Prejuicios racistas

Como sucediera en El Ejido, los padres del colegio concertado San Juan Bosco de Barakaldo que han boicoteado la incorporaci¨®n al centro a tres hermanos gitanos de 3, 7 y 8 a?os, aseguran que no tienen nada contra los ni?os ni el grupo ¨¦tnico al que pertenecen, sino que su oposici¨®n a aceptarlos se debe "al comportamiento problem¨¢tico de la familia". Sin embargo, nadie ha demostrado que sus padres sean conflictivos. Al contrario, tanto el Ayuntamiento como los profesores del colegio donde asiste el hermano mayor aseguran que se trata de una familia integrada que en absoluto puede calificarse de marginal.Es s¨®lo aparente la paradoja de que este episodio se produzca en un municipio tradicionalmente receptor de inmigrantes. As¨ª suele ocurrir. Los argumentos de los 438 padres que se oponen a la admisi¨®n de los tres ni?os (en la asamblea hubo 29 que votaron a favor de aceptarlos y 163 se abstuvieron) son poco convincentes, pero lo m¨¢s criticable es la utilizaci¨®n de sus hijos en las acciones de protesta, implic¨¢ndoles en el rechazo a unos ni?os que percibir¨¢n ya como diferentes y conflictivos.

Seguramente, el Departamento de Educaci¨®n vasco err¨® al cerrar el 31 de marzo pasado, en pleno curso, el colegio-gueto del barrio de Retuerto, donde eran escolarizados 13 ni?os de etnia gitana. Las noticias de que lo hizo por la agresi¨®n sufrida por alg¨²n profesor no ha contribuido a facilitar su acomodo en otros centros del municipio. Pero esta posible equivocaci¨®n de partida no legitima la postura llena de prejuicios de la mayor¨ªa de los padres ni su cerraz¨®n a aceptar las garant¨ªas y medidas de apoyo ofrecidas por las autoridades y la asociaci¨®n Iniciativa Gitana. Para reclamar una "educaci¨®n sin problemas" para sus hijos no han vacilado en hacer lo contrario, neg¨¢ndose a reincorporarlos a las aulas tras las vacaciones de Semana Santa y haci¨¦ndoles part¨ªcipes de un conflicto suscitado y alimentado por sus prejuicios. El Departamento de Educaci¨®n, que ha advertido a los padres que no escolarizar a sus hijos es un delito que puede motivar la actuaci¨®n de la Fiscal¨ªa de Menores, debe conjugar la firmeza y el di¨¢logo. Pero anteponiendo a los prejuicios el derecho de los ni?os a una escolarizaci¨®n integrada.