La recuperaci¨®n del centro de Almer¨ªa depende de la repoblaci¨®n de la zona

El estudio previo para la rehabilitaci¨®n del entorno de la plaza de la Constituci¨®n (plaza Vieja) de Almer¨ªa y su ¨¢rea inmediata ha destapado problemas estructurales del casco hist¨®rico de la ciudad. Los arquitectos Francisco Pol y Mar¨ªa Jos¨¦ Lasaosa han presentado a la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas un an¨¢lisis y propuestas de actuaci¨®n en la zona para acometer un gran proyecto que resuelva el despoblamiento de dicha ¨¢rea, los problemas de aparcamiento o la peatonalizaci¨®n del casco hist¨®rico.

La recuperaci¨®n por la ciudadan¨ªa es la clave diagnosticada por Pol y Lasaosa, los arquitectos que durante meses han llevado a cabo el estudio previo a una intervenci¨®n en el casco antiguo almeriense. Del trabajo realizado se desprenden datos preocupantes en cuanto a los grados de deterioro detectado en edificaciones. S¨®lo un 15% se encuentran en buen estado, un 44% presentan un deterioro ligero, un 22% un deterioro medio y un 11%, extremo. Al porcentaje de edificios antiguos y deteriorados -la mayor¨ªa de finales del XIX y principios del XX- se une el porcentaje de ocupaci¨®n de estos inmuebles. Un 20% se encuentra deshabitado, junto con un 2% ocupados s¨®lo en la planta baja o un 7% de solares. El 71% son inmuebles habitados dentro del casco hist¨®rico de Almer¨ªa."La recuperaci¨®n vital es imprescindible para dinamizar el casco hist¨®rico. Hoy no hay vida: el parque de edificios est¨¢ en un estado deplorable y no invita a irse all¨ª a vivir. Cuando el Ayuntamiento deja de funcionar all¨ª no queda nadie", expone la arquitecta Lasaosa. Es por ello que la mezcla de usos comerciales, residenciales y oficiales se hace "indispensable" como medida adicional en la recuperaci¨®n del patrimonio edificado.

Entre las propuestas realizadas figuran la intervenci¨®n de la Administraci¨®n en aquellos lugares donde la iniciativa privada no va a obtener rentabilidad. Es el caso de dos bolsas de peque?as parcelas y viviendas muy deterioradas en los que una tras una hipot¨¦tica expropiaci¨®n se plantear¨ªa una labor de intervenci¨®n y recuperaci¨®n de la zona. Igualmente se necesita abordar un estudio de tr¨¢fico para la zona con objeto de peatonalizar el casco hist¨®rico. La ubicaci¨®n de aparcamientos alternativos que solucionen problemas a los residentes, a los usuarios del Ayuntamiento y a los visitantes de la Alcazaba tambi¨¦n se incluye entre las propuestas.

Los arquitectos a?aden a su diagn¨®stico una serie de propuestas y recomendaciones para la reordenaci¨®n urban¨ªstica del entorno del ¨¢rea a rehabilitar, esto es: la Alcazaba, el parque de la Hoya, el Cerro de San Crist¨®bal, el bordeado por las murallas de Jayr¨¢n y la plaza de la Catedral. Adem¨¢s de "reconfigurar" una cierta "fachada" urbana en el borde del cerro proponen como condicionante "fundamental" la valoraci¨®n de la Alcazaba y las murallas como monumento y como recinto de disfrute est¨¦tico.

En cuanto al parque de la Hoya se apela a su preservaci¨®n paisaj¨ªstica e hist¨®rica como n¨²cleo originario de la ciudad. "All¨ª existen unos restos arqueol¨®gicos excepcionales. Se pueden recuperar balates como primera actuaci¨®n superficial para potenciar los valores paisaj¨ªsticos. Es un paisaje con mucho valor", apunta Mar¨ªa Jos¨¦ Lasaosa.

Efecto ¨®ptico

Igualmente, tambi¨¦n se perfila una posible actuaci¨®n en el bario de la Almedina, a los pies de la Alcazaba, que cause el menor impacto visual posible: "La configuraci¨®n de este barrio, con la huella del parcelario original debe mantenerse. Es decir, que aunque se unan varias casas, desde la Alcazaba debe conseguirse que el efecto ¨®ptico no altere el original del barrio", explica la arquitecta encargada del proyecto.

El Plan Estructural de Reforma Interior (PERI), que vaya a acometerse en el barrio deber¨¢ atender los problemas de las viviendas y propiciar la rehabilitaci¨®n de los edificios sin descuidar las necesidades de una poblaci¨®n residente que no cuenta con muchos medios econ¨®micos.