Los 'seguros verdes' excluir¨¢n a un 15% de las empresas por sus p¨¦simas instalaciones La ausencia de cobertura civil supondr¨¢ el cierre de las industrias con actividades de riesgo

El Pool Espa?ol de Riesgos Ambientales, entidad que agrupa a 18 compa?¨ªas de seguros establecidas en Espa?a (sin contar a Reliance National y Zurich), excluir¨¢ de su cartera de clientes al 15% de las industrias con actividades de riesgo sobre la salud humana y el medio ambiente, porque no re¨²nen unos requisitos m¨ªnimos aceptables. Si no mejoran, no podr¨¢n continuar su actividad ya que la ley les obligar¨¢ a tener un seguro de responsabilidad civil ambiental, como propone un Libro Blanco de la Uni¨®n Europea. La repercusi¨®n de este seguro supondr¨¢ 4.000 millones anuales en primas.

La obligaci¨®n de asegurar cualquier actividad que implique alg¨²n riesgo sobre la salud humana y el medio ambiente, tal como prev¨¦ un proyecto de ley muy madurado y en sinton¨ªa con el Libro Blanco europeo, no ha sorprendido al sector del seguro ni a los propios industriales espa?oles. Llevan a?os calculando las primas que deber¨¢n aplicar en cada caso.De las instalaciones en activo, un 15% quedar¨¢n excluidas a no ser que sus gestores apliquen mejoras radicales en sus m¨¦todos de producci¨®n y en el control de sus vertidos. "Es de esperar que en los pr¨®ximos a?os, por propia iniciativa, por el impulso de las administraciones o las propias aseguradoras, se mejore la calidad de todos los factores de riesgo", dice un informe sobre la repercusi¨®n del aseguramiento obligatorio para todas las actividades con incidencia ambiental.

En el mercado espa?ol cubren estos riesgos las compa?¨ªas Reliance National, con una capacidad para afrontar indemnizaciones de 4.800 millones de pesetas anuales; Zurich, con 4.300 millones, y las 29 compa?¨ªas del pool: AGF, Allianz, Axa, Baloise, Bilbao, Caser, Catalana, CommercialU, Estrella, Fiatc, Gan, Vitalicio, Imperio, Mapfre, Musini, Previsi¨®n, Sabadell y Winterthur, entre otras, que aportan conjuntamente 1.600. En total suman 10.750 millones, dos tercios de los 15.000 que el proyecto de ley sobre responsabilidad civil fija como l¨ªmite m¨¢ximo. En el proyecto, no obstante, la Administraci¨®n se reserva la facultad de modificar al alza esta cantidad si as¨ª lo considera oportuno.

Jes¨²s Luis de las Heras, responsable del estudio sobre la repercusi¨®n de este nuevo seguro obligatorio ambiental y gerente del pool se?ala que su aplicaci¨®n supondr¨¢ 4.000 millones de pesetas anuales en primas, una cifra considerada algo baja por las estimaciones de la Secretar¨ªa General T¨¦cnica del Ministerio de Medio Ambiente.

Restauraci¨®n obligatoria

Seg¨²n sus c¨¢lculos, de las 3.040 empresas que desarrollan actividades de riesgo en este momento (2.230 de riesgo medio y 810 alto), m¨¢s de mil ya tienen cubiertos los riesgos ambientales. La mayor¨ªa son grandes empresas petroqu¨ªmicas o t¨¦rmicas que no est¨¢n dispuestas a que su imagen sea puesta en entredicho en caso de sufrir un accidente. Muchas de ellas tienen v¨ªnculos con pa¨ªses como Alemania o Estados Unidos, donde es obligatoria desde hace a?os este tipo de cobertura. En este ¨²ltimo pa¨ªs existe un Superfondo de 2,3 billones de pesetas con el que la Administraci¨®n federal financia la limpieza de una lista de m¨¢s de 1.300 emplazamientos (suelos y cauces, primordialmente) declarados contaminados, cuya restauraci¨®n es obligatoria porque pone en riesgo la vida de 41 millones de residentes en sus entornos.

