Taranc¨®n recurre ahora a un acuerdo de la Universidad para frenar los Estatutos

La espiral en que se ha metido el Consell para justificar el bloqueo a la reforma de los Estatutos de la Universidad de Valencia, tras dos a?os y medio de silencios y dilaciones, forz¨® ayer al consejero de Educaci¨®n, Manuel Taranc¨®n, a desempolvar un acuerdo de 1997 de la junta de gobierno por el que el conocimiento del valenciano se valora como m¨¦rito de promoci¨®n para "justificar el reparo del Gobierno a la redacci¨®n del art¨ªculo 167 de los Estatutos".

El acuerdo de la junta de gobierno de la Universidad de Valencia del 21 de octubre de 1997, que levant¨® polvareda entre los sectores m¨¢s derechistas, dice textualmente: "Para la valoraci¨®n de las solicitudes de plazas de promoci¨®n del personal funcionario que tenga cuatro a?os de antig¨¹edad como personal docente o investigador en la Universidad de Valencia, el conocimiento del valenciano se incorporar¨¢ como m¨¦rito". Cualquier profesor que sea funcionario de carrera, por tanto, no tiene ning¨²n problema con el requisito ling¨¹¨ªstico: el conocimiento del valenciano en una comunidad biling¨¹e se considera un m¨¦rito a la promoci¨®n interna y no un motivo de despido.Para el caso de los profesores o investigadores contratados, una figura que da a las universidades espa?olas la capacidad de contratar al personal que le sea m¨¢s ¨²til para cada departamento o ¨¢rea, el punto de acuerdo dice: "Para las renovaciones de los contratos o solicitudes de cualquier plaza de promoci¨®n de personal contratado, que tenga cuatro a?os de antig¨¹edad como personal docente o investigador en la Universidad, se habr¨¢ de acreditar el conocimiento del nivel medio de valenciano". Lo que significa que cualquier contratado tiene cuatro a?os por delante para el aprendizaje medio de otro de los dos idiomas oficiales de la Comunidad Valenciana. Algo que, por dem¨¢s, es requisito para acceder a la Administraci¨®n p¨²blica.

La rocambolesca explicaci¨®n de la Generalitat, ahora, tras dos a?os de "silencio administrativo" y con un argumento que no tiene nada que ver con el art¨ªculo 167 de los Estatutos fundacionales de 1985 [que cuenta con el visto bueno del Consejo Jur¨ªdico Consultivo] y que, adem¨¢s, tampoco tiene nada que ver con la reforma estatutaria que el Gobierno de Zaplana ten¨ªa que revisar [una reforma de car¨¢cter acad¨¦mico aprobada por el claustro universitario en noviembre de 1997] a?aden m¨¢s confusi¨®n al conflicto. La respuesta oficial, a juicio del rector Pedro Ruiz, "llega tarde" y "hace una lectura equivocada" del ya famoso art¨ªculo de 1985.

El PSPV, Esquera Unida y el Bloc s¨®lo ven una explicaci¨®n "pol¨ªtica" a esta avalancha de justificaciones despu¨¦s de dos a?os de "silencio administrativo", que han acabado por aprobar la reforma autom¨¢ticamente, aunque no puede aplicarse hasta que el Consell no la publique en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana.