Las v¨ªctimas del Grand National
Cuarenta caballos participar¨¢n hoy en el Grand National, la carrera de obst¨¢culos m¨¢s famosa y dura del mundo, celebrada en Aintree (Liverpool). Su esfuerzo ser¨¢ seguido por 500 millones de personas a trav¨¦s de la televisi¨®n (18.25, Canal+) y el vencedor pasar¨¢ a ocupar la galer¨ªa de leyendas equinas de una cita ganada en tres ocasiones por un mismo caballo, Red Rum, entre 1973 y 1977. Una gloria deportiva te?ida este a?o de tragedia por la muerte de cinco finos ejemplares entre ayer y el jueves, en las carreras que preceden a la que da nombre esta tarde al festival mismo. Sus ca¨ªdas, con la hierba en perfectas condiciones, han reavivado las dudas acerca de la seguridad de una competici¨®n que supera este a?o los 16.000 millones de pesetas en apuestas.Los cinco caballos muertos se rompieron el cuello en plena carrera o bien sufrieron un ataque cardiaco instantes despu¨¦s de concluirla. Las cuatro primeras muertes, ocurridas el jueves, fueron instant¨¢neas. Strong Promise, Rossell Island y Architect perecieron en tres carreras distintas, la Martell Cup, la Fox Hunters Chase y la Glenlivet Anniversary Hurdle, respectivamente. A Lake Kariba, que corr¨ªa junto a Strong Promise, le fall¨® el coraz¨®n poco despu¨¦s de finalizarla. Ayer se parti¨® la espina dorsal Toni's Tip al chocar contra la primera valla del trofeo John Hughes, otra de las copas disputadas en los d¨ªas anteriores al Grand National.
Parad¨®jicamente, las ca¨ªdas del jueves fueron presenciadas por David Muir, miembro de la Sociedad Protectora de Animales que lleva a?os tratando de mejorar la seguridad de la competici¨®n. Teniendo en cuenta que s¨®lo en la famosa carrera de hoy 40 caballos tendr¨¢n que saltar 30 setos -el mayor de los cuales, denominado La Silla, mide 1,56 metros-, la sociedad ha dedicado parte de sus fondos a analizar la forma en que podr¨ªan evitarse las muertes. "Esta vez, sin embargo, no me explico lo ocurrido. Me di una vuelta a lo largo de la pista, y tengo que admitir que estaba en perfectas condiciones. No s¨¦ que pensar", reconoci¨® Muir poco despu¨¦s de que el cuarto caballo expirara junto a su jinete ante la mirada at¨®nita de jueces y p¨²blico.
Peter Webbon, el veterinario jefe del Jockey Club, atribuy¨® el desastre a algo tan simple como la mala suerte. Amante de los caballos como el resto de los aficionados que siguen con fervor el Grand National, cree que tantas muertes juntas son, m¨¢s que nunca, "la excepci¨®n a la regla". Seg¨²n sus datos, cerca de 70.000 caballos participan en multitud de carreras a lo largo del a?o en el Reino Unido, "y s¨®lo tres de cada mil no lo cuentan". El propio club participa en un proyecto de investigaci¨®n de la Universidad de Liverpool para recabar informaci¨®n acerca de las lesiones de la parte inferior de la pata del caballo. La Sociedad Protectora de Animales, al tanto del estudio, ha encargado que se le haga la autopsia a Stong Promise y Lake Kariba, y que los resultados sean remitidos al laboratorio de la universidad.
Para Charles Barnett, director gerente de Aintree, las cinco bajas ecuestres no han podido llegar en peor momento. Los meteor¨®logos han previsto un d¨ªa luminoso para hoy y el c¨¦sped del club est¨¢ en perfecto estado: "Tal vez haya que remojarlo algo", ha dicho. "Perder caballos es una pena. Una tragedia incluso, pero hay que aceptar que cualquier deporte entra?a riesgos y los accidentes no pueden evitarse", ha se?alado, mientras se prepara para recibir en sus instalaciones a los cerca de 100.000 visitantes que siguen las carreras sobre el terreno.
Para los comentaristas deportivos brit¨¢nicos, las cinco muertes han sido m¨¢s una pesadilla para el departamento de relaciones p¨²blicas de la carrera que otra cosa. El Grand National es una aut¨¦ntica instituci¨®n deportiva en el Reino Unido, una cita casi ¨¦pica. Si bien la p¨¦rdida de un buen caballo supone una tragedia para su due?o, cualquier deporte acarrea riesgos de todo tipo. David Walsh, uno de los jinetes en liza estos d¨ªas lo sabe bien. El jueves le pusieron una multa de 80.000 pesetas por haber tomado un diur¨¦tico para bajar de peso. Su caso es el primero registrado en el Jockey Club, que no le ha demandado.
En Liverpool, entretanto, todo est¨¢ ya listo para "la mayor experiencia ecuestre del mundo". La carrera m¨¢s dura del calendario, ganada en 8 minutos y 47 segundos por Mr. Frisk en 1990, un r¨¦cord a¨²n intacto. Para el recuerdo queda tambi¨¦n el a?o 1928, en el que s¨®lo dos caballos lograron cruzar la meta. A pesar de que la lista de nombres legendarios resulta interminable, un jinete ha pasado a formar parte de la memoria colectiva brit¨¢nica. Se trata de Bob Champion, que se proclam¨® campe¨®n en 1981 montando a Aldaniti. P¨¢lido y delgado, sali¨® a la pista despu¨¦s de vencer en una lucha a¨²n mayor contra el c¨¢ncer.
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