Los tiburones amenazan a Sydney 2000

Los triatletas son gente valiente, dicen ellos. Y tambi¨¦n son gente precavida. Son deportistas capaces de nadar 1.500 metros en aguas temidas por las visitas de los tiburones para luchar por una medalla ol¨ªmpica, pero s¨®lo si una compa?¨ªa de buceadores agarrados a motos submarinas y armados con un s¨®nar para ahuyentar a los escualos.As¨ª lo probaron el pasado domingo, en la prueba de Copa del Mundo de Sydney que serv¨ªa de ensayo general para las instalaciones que en septiembre albergar¨¢n los Juegos Ol¨ªmpicos. La prueba fue un ¨¦xito: todos los deportistas acabaron enteros. Y el mayor peligro no lleg¨® del mar: todas las cr¨ªticas al final de la prueba se centraron en el recorrido ciclista, con tramos de pav¨¦s peligros¨ªsimos por la lluvia y que provocaron varias ca¨ªdas graves.

La verdad es que ninguno vio un tibur¨®n, pese a que todos los triatletas llegaron a la ciudad australiana prevenidos y preocupados. Las ¨²ltimas semanas la prensa de medio mundo hab¨ªa estado publicando informaciones alarmantes sobre ataques de tiburones de todo tipo (blancos, martillo y tigre) a pl¨¢cidos ba?istas y remeros en aguas de la bah¨ªa de Sydney, cerca del puerto y de la espectacular Opera House, quiz¨¢s la postal m¨¢s conocida de toda Australia.

"Aunque ahora digamos que no, la verdad es que s¨ª, hab¨ªa un poco de psicosis", cuenta Iv¨¢n Ra?a, miembro del equipo espa?ol que participa en la Copa del Mundo. "El s¨¢bado, antes de la prueba, nos dejaban entrenarnos en la zona de la bah¨ªa donde se har¨ªa la prueba el d¨ªa siguiente, s¨®lo que sin buzos para ahuyentar a los tiburones. Y s¨®lo cuatro o cinco de los 150 competidores se atrevieron. Yo, como la mayor¨ªa, me entren¨¦ en la piscina, que el agua no se mueve y est¨¢ m¨¢s calentita".

El d¨ªa de la competici¨®n, mediod¨ªa en Sydney, miles de espectadores en la bah¨ªa, media docena de buzos con el sonar emitiendo ultrasonidos insoportables para los escualos, los triatletas decidieron desafiar m¨¢s a lo grande a los tiburones vistiendo las combinaciones de neopreno de color gris, color de foca, el alimento favorito de los escualos. "Pero a la hora de lanzarnos al agua lo ¨²ltimo en lo que pens¨¢bamos era en los tiburones, bastante ten¨ªamos con ganar la posici¨®n, no dejarnos empujar, meter codo y todo eso", dice Ra?a, gallego de Ordes, junto a Santiago, y ¨²nico triatleta espa?ol, por el momento, con plaza fija para los Juegos de Sydney. "Luego en el agua, como te est¨¢s casi 20 minutos nadando, te da tiempo a pensar de todo. Te da tiempo a tener miedo. Ni siquiera te alivia pensar que puede aparecer un tibur¨®n y comerle la pierna a los que van los primeros, porque ¨¦sos nadan m¨¢s r¨¢pido que los tiburones y no se dejan coger. Pero, nada, los triatletas somos valientes".

Ra?a, que hab¨ªa terminado entre los 10 primeros tres pruebas de la Copa del Mundo, no tuvo su d¨ªa, de todas maneras, y acab¨® 43?. "Estaba muy cascado", explica Eduardo No, director t¨¦cnico del equipo. "Era la cuarta prueba en cuatro semanas por medio mundo, Rio de Janeiro, Jap¨®n, Hawai y Sydney. Nad¨® muy bien y estuvo inteligente en ciclismo [40 kil¨®metros por las calles de Sydney], pero corriendo [la tercera parte del triatl¨®n: 10.000 metros de carrera a pie] ya no pod¨ªa m¨¢s y le pasaron 40".

Ra?a, los hermanos Llanos, Barbany, Clemente Alonso y Merch¨¢n preparan ahora el Mundial, que se disputa el 30 de abril tambi¨¦n en Australia, pero no en Sydney, sino en Perth. "Nos quedaremos a entrenarnos a 20 kil¨®metros de Sydney, a ver si nos recuperamos", dice No. Ser¨¢n unos cuantos m¨¢s entre las decenas de triatletas de alto nivel que han tomado al asalto las playas australianas. Porque, a pesar de los tiburones, Australia es el para¨ªso del triatl¨®n.