Anelka luce su marchamo de estrella a final de temporada

Nicolas Anelka renaci¨® como estrella, el s¨¢bado pasado ante el Espanyol. R¨¢pido, el¨¢stico, vigoroso, poniendo en peligro la porter¨ªa contraria con cada avance, y dando el pase del gol de Balic que abri¨® la victoria ante el Espanyol. No tuvo nada que ver con el jugador deprimido de las ¨²ltimas semanas. Se rehabilita cuando m¨¢s le necesita el Madrid. Dos meses despu¨¦s de iniciar su ca¨ªda en picado. En los pr¨®ximos d¨ªas resolver¨¢ el enigma: ?Tiene temple Anelka para sobreponerse a su historial de infortunios y al desprecio sistem¨¢tico a que lo someten los capitanes del equipo?Depender¨¢ de lo que haga en el campo y su oportunidad puede venir pronto. Precisamente contra el Bayern, un club que le trae malos recuerdos. Porque fue en el Estadio Ol¨ªmpico de M¨²nich, en el vestuario visitante, donde Anelka protest¨® por no ser alineado, hace dos meses, el 29 de febrero. Hierro lo cogi¨® por el cuello y lo zarande¨® delante de sus compa?eros. Y Anelka, humillado, inici¨® su cruzada de reivindicaciones y marginaci¨®n.

Hoy Hierro prolonga su recuperaci¨®n de una lesi¨®n de menisco. Savio padece una esguince de tobillo. Y Morientes -el competidor natural del delantero franc¨¦s- sufre una artritis traum¨¢tica en el dedo gordo del pie derecho. Si Morientes sigue con molestias en el dedo, el mi¨¦rcoles que viene, Anelka podr¨ªa ser titular ante el Bayern, en el partido de ida de las semifinales de la Liga de Campeones. El Bernab¨¦u ser¨¢ testigo. La cita es fundamental para el madridismo. El equipo necesita a Anelka, y a ¨¦l no le faltan ganas de hacer m¨¦ritos para ir a la Eurocopa en junio.

"?Ya se solucionaron sus problemas con sus compa?eros?", le pregunt¨® un periodista el d¨ªa en que el club le levant¨® la suspensi¨®n. Se supon¨ªa que hab¨ªa pedido disculpas a toda la plantilla por su comportamiento ego¨ªsta. Pero la respuesta de Anelka fue seca. Enigm¨¢tica como su oportuna reaparici¨®n en plan estelar: "No lo s¨¦".