Aranzadi precisar¨¢ otros tres a?os para datar los restos de Irikaitz

La Sociedad de Ciencias Aranzadi necesita al menos otros tres a?os para afinar la cronolog¨ªa de los restos prehist¨®ricos hallados en el yacimiento de Irikaitz, en Zestoa, muy cerca de la cueva de Ekain, seg¨²n reconoci¨® ayer en San Sebasti¨¢n el arqueol¨®go y profesor de la UPV ?lvaro Arrizabalaga.El yacimiento de Irikaitz, hallado en 1996 por el grupo prospectivo Etxadi, de Azpeitia, ocupa una superficie de unas seis hect¨¢reas de terreno al aire libre donde se han localizado un conjunto de materiales prehist¨®ricos cuya antig¨¹edad est¨¢ todav¨ªa por determinar.

Las primeras investigaciones, explica ?lvaro Arrizabalaga, invitan a pronosticar que pertenecen a una ¨¦poca inicial del Paleol¨ªtico Superior, "quiz¨¢s del Gravetiense o del Auri?aciense", que en cualquier caso "no ser¨ªan los m¨¢s antiguos del Pa¨ªs Vasco". Este miembro de Aranzadi advierte de que la relevancia de estos restos del Paleol¨ªtico "no reside tanto en la antig¨¹edad de los materiales como en que se encuentran estratificadas en su contexto".

?lvaro Arrizabalaga y el presidente de Aranzadi, Jes¨²s Altuna, pronunciaron ayer en la sede de esta sociedad arqueol¨®gica una conferencia acerca de la r¨¦plica en contrucci¨®n de Ekain y as¨ª como de las excavaciones en el yacimiento de Irikaitz, dos de las l¨ªneas de investigaci¨®n desarrolladas por la sociedad a lo largo del a?o pasado en Guip¨²zcoa.

Estudios en laboratorio

Sobre la colecci¨®n de industria l¨ªtica localizada en Irikaitz, Arrizabalaga se?al¨® que el equipo de investigaci¨®n ha enviado una muestra a un laboratorio franc¨¦s para fijar la cronolog¨ªa de los restos prehist¨®ricos, "aunque la dataci¨®n entra?a una gran complicaci¨®n y nadie nos garantiza una precisi¨®n muy fiable, por lo que en ¨²ltimo t¨¦rmino tendr¨ªamos que recurrir al m¨¦todo comparativo con otros materiales similares encontrados en la franja del Cant¨¢brico, en Aquitania y en la meseta norte".

Su proximidad con la gruta de Ekain, un santuario de la pintura rupestre del que se est¨¢ fabricando una r¨¦plica en Francia para instalarla en el valle de Sastarrain, en Zestoa, le confiere a Irikaitz un valor a?adido, pues "donde termina la secuencia hist¨®rica de Irikaitz empieza la de Ekain", afirma Arrizabalaga, quien apostilla que "en esta zona la visita humana durante todo el Paleol¨ªtico ha sido muy frecuente". En un radio reducido de espacio hay yacimientos del Magdaleniense, Solutrense, Gravetiense o Musteriense.

Otra de las peculiaridades de Irikaitz consiste en que los restos, utensilios de piedra en su totalidad, "han permanecido sedimentados en su sitio, pese a las numerosas alteraciones que ha sufrido el paisaje desde los a?os veinte hasta la actualidad". No obstante, Arrizabalaga asegura que muchos vestigios "han desaparecido por encontrarse en un terreno expuesto al agua de la lluvia".