El Gobierno vasco denunciar¨¢ ante el fiscal a los padres del colegio de Barakaldo

El viceconsejero de Educaci¨®n del Gobierno vasco, Alfonso Unceta, presentar¨¢ en las pr¨®ximas horas en la Fiscal¨ªa de Menores del Pa¨ªs Vasco una denuncia contra los padres del colegio de Barakaldo por desescolarizar a sus hijos para boicotear la presencia de tres ni?os gitanos en el centro. Agentes de la Ertzaintza y de la polic¨ªa municipal tuvieron que proteger ayer a una treintena de profesores del colegio de la presi¨®n de los padres que se apostaron frente a la entrada. El boicoteo que sufren los tres hermanos gitanos fue roto ayer por seis alumnos -de los 633 del centro- que acudieron a clase.

Alfonso Unceta, viceconsejero de Educaci¨®n, est¨¢ decidido a adoptar medidas de inmediato contra todos aquellos padres que persistan en su actitud de no enviar a sus hijos al colegio San Juan Bosco de Barakaldo. Los 633 alumnos de primaria y secundaria del centro concertado, perteneciente a la orden de los Salesianos, llevan sin acudir a clase desde el pasado 17 de abril. Ayer, s¨®lo seis estudiantes de ESO, de entre 12 y 16 a?os, rompieron el boicot de la asociaci¨®n de padres del centro contra la escolarizaci¨®n de los tres ni?os gitanos y acudieron a clase."Si la situaci¨®n permanece y los padres siguen impidiendo que sus hijos vayan a clase, voy a poner en conocimiento de la Fiscal¨ªa de Menores el caso", anunci¨® Unceta. El viceconsejero de Educaci¨®n aclar¨® que lo har¨¢ "en las pr¨®ximas horas", y asegur¨® que puede ser hoy mismo. La decisi¨®n se apoya en la obligaci¨®n que tienen los padres de escolarizar a sus hijos hasta los 16 a?os. Unceta asegur¨® que los progenitores est¨¢n incurriendo en una ilegalidad.

Preocupaci¨®n

El responsable de Educaci¨®n admiti¨® su preocupaci¨®n por el conflicto que afecta desde hace un mes a una comunidad escolar de 636 alumnos, incluyendo a los tres gitanos. "Llevamos trabajando dos meses en el problema y uno en concreto en el caso de este colegio [San Juan Bosco], y la verdad es que sin mucho ¨¦xito. Los padres no entienden que lo que les ofrecemos es una garant¨ªa para sus hijos", expres¨®. Se refer¨ªa Unceta al rechazo de la asociaci¨®n de padres del colegio concertado a aceptar las medidas de apoyