Sotos niega que desviara fondos de PSV para financiar proyectos ajenos a la cooperativa de viviendas
Carlos Sotos, principal acusado del caso PSV (hundimiento, hace siete a?os, del mayor proyecto de vivienda social en Espa?a), neg¨® tajantemente ayer ante la Audiencia Nacional que desviara fondos de la cooperativa con el fin de financiar proyectos ajenos a ella. ?sta es la base de la acusaci¨®n que pesa sobre ¨¦l y los seis restantes imputados en el caso (Paulino Barrab¨¦s, Ferm¨ªn Bret¨®n, Francisco Hern¨¢ndez, Sebasti¨¢n Reyna, Jes¨²s A¨ªna y Primitivo ?lvaro), para los que el fiscal, Vicente Gonz¨¢lez Mota, solicita ocho a?os y dos meses de prisi¨®n.La sesi¨®n de ayer, sexta del juicio, volvi¨® a ser un nuevo, tenso e intenso mano a mano entre el fiscal y el principal encausado. Gonz¨¢lez Mota trat¨® de demostrar por todos los medios que s¨ª hubo desv¨ªo de fondos de los cooperativistas a los innumerables negocios que depend¨ªan de la gestora de la cooperativa, IGS. Y su t¨¢ctica consisti¨® en repasar casi una por una las inversiones y las filiales de IGS y preguntar a Sotos de d¨®nde proven¨ªan los fondos en cada caso.
El fiscal asegura en su escrito de acusaci¨®n que los siete inculpados "administraron los fondos de la promotora a trav¨¦s de IGS y los incorporaron finalmente al patrimonio de esta compa?¨ªa y los utilizaron en su proyecto empresarial, en lugar de en las promociones". En ese escrito, Gonz¨¢lez Mota llega a la conclusi¨®n de que por esa v¨ªa se "distrajeron" 18.587 millones de pesetas de los fondos de la cooperativa.
La respuesta de Sotos a las reiteradas preguntas del fiscal fue siempre la misma. El dinero destinado a estas inversiones proven¨ªa de fondos ajenos a los aportados por los cooperativistas. "IGS ten¨ªa recursos suficientes, v¨ªa fondos propios, aprovechando su margen de negocio, usando su circulante o con financiaci¨®n exterior para hacer frente a los proyectos que acometimos", repiti¨® una y otra vez Sotos en el transcurso de la sesi¨®n.
En el exhaustivo interrogatorio de Gonz¨¢lez Mota salieron a relucir todo tipo de pagos y contratos, pues se remont¨® al origen de IGS. Por ejemplo, el fiscal pregunt¨® por unos pagos realizados por unas obras en una finca ubicada en Madriguera (Segovia). Esa finca y el chal¨¦ al que se refieren los pagos pertenecen a Carlos Sotos.
El fiscal pidi¨® detalles sobre esta operaci¨®n y el imputado se?al¨® que responde a un pago acordado con IGS. Sotos explic¨® que ¨¦l, junto a otros dos socios, aport¨® una serie de sociedades y activos a IGS cuando se constituy¨®. M¨¢s tarde, la gestora fue ampliando capital y dio entrada a UGT. En un momento de ese proceso, el consejo de administraci¨®n de IGS, presidido por Carlos Sotos, decidi¨® aprobar una serie de compensaciones a los accionistas originarios de la gestora, a cambio de que ¨¦stos renunciaran a sus derechos econ¨®micos.
"El pago que se acord¨® fue de 320 millones de pesetas, a abonar bien en dinero, bien en especie. De ah¨ª la factura de la obra de Madriguera", se?al¨® Sotos, quien dijo que el valor real de los activos que aport¨® a IGS "valen m¨¢s de 5.000 millones de pesetas". Sotos, tambi¨¦n a preguntas directas del fiscal, explic¨® que IGS funcion¨® como un grupo empresarial de UGT, pues absorbi¨® empresas como Unial, Viajes Libertur o Tipograf¨ªa Torreblanca.
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