Actores de personalidad moldeable

El car¨¢cter agrio y caprichoso de algunos actores ha producido siempre quebraderos de cabeza en la industria del cine. La indomable Bette Davis, por ejemplo, sac¨® de quicio a productores y directores de la Warner Bros con su af¨¢n de protagonismo. Sin embargo, la directora almeriense de cine Inmaculada Rodr¨ªguez nunca ha sufrido este problema. Los actores con los que ha trabajado, lejos de ser d¨ªscolos, son unos blandos. Hacen siempre lo que ella quiere. Tienen una personalidad moldeable. Y, para m¨¢s se?as, son de plastilina.Rodr¨ªguez, de 41 a?os, lleva 15 esculpiendo figuras para pel¨ªculas de animaci¨®n y es una de las escasas personas que se dedican en Andaluc¨ªa a la direcci¨®n de este tipo de filmes. El pr¨®ximo d¨ªa 30, Canal Plus estrena su tercer cortometraje, Un matrimonio bien avenido. Su trabajo m¨¢s completo hasta la fecha, el mejor acabado y, en consecuencia, el m¨¢s caro. En ¨¦l, Rodr¨ªguez lo ha hecho casi todo: le ha dado forma a sus tres protagonistas, los ha animado y los ha dirigido. Incluso ha creado los decorados.

La idea de la historia tambi¨¦n fue suya. Dura apenas siete minutos. Y deja al espectador con la miel en los labios. Con ganas de m¨¢s. "Es una an¨¦cdota, un divertimento. No trato de contar nada transcendente. S¨®lo provocar una sonrisa", explica. Est¨¢ ambientada en el siglo XVIII, en una mansi¨®n nobiliaria. La protagonizan sus due?os, un matrimonio todav¨ªa joven en el que se ha apagado el fuego de la pasi¨®n, y su jardinero, que reaviva los rescoldos. Los de ambos y por separado. "Es una historia de amor libre", bromea la autora.

Los siete minutos de animaci¨®n han supuesto dos meses de preparativos y rodaje fotograma a fotograma. Una decena de personas ha trabajado ocho horas diarias para conseguir una media de siete segundos de pel¨ªcula por jornada. Rodr¨ªguez ha quedado satisfecha con el resultado, que mejora la calidad de sus trabajos anteriores. "Hemos tenido un presupuesto de cinco millones. Y eso se nota en el acabado y en la est¨¦tica".

Rodr¨ªguez crea a sus personajes con un esqueleto de alambre especial y moldea las extremidades y la cabeza con plastilina. Las partes del cuerpo no visibles se cubren s¨®lo con ropas de tela. "Me gusta cuidar el detalle en las esculturas, pero busco la sencillez en los decorados, donde no uso plastilina", se?ala. "La movilidad de los mu?ecos es esquem¨¢tica y reducida. Tampoco hablan. Lo prefiero as¨ª, aunque reconozco tambi¨¦n que ser¨ªa m¨¢s complicado moverles la boca".

Toda la animaci¨®n del corto se ha hecho de forma manual. Fotograma a fotograma con movimientos milim¨¦tricos de los mu?ecos. Pero no todo es artesanal. Rodr¨ªguez es partidaria del ordenador y lo ha usado para el montaje y para algunos efectos especiales. "Es muy c¨®modo, por ejemplo, para borrar hilos y alambres que uso para mover o sostener algunas piezas".

En los t¨ªtulos de cr¨¦dito, tambi¨¦n hechos por ordenador, figura una lista interminable de personas. Pero ha contado con la ayuda especial de un guionista, un director de fotograf¨ªa y un m¨²sico, que ha compuesto una banda sonora original con reminiscencias barrocas.

A la mayor¨ªa de estos profesionales, Rodr¨ªguez los ha encontrado en Andaluc¨ªa. Sin embargo, la productora, La Mirada, es de Tenerife. El corto se ha rodado en Canarias con ayudas econ¨®micas p¨²blicas y privadas. La autora conf¨ªa en que el estreno en Canal Plus le sirva de promoci¨®n y facilite su distribuci¨®n en festivales, cine y televisi¨®n.