En el caso de Espa?a, se estima que las primas que deber¨¢n pagar las empresas oscilar¨¢n entre las 100.000 pesetas y los 100 millones al a?o con un criterio similar al que las aseguradoras de autom¨®viles aplican a los buenos y malos conductores. Si las empresas son serias y cumplen normas de calidad les pueden hacer descuentos de hasta el 45%, y si son descuidadas la penalizaci¨®n puede alcanzar recargos de hasta el 140%. El c¨¢lculo de estas primas, seg¨²n Jos¨¦ Luis de las Heras, es una tarea compleja porque hay poca experiencia y resulta muy dif¨ªcil cuantificar y evaluar los riesgos: "Tenemos mucho que aprender. De momento no nos agobia la demanda, aunque muchas aseguradoras ya ofrecen a sus clientes este seguro adicional para fidelizarles y evitar que se dejen seducir por la competencia".

Dudas con los transg¨¦nicos

Los aseguradores muestran muchas dudas a la hora de fijar la cobertura de actividades de producci¨®n o transporte de organismos modificados gen¨¦ticamente (OMG), debido a las versiones encontradas sobre sus riesgos. En Espa?a se calcula que hay entre 15.000 y 20.000 hect¨¢reas dedicadas al cultivo de semillas transg¨¦nicas. "No sabemos a qu¨¦ tipos de reclamaciones estaremos expuestos en el futuro; si sus efectos alcanzan a una gama de productos, a su incidencia sobre determinadas enfermedades o a la p¨¦rdida de especies", dice el informe de Heras. Aunque en el sector no hay unanimidad en asociar los riesgos de los OMG con "riesgos de desarrollo" y se discute la idoneidad de exigir responsabilidad civil a las empresas que los manejan, la legislaci¨®n del pa¨ªs que m¨¢s los defiende, Estados Unidos, no aplica ning¨²n eximente. La Uni¨®n Europea s¨ª, en funci¨®n del "estado de conocimiento de sus riesgos cuando se han puesto en circulaci¨®n estos productos". Ante estas incertidumbres, el pool propone aplicar primas a un tanto por mil de la facturaci¨®n de las empresas. Las que ya operan en el ¨¢mbito internacional de los transg¨¦nicos se cubren las espaldas con primas espec¨ªficas muy altas y al margen de lo que exigen las administraciones p¨²blicas.

Primas de 25 a?os para los vertederos

Hay dos aspectos de la futura ley sobre responsabilidad civil ambiental que preocupan a las aseguradoras: su incidencia en los vertederos controlados (hay varios cientos incontrolados que tendr¨¢n que clausurarse) y en aquellas actividades vinculadas a la producci¨®n o almacenamiento de organismos modificados gen¨¦ticamente. En el primer caso, la cobertura de los riesgos est¨¢ previsto que no se limite al periodo de funcionamiento de los vertederos, sino a los 30 a?os posteriores a su clausura, durante los cuales pueden aparecer fallos y emanaciones t¨®xicas.

El gerente del Pool Espa?ol de Riesgos Ambientales, Jos¨¦ Luis de Heras, recuerda el p¨¢nico extendido entre las aseguradoras norteamericanas cuando la Agencia de Medio Ambiente (EPA) les hizo responsables en los a?os setenta de los gastos de limpieza de los suelos contaminados por las empresas que hab¨ªan sido sus clientes. Las aseguradoras se echaron atr¨¢s y dejaron de ofrecer cobertura a terrenos destinados a vertederos. El coste actual de restaurar estos suelos se valora en 170 billones de pesetas. Para Espa?a, el pool propone una prima anual creciente mientras el vertedero admite basura y otra decreciente a medida que transcurran los 25 a?os siguientes a su clausura.