EEUU considera por primera vez al sida como una amenaza para su seguridad
Estados Unidos ha incluido por primera vez al sida entre las amenazas que afectan la estabilidad internacional y piensa hacer de la lucha contra esta enfermedad uno los objetivos de su pol¨ªtica exterior en el futuro. El Consejo Nacional de Seguridad, uno de los principales ¨®rganos de la diplomacia norteamericana, aplicar¨¢ esta nueva estrategia contra una plaga que, seg¨²n asegura en sus informes, "puede derrocar Gobiernos, intensificar la luchas ¨¦tnicas e impedir la creaci¨®n de una econom¨ªa de mercado en las democracias extranjeras".
La at¨ªpica decisi¨®n tomada por el Gobierno norteamericano, seg¨²n una informaci¨®n publicada ayer por The Washington Post, surge a ra¨ªz de informes cada vez m¨¢s alarmantes sobre los devastadores efectos del sida, particularmente en ?frica.Un estudio de los servicios de inteligencia estadounidenses asegura que un cuarto de la poblaci¨®n de la zona sur de este continente tiene muchas posibilidades de morir a consecuencia de la enfermedad y que el n¨²mero total de v¨ªctimas seguir¨¢ aumentando en la pr¨®xima d¨¦cada.
El fen¨®meno podr¨ªa repetirse en los pa¨ªses de la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica y en el sur de Asia. "Buena parte de los pa¨ªses afectados en el ?frica sub-sahariana deber¨¢n enfrentarse a una cat¨¢strofe demogr¨¢fica. (...) Lo que empobrecer¨¢ no s¨®lo a los m¨¢s pobres sino tambi¨¦n a las clases medias y crear¨¢ toda una generaci¨®n de hu¨¦rfanos incapaces de defenderse de la explotaci¨®n y la radicalizaci¨®n", dice el informe mencionado por el The Washington Post.
Esta escasa esperanza de vida supone un factor de alto riesgo en "las guerras revolucionarias, los conflictos ¨¦tnicos y las transiciones abruptas entre distintos reg¨ªmenes" en los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo. El sida se considera como una de las causas que pueden llevar al "fracaso de las democracias no consolidadas".
El Gobierno norteamericano est¨¢ ahora aunando fuerzas entre sus distintos departamentos para elaborar un programa de lucha contra el sida, no s¨®lo desde el punto de vista de la salud, sino desde una perspectiva m¨¢s global de la pol¨ªtica exterior.
?sta es la primera vez que se considera a una enfermedad entre las amenazas a la seguridad nacional, en la misma categor¨ªa que el terrorismo, aunque con un presupuesto inicial todav¨ªa modesto, unos 254 millones de d¨®lares (unos 47.000 millones de pesetas).
La Administraci¨®n del presidente Bill Clinton tiene tan s¨®lo seis meses por delante, antes de las elecciones de noviembre, para poner en marcha las grandes l¨ªneas de este proyecto, cuya mayor dificultad reside en coordinar las pol¨ªticas, a veces contradictorias, de sus departamentos: facilitar la comercializaci¨®n de medicamentos contra el sida implica, por ejemplo, mejorar las relaciones comerciales con Sur¨¢frica, considerado como un pa¨ªs susceptible de violar la propiedad intelectual de las compa?¨ªas farmac¨¦uticas norteamericanas.
Los informes de los servicios de inteligencia aseguran que la propagaci¨®n del sida es una de las consecuencias negativas de la globalizaci¨®n. La mejora de las comunicaciones y del comercio aumentan los riesgos ya existentes en algunas zonas del planeta, en particular en Asia. As¨ª, India "podr¨ªa superar a ?frica en 2010 en el n¨²mero de nuevos afectados". El aumento de enfermos en los pa¨ªses de la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica "ser¨¢ un reto para el desarrollo de las democracias y posiblemente contribuir¨¢ a crear situaciones de emergencia humanitaria a las que Estados Unidos tendr¨¢ que responder".
Washington espera poder integrar esta nueva iniciativa en programas de acci¨®n internacionales, como el propuesto recientemente por el secretatario general de la ONU, Kofi Annan, cuando expuso entre las metas de su agenda para el milenio reducir en un 25% el n¨²mero de nuevos afectados por el sida.
?ste ser¨¢ tambi¨¦n uno de los temas clave de la Asamblea del Milenio de la ONU, que se celebrar¨¢ en Nueva York el pr¨®ximo mes de septiembre. M¨¢s de 16 millones de personas han muerto a causa del sida desde los a?os ochenta, el 60% de ellos en ?frica subsahariana, que cuenta en estos momentos con 23 millones de afectados.
La iniciativa de EEUU tambi¨¦n tiene objetivos dom¨¦sticos. En a?o electoral, la lucha contra el sida es una baza para el bando dem¨®crata frente a los republicanos. Precisamente, la noticia de The Washington Post coincidi¨® ayer con la marcha de la comunidad gay que se celebra todos los a?os en la capital norteamericana.
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