El cucut fa piu piu

Anhelaban su canto, sondeaban el bosque en silencio, expectantes, examinaban, exploraban, escudri?aban los campos, investigando la llegada del cucut, cuclillo, cuculus canorus. Protagoniza refranes, rondallas y canciones -De dins del bosc cantava el cucut amb gran afany-, s¨ªntomas de la especial observaci¨®n a que somet¨ªa nuestro pueblo sus costumbres: Si el tres d'abril/ el cucut no fa piu piu,/ o ¨¦s mort o ¨¦s viu, o senyala mal estiu. Hoy, san Ricardo -"rey fuerte", en germ¨¢nico- que habr¨ªa ense?ado a usar el carro, y sant Benet de Palerm, legendario beato negro protector de grabajadores espernegats, sin carro, ha de hacerse o¨ªr: Per sant Benet, cada cucut a son indret. Vendr¨ªa de Roma -all¨ª se cocieron los ar¨²spices y augures-, despu¨¦s de la misa que les celebraba a todos el Papa el d¨ªa de la Encarnaci¨®n -este a?o el efecto dos mil les ha jugado una mala pasada: el Papa estaba oficiando en Nazaret- y volver¨ªa, en junio, el d¨ªa de san Pedro: Per la Mareded¨¦u de Mar? el cucut ix de Roma i per sant Pere se'n torna.Es emblema de la estaci¨®n de la plenitud natural -En abril tot pardal fa son niu-, sin embargo, ¨¦l s¨®lo pone un huevo en el nido de otros para que lo incuben. Preside la primavera, su aparici¨®n se relacionaba con el r¨¦gimen de lluvias -A l'abril cada gota val per mil- y era el heraldo de la estaci¨®n del amor. Matrimonial fue para los griegos. Todav¨ªa las doncellas le preguntan en nuestros pueblos cu¨¢ntos a?os tardar¨¢n en dejar de serlo, o las j¨®venes en encontrar un amante novio; cada canto es un a?o de espera. P¨¢jaro oracular, que, sumando cada "cu-cut", dice los a?os que nos restan de vida; los relojes de cuclillo desean, pues, larga vida. Si no retorna, se acaba el mundo: El cucut cantar¨¤ per sant Benet. Si no, per Setmana Santa. Si no, ¨¦s pres i lligat a Fran?a.