver Ivanovic, l¨ªder del Consejo Nacional Serbio. Y ret¨® al resto de serbios que se han visto forzados a abandonar la provincia ante el acoso albonokosovar a que regresen. "Porque Kosovo sin serbios no es Kosovo", exclam¨® tratando de hacerse o¨ªr entre los aplausos.
"A los serbios nos tiene que unir un ¨²nico objetivo: comunicar al mundo nuestra determinaci¨®n de permanecer y sobrevir en Kosovo", manifest¨® Ivanovic ante una entregada multitud que aclamaba con gritos de "?Serbia, Serbia!" cada una de sus intervenciones. No habl¨® en ning¨²n momento el l¨ªder serbio de coexistencia con aquellos que habitan a tan s¨®lo 200 metros m¨¢s abajo de la plaza donde ayer se celebr¨® la concentraci¨®n, al sur, al otro lado del puente que cruza el r¨ªo Ibar, convertido en s¨ªmbolo de la divisi¨®n. Pero con sus palabras s¨ª dej¨® muy claro Ivanovic, aunque fuera de forma velada, que aspira a la "cantonalizaci¨®n" de la provincia. "Hace apenas un mes corr¨ªamos el riego de desaparecer", prosigui¨® el l¨ªder del Consejo. "Pero hoy sabemos que la f¨®rmula para triunfar es la unidad y permanecer en Kosovo", puntualiz¨®. Ivanovic se defendi¨® airadamente de las recientes acusaciones de algunos funcionarios estadounidenses que han caricaturizado a los serbios que resisten en Mitrovica como agentes enviados por el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic. Ivanovic dijo ver en la denuncia una maniobra de la comunidad internacional para expulsar a los serbios. "No pertenecemos a Milosevic" exclam¨®. "No tenemos miedo de permanecer aqu¨ª".
Muchos de los que ayer se manifestaron portaban pancartas que ridiculizaban a las fuerzas de la OTAN y se mofaban de las acusaciones de ser paramilitares serbios infiltrados desde Belgrado. Varias decenas de ni?os permanecieron durante gran parte del acto posando con carteles que rezaban: "Soy un paramilitar". Y volvi¨® a dejarse ver la denuncia efectuada contra las tropas de EEUU de haber actuado con excesiva violencia durante los registros del domingo en busca de armas. En varias pancartas se repet¨ªa: "Esto no es Tejas. Yankee vuelve a casa".
La mayor¨ªa de los carteles se le¨ªan ayer en ingl¨¦s o franc¨¦s, con el ¨²nico fin de mostrar a los medios occidentales que los serbios no se mover¨¢n de Mitrovica. Un gran n¨²mero de manifestantes se mostraron reacios a la hora de hablar con los periodistas. "Nos olvidaron, todos ustedes nos olvidaron, s¨®lo les interesa una parte de esta guerra", recrimin¨® una mujer de pelo blanco y pa?uelo negro. "Nosotros tambi¨¦n sufrimos, tambi¨¦n morimos asesinados y a nadie parece importarle", acus¨® la mujer. A su lado, un grupo de j¨®venes, puede que los ¨²nicos violentos en el acto pac¨ªfico de ayer, ped¨ªan sangre. "Matar a los albaneses", gritaron. En contraste, por encima de sus cabezas alguien atend¨ªa a la raz¨®n y condenaba el terrorismo, al que lanzaba una pregunta: "IRA-ETA-ELK, ?Qui¨¦n es el siguiente?". Ayer mismo, una serbia de 65 a?os fue asesinada con una estaca en el noreste de Kosovo.
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