Una testigo identifica a tres 'ultras' como autores del homicidio de Aitor
La Audiencia de Madrid, donde se juzga a Ricardo Guerra, acusado del homicidio de Aitor Zabaleta, rechaz¨® ayer la petici¨®n de los abogados de la acusaci¨®n para que se suspendiese el juicio y se abrieran nuevas diligencias contra tres amigos ultras de Guerra como coautores del asesinato. La petici¨®n se produjo despu¨¦s de que una aficionada de la Real Sociedad identificase a Guerra y a otros tres hinchas del Atl¨¦tico de Madrid como supuestos autores de la agresi¨®n que cost¨® la vida a Aitor.
El testimonio de Mar¨ªa Aranzazu Apoitia, de 40 a?os, dio un giro inesperado a un juicio hasta el momento falto de pruebas s¨®lidas contra Guerra. Y m¨¢s a¨²n desde que el principal testigo de cargo, Iv¨¢n Mart¨ªn, se retractase y exculpase a Guerra. La testigo -que viaj¨® a Madrid con su hijo de 6 a?os para ver jugar a su equipo con el Atl¨¦tico- manifest¨® que Aitor sali¨® en su defensa cuando los ultras del equipo madrile?o pretend¨ªan agredirla. "Meteos conmigo y dejad al ni?o en paz", confes¨® la testigo que espet¨® Aitor a los atacantes. A?adi¨® que despu¨¦s observ¨® c¨®mo cuatro rapados ten¨ªan acorralado a Aitor y le golpeaban, aunque aclar¨® que no vio a ninguno con navaja.
A instancias del jurado, la testigo vision¨® un v¨ªdeo de un partido de f¨²tbol entre el Atl¨¦tico y el Bilbao, celebrado tres d¨ªas antes del crimen de Aitor, ocurrido el 8 de diciembre de 1998. En el v¨ªdeo se ve en las gradas a varios rapados de Basti¨®n, la secci¨®n m¨¢s violenta del Frente Atl¨¦tico y a la que se atribuye un plan para dar un escarmiento a seguidores del conjunto donostiarra. Mar¨ªa Aranzazu identific¨® a Guerra, a Ignacio Racionero y a otros dos ultras de Basti¨®n como las personas que golpearon a Aitor junto al Vicente Calder¨®n.
Sin datos inesperados
Tras este testimonio, Marco G¨®mez de la Serna, el abogado del Movimiento contra la Intolerancia que preside Esteban Ibarra, reclam¨® al juez la suspensi¨®n del juicio y que dedujese testimonio contra esos rapados como supuetos coautores del crimen.
La abogada de la familia de Aitor, Bego?a Lalana, se adhiri¨® parcialmente a la petici¨®n; en cambio, se opusieron a ella el fiscal y la defensa, ejercida por el letrado Emilio Rodr¨ªguez Men¨¦ndez. El fiscal sostuvo que el testimonio de la v¨ªctima no aportaba "los datos inesperados" que prev¨¦ la ley para que se suspenda un juicio, y record¨®: "Aqu¨ª se juzga un navajazo, y la testigo dice que no ve ninguna navaja en esa agresi¨®n. Adem¨¢s, hay otro procedimiento abierto por des¨®rdenes p¨²blicos contra parte de esas personas".
La defensa precis¨® que la declaraci¨®n de Mar¨ªa Aranzazu constitu¨ªa "un falso testimonio y una manipulaci¨®n" urdida por las acusaciones, y se mostr¨® sorprendido por el hecho de que la testigo no hubiese reconocido a nadie en la declaraci¨®n que prest¨® ante la Ertzaintza tras el crimen.
El magistrado decidi¨® continuar con el juicio y avanz¨® que en la sentencia decidir¨¢ si, a ra¨ªz de estas declaraciones, debe abrirse otro procedimiento contra las personas identificadas en el v¨ªdeo.
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