La balanza de Dana
Dana Cervantes reconoce que algunos d¨ªas ha tenido ganas de tirar la toalla. Que se ha sentido tan decepcionada con el mundo del deporte, que muchas veces ha puesto en la balanza su pasi¨®n por el salto con p¨¦rtiga y la pesadilla por la que atraviesa desde que fue sancionada por presunto dopaje. Por ahora, el deporte pesa m¨¢s. Cada d¨ªa entrena como si su participaci¨®n en la Olimpiada de Sidney fuera segura, como si no hubiera perdido los campeonatos Europeos de Pista Cubierta ni los Iberoamericanos de Atletismo. Sigue porque dice que en la balanza tambi¨¦n ha puesto el apoyo de futbolistas, atletas, jugadores de baloncesto, gente de a pie y hasta de instituciones, como el Ayuntamiento o la Diputaci¨®n, cuyos plenos la han respaldado.
Ella proclama a los cuatro vientos que es inocente para despejar las dudas sembradas por un control antidopaje que pas¨® en Budapest y que arroj¨® siete nanogramos m¨¢s de los dos permitidos de nandrolona, la sustancia que ha puesto bajo sospecha sus ¨¦xitos deportivos. No son pocos los malague?os que creen en su inocencia y para demostrarlo han constituido una plataforma. Su objetivo es recoger firmas para pedir por segunda vez la suspensi¨®n cautelar de la sanci¨®n que la mantiene apartada de las competiciones desde el 17 de enero.
Aunque su inocencia o su culpabilidad deber¨¢ proclamarla un juez, no la calle, sus valedores piden que no sea condenada de antemano. "Ella no pretende eludir nada, pero si dentro de dos a?os la declaran inocente ?qui¨¦n le va a devolver su vida deportiva?". Juan Jos¨¦ S¨¢nchez, el entrenador, basa su pregunta en la experiencia de Daniel Plaza, un caso calcado al de Dana que lleva cuatro a?os esperando a que se celebre la vista.
La diferencia es que a este atleta le han concedido la suspensi¨®n cautelar de la sanci¨®n. La deportista malague?a, cinco veces campeona de Espa?a, medalla de bronce en los campeonatos universitarios del mundo de 1999 y que ha batido 30 veces el r¨¦cord nacional, ha corrido peor suerte.
Pese a que la Federaci¨®n Espa?ola de Atletismo y la Internacional la exculparon, el Consejo Superior de Deportes la conden¨® en diciembre pasado a estar dos a?os alejada de las pistas. Un mes despu¨¦s ratific¨® la sanci¨®n. Con el juzgado madrile?o que lleva el caso tampoco tuvo mejor fortuna: el magistrado desestim¨® la suspensi¨®n cautelar con el argumento de que el inter¨¦s general quedar¨ªa da?ado si Dana volv¨ªa a competir.
La plataforma intenta ahora volver a tocar las puertas del juez. Esta vez con las firmas que durante las pr¨®ximas tres semanas se recojan en gimnasios, tiendas de deportes e instalaciones deportivas.
Rufete, jugador del M¨¢laga, aprovech¨® el tir¨®n de su popularidad para sumarse a la causa: "No hay comprensi¨®n. Lo peor que le puede pasar a una persona es que no le dejen hacer su trabajo. Pido apoyo para Dana porque un d¨ªa nos puede pasar a nosotros".
Su entrenador intenta convencer de la inocencia de la atleta. Recuerda que se someti¨® voluntariamente al control antidopaje, que la orina tard¨® 35 d¨ªas en analizarse y que el Consejo Superior de Deportes recurri¨® fuera de plazo el sobreseimiento de la federaci¨®n. Desde de que Dana diera positivo, a finales de 1998, unos 300 deportistas han acusado nandrolona en su orina. El Comit¨¦ Ol¨ªmpico ha subido ahora a cinco los nanogramos permitidos. En el primer control, Dana dio 9.06 y 10.06. En el contran¨¢lisis los ¨ªndices bajaron a 7.10 y 6.80. Ella, su entrenador y la plataforma est¨¢n convencidos de que al final podr¨¢ probar su inocencia y piden "que no sea condenada antes del juicio".
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