"En Madrid s¨®lo se acuerdan de Lozoya cuando beben agua"

La pasada Navidad, un matrimonio con hijos fue a buscarle a casa para decirle que se iban a separar, pero que, por la lecci¨®n de cari?o que hab¨ªan aprendido visitando el bel¨¦n viviente, volver¨ªan este a?o todos juntos. Es una de las expresiones de agradecimiento que m¨¢s ha llegado al alma al presidente de la Asociaci¨®n del Bel¨¦n Viviente de Buitrago del Lozoya, Eusebio Garc¨ªa. Desde hace once a?os, este hombre con la sensibilidad a flor de piel embarca a todo su pueblo, de una forma o de otra, en el montaje de un espect¨¢culo que no tiene parang¨®n en la Comunidad de Madrid, salvo en la peque?a localidad de Torremocha, no lejos de Patones, donde otro bel¨¦n viviente envuelve al pueblo en luces medievales. En Buitrago, el a?o pasado participaron en el bel¨¦n m¨¢s de 400 personas de entre 2 y 67 a?os. Representaron 25 escenas b¨ªblicas a lo largo de 1.300 metros de recorrido a trav¨¦s de las ruinas hist¨®ricas de la localidad. Acaban de ganar el primer premio internacional Mundo Teatre, que concede la Generalitat de Catalu?a a trav¨¦s de la Asociaci¨®n Cultural Taller Teatre Sant Jordi, y Eusebio Garc¨ªa no cabe de gozo. El galard¨®n, por el que compet¨ªan otros 180 colectivos de teatro aficionado de dentro y fuera de Espa?a, alaba, m¨¢s que el espect¨¢culo en s¨ª, la convivencia y la implicaci¨®n de todos y cada uno de los vecinos que participan en ¨¦l. Pregunta. ?C¨®mo se implica a todo un pueblo en un bel¨¦n viviente?

Respuesta. Muy sencillo. Das a la gente libertad para que interprete, pero, a la vez, das la disciplina suficiente para que deje a su pueblo por encima de todo y, como la gente tiene su orgullo, pues la cosa funciona.

P. ?Cu¨¢l es la mayor satisfacci¨®n de las personas que participan?

R. Poder hacerlo y, sobre todo, ver las caras de muchos ni?os y de muchas personas mayores que van discutiendo si aqu¨¦l es de verdad o de mentira y o¨ªr los comentarios.

P. ?Qu¨¦ sucede cuando finaliza?

R. Al final, cuando te dicen que volvamos a hacerlo otro a?o porque, haci¨¦ndolo otra vez este a?o, les hemos dado media vida.

P. ?Por qu¨¦ no cunde la idea de los belenes vivientes en Madrid?

R. El problema es que los belenes est¨¢n muy institucionalizados, son como fiestas de fin de a?o o cabalgatas y no generan ese sentimiento de implicaci¨®n social que nosotros le damos.

P. Y ?c¨®mo se siente al haberse visto reconocido fuera de Madrid y no en casa?

R. Te duele mucho porque sabemos que Madrid es muy grande, pero parece que s¨®lo se acuerdan de nosotros, de la sierra, para el agua del Lozoya, para beber, pero para nada m¨¢s. En ese sentido, Catalu?a vive la cultura vinculada al ¨¢mbito social de una forma que no la siente Madrid.

P. ?Por qu¨¦ raz¨®n?

R. Porque aqu¨ª, en Madrid, la cultura parece que est¨¢ bastante m¨¢s comercializada.