"Desde que la mat¨¦ s¨®lo pienso en el suicidio"
"Creo que fui yo porque despert¨¦ y encontr¨¦ a la chica en el suelo, envuelta en sangre. Con el mismo machete que supongo que la mat¨¦ quise matarme yo, pero no tuve valor, aunque lo intent¨¦. La idea del suicidio no se me va desde entonces de la cabeza, s¨®lo pienso en ello, pero no tengo valor". As¨ª lo ha contado ante su abogada, la polic¨ªa y luego ratificado ante la juez Vicente Isabel Burgos, el profesor de matem¨¢ticas, de 31 a?os, acusado de abrir en canal con un machete a Ester Redondo Garc¨ªa, una prostituta de 27 a?os cuyos servicios sexuales solicit¨® por tel¨¦fono. El cuerpo sin vida de Ester fue hallado el pasado viernes en el apartamento de Vicente Isabel, situado en la avenida de Europa, en Pozuelo de Alarc¨®n.El supuesto homicida reiter¨® ayer ante la juez que investiga el crimen que bebi¨® con profusi¨®n las horas antes del crimen como una forma de combatir su estr¨¦s. "El d¨ªa antes estuve con unos amigos de Pozuelo. Comimos y, yo en particular, beb¨ª mucho: vino y despu¨¦s una botella de whisqui. Luego estuvimos en mi casa y seguimos bebiendo durante toda la noche. Cuando ellos se fueron, hacia las nueve de la ma?ana, telefone¨¦ a la chica, que conoc¨ªa de una vez anterior. Mantuvismo un contaco sexual y no s¨¦ qu¨¦ ocurri¨®, perd¨ª la cabeza. Recuerdo que ca¨ª insconciente al suelo. Al despertar, sobre las nueve de la noche del mi¨¦rcoles, vi a la chica tumbada. No recordaba nada. Cog¨ª el machete e intent¨¦ suicidarme, pero no tuve valor. Cog¨ª el coche y anduve por la provincia de Toledo pensando en matarme con el machete, pero no lo hice", ha contado Vicente Isabel.
Mar¨ªa Nieves Fern¨¢ndez Ravelo, su abogada, destaca que su cliente presenta marcas de machete en el est¨®mago y t¨®rax y remacha que la idea del suicido anida en Vicente desde hace al menos dos a?os, poco despu¨¦s de comenzar a beber sin recato en sus limitadas horas libres. "Llevaba muchos d¨ªas en una situaci¨®n de fuerte estr¨¦s, dando clases de matem¨¢ticas y estad¨ªstica durante casi trece horas seguidas. En lugar de descansar, utilizaba los d¨ªas festrivos para repartir peri¨®dicos y ganarse unos duros m¨¢s que necesitaba", cont¨® ayer su abogada.
Las deudas le atosigaban. Mucho trabajo, pero los emolumentos o resultaban exiguos para pagar sus necesidades b¨¢sicas o los destinaba a otros fines. Lo cierto es que la inmobiliaria que le ten¨ªa alquilado el apartamento de Pozuelo le reclama una deuda de 800.000 pesetas. Llevaba m¨¢s de un a?o sin pagar el alquiler. Tras cuatro d¨ªas vagando por Toledo con su coche opt¨® por entregarse a la Guardia Civil. "No fui capaz de suicidarme y decid¨ª llevar el machete a la polic¨ªa y contar lo que recordaba". Sus padres, vecinos de Pozuelo de Alarc¨®n, y seis hermanos est¨¢n estupefactos con lo ocurrido. Su hijo, dijeron, nunca hab¨ªa tenido ning¨²n problema ni se met¨ªa en peleas. "Se?ora abogada, perd¨ª la cabeza pero soy una persona normal; s¨¦ que, aunque usted es mujer y a lo mejor yo he matado a una, me defender¨¢ bien; s¨¦ que es valiente", dijo Vicente a su letrada.
De su novia, vecina de un municipio de Toledo y con la que llevaba saliendo varios a?os, no ha hecho ning¨²n comentario. La vio por ¨²ltima vez un d¨ªa antes del crimen. La llev¨® en coche desde Madrid hasta la casa de sus padres, en Toledo, y a la vuelta comenz¨® a beber y a beber. Primero con sus amigos y luego solo. Seguidamente se acord¨® de Ester y decidi¨® llamarla para que le acompa?ase en su apartamento de Pozuelo de Alarc¨®n. Dos horas despu¨¦s de la llamada Ester se present¨® en la casa. Su estado, activado por el acohol, era de total euforia, afirma su abogada.
-?Hab¨ªa estado usted en alguna ocasi¨®n anterior con la v¨ªctima? -pregunt¨® ayer la juez a Vicente Isabel-.
-S¨ª, una vez.
-?La relaci¨®n sexual que mantuvo con ella fue voluntaria?
-S¨ª.
Tras escuchar su relato, el fiscal del caso pregunt¨® al acusado si en alg¨²n momento hab¨ªa meditado llamar a la chica para hacer el acto sexual y luego matarla.
-No. Lo hicimos y perd¨ª la cabeza.
Vicente no record¨® en ning¨²n momento los detalles del macabro homicidio que cometi¨®. La chica ten¨ªa el estom¨¢go abierto en canal, una raja en la espalda y numerosas quemaduras por el cuerpo.
Tras prestar declaraci¨®n durante m¨¢s de tres horas, Vicente se someti¨® a un examen del m¨¦dico forense al que se mostr¨® reacio y cuyos resultados ser¨¢n decisivos para saber si realmente sufre un trastorno mental.
La titular del Juzgado n¨²mero 6 de Majadahonda, instructora del caso, orden¨® ayer tarde su ingreso en prisi¨®n comunicada y sin fianza en la c¨¢rcel de Soto del Real. Su abogada mantiene que el lugar adecuado para su cliente no es una prisi¨®n normal, sino un centro psiqui¨¢trico.
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