Sergi L¨®pez protagoniza 'Una relaci¨®n privada', un pl¨¢cido filme sentimental de matriz francesa
Hace s¨®lo tres a?os casi nadie lo conoc¨ªa aqu¨ª, en su casa. En Francia, sin embargo, sab¨ªan bien qui¨¦n era. Hab¨ªa rodado ya cinco pel¨ªculas. Desde entonces las cosas han cambiado para este actor nacido en Vilanova i la Geltr¨² hace 35 a?os. Western, el filme de Manuel Poirier que concurs¨® en Cannes en 1997, catapult¨® a Sergi L¨®pez, que encarnaba all¨ª a un viajante de comercio. Tras aquel papel le han llovido las ofertas. En Francia, y tambi¨¦n en Espa?a: Marion, La nouvelle Eve, Lisboa, Rien ¨¤ faire, Entre las piernas, Car¨ªcies, Morir (o no), Harry, un ami qui vous veut du bien, Ataque verbal, El cielo abierto... El viernes llega a las pantallas espa?olas uno de sus trabajos recientes, Una relaci¨®n privada, una comedia sentimental de matriz francesa, dirigida por el belga Fr¨¦d¨¦ric Fonteyne, que caus¨® sensaci¨®n en el ¨²ltimo festival de Venecia, donde la protagonista femenina, la veterana Nathalie Baye, obtuvo el premio a la mejor actriz.Cuenta la pel¨ªcula, que se estren¨® en Francia con el t¨ªtulo de Une liaison pornographique, una bella historia de amor cuya trama empieza por donde muchas acaban: por el sexo. Una mujer (Nathalie Baye), de la que el espectador nada sabe ni sabr¨¢, busca satisfacer una fantas¨ªa sexual, por lo que publica un anuncio en una revista de contactos. As¨ª conoce al personaje de Sergi L¨®pez, otro desconocido para el p¨²blico. La relaci¨®n entre ambos comienza, pues, por el sexo, y todo marcha de maravilla... hasta que llega el amor, y con los sentimientos aparecen los problemas. La estructura narrativa se basa en el recurso del flashback, ya que son los personajes quienes explican individualmente su experiencia a alguien ajeno al asunto.
Sergi L¨®pez dijo ayer en la presentaci¨®n del filme que una de las cosas que le llev¨® a aceptar el papel fue precisamente la originalidad de la estructura, que propicia que el espectador reciba dos puntos de vista, el de ella y el de ¨¦l, as¨ª como los di¨¢logos, que asegur¨® haber encontrado "especialmente sensibles". Por su parte, el director, Fr¨¦d¨¦ric Fonteyne, calific¨® su pel¨ªcula de "sencilla, desnuda" y a?adi¨® que el peso de la historia "descansa en el trabajo de los actores". Efectivamente, son los dos los ¨²nicos protagonistas de una historia tan privada que s¨®lo a ellos incumbe, en la que el director acent¨²a la intimidad con abundantes primeros planos.
Sergi L¨®pez neg¨® haber tenido dificultad en construir su personaje, sobre el que no ten¨ªa ninguna informaci¨®n: "Me dediqu¨¦ a actuar. Las circunstancias del personaje me daban lo mismo. Los di¨¢logos y las situaciones eran suficientemente s¨®lidas y contundentes para entender qu¨¦ estaba pansando". De acuerdo con el director, tampoco es importante que no se conozcan los antecedentes de los dos personajes, ni que el filme no satisfaga las expectativas pornogr¨¢ficas que se anuncian en el t¨ªtulo. "La mejor manera de hablar de una fantas¨ªa sexual es no mostr¨¢ndola", lanz¨® Fonteyne. Y espec¨ªficamente sobre el t¨ªtulo, coment¨®: "Para m¨ª es justo y muy ir¨®nico. Los personajes no buscan amor, sino sexo".
Cumplida la misi¨®n de promocionar este filme, Sergi L¨®pez volar¨¢ hoy a Cannes, donde compite la cinta francesa Harry, un ami qui vous veut du bien, que protagoniza a las ¨®rdenes de Dominik Moll. A la vuelta, rodar¨¢ con Roberto Santiago Hombres felices, junto a Aitana S¨¢nchez-Gij¨®n, Pep¨®n Nieto, Carlos Hip¨®lito y Mar¨ªa Est¨¦vez. Lo dicho, este hombre no para.
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