Los estudiantes iran¨ªes denuncian "un golpe de Estado contra la prensa reformista"

Los quioscos de Teher¨¢n, verdaderos escaparates de la apertura que desde hace tres a?os vive Ir¨¢n, se encontraban ayer medio vac¨ªos tras la prohibici¨®n en los ¨²ltimos d¨ªas de una quincena de publicaciones reformistas. Las primeras protestas estudiantiles por esta nueva ofensiva judicial de los sectores m¨¢s conservadores se desarrollaron de forma pac¨ªfica, pero el malestar entre los j¨®venes, principal pilar del cambio que alienta el presidente Mohamed Jatam¨ª, era patente en sus pancartas. Una de ellas denunciaba "la preparaci¨®n de un golpe de Estado contra la prensa reformista".

Otros dos peri¨®dicos reformistas faltaron ayer a su cita con los lectores elevando a 13 el n¨²mero de publicaciones cerradas desde el pasado domingo por decisi¨®n judicial. En total, nueve diarios, tres semanarios y un bimensual han sido suspendidos en dos d¨ªas bajo la acusaci¨®n de haber atentado "contra los valores de la Rep¨²blica Isl¨¢mica". Sin embargo, el rotativo Sobh-e Emruz, cuyo editor Said Hayari¨¢n result¨® gravemente herido en un atentado el mes pasado, pudo finalmente salir a la calle despu¨¦s de que en la madrugada de ayer se le suspendiera la prohibici¨®n impuesta la noche anterior. Al parecer, se trataba de permitir que el diario informara del comienzo ayer del juicio contra el supuesto responsable del ataque. Hayari¨¢n sigue en el hospital con una bala alojada en el cuello."Estas medidas parecen un castigo contra la mayor¨ªa que vot¨® por la reforma pol¨ªtica en febrero", denunci¨® ayer la organizaci¨®n de derechos humanos Human Rights Watch.

En la primera reacci¨®n p¨²blica a estos cierres, varios miles de estudiantes se concentraron de forma pac¨ªfica en la madrugada de ayer frente a las residencias universitarias del campus de la Universidad de Teher¨¢n. En una de las facultades de ingenier¨ªa los j¨®venes mostraban copias atrasadas del diario Fath y de su predecesor Jordad (ambos prohibidos) y se dedicaban a colgar pancartas desafiantes fuera del campus. "El silencio del pueblo no es un signo de su aprobaci¨®n", rezaba una de ellas. Otro millar de estudiantes suspendieron sus clases en la universidad de Jayeh Nasir Tusi, al norte de la capital, para protestar contra lo que calificaron de "preparaci¨®n de un golpe de Estado contra la prensa reformista".

Por la tarde, una reuni¨®n p¨²blica en la Facultad de Derecho sirvi¨® para que varios periodistas denunciaran la situaci¨®n y lamentaran que "tres a?os despu¨¦s" de la elecci¨®n de Jatam¨ª tales medidas a¨²n sean posibles. El auditorio estaba a rebosar. Fue en este mismo campus de la Universidad de Teher¨¢n donde el pasado julio se iniciaron las manifestaciones que m¨¢s tarde degeneraron en los peores incidentes desde la revoluci¨®n isl¨¢mica de 1979.

Tal vez para evitar que se repitan aquellos sucesos, los dirigentes reformistas insist¨ªan ayer en pedir calma. El Frente Dos de Jordad, organizaci¨®n paraguas que agrupa a todos los partidos reformistas, ped¨ªa ayer a la poblaci¨®n que "defienda con fuerza los logros democr¨¢ticos", pero que evite contribuir a un aumento de la tensi¨®n. "La mafia del poder podr¨ªa aprovechar para provocar una crisis mayor", advert¨ªa el texto. Tambi¨¦n Jatam¨ª pidi¨® "calma y unidad" el d¨ªa anterior, y advirti¨® sobre el peligro de que se produzcan disturbios.

Pero el ataque a la prensa no es el ¨²nico frente de esta ofensiva conservadora. El Tribunal Especial del Clero decret¨® tambi¨¦n ayer la detenci¨®n de de Hasan Yusefi-Ashkevari, un cl¨¦rigo que acababa de participar en Berl¨ªn en un seminario sobre las reformas iran¨ªes. Adem¨¢s, el Consejo de Guardianes anul¨® los resultados electorales de las legislativas del pasado febrero en otro distrito (el 11? hasta ahora). A falta de un tercer recuento en la capital, el Consejo no ha determinado a¨²n la segunda vuelta de los comicios, lo que retrasa la constituci¨®n del nuevo Parlamento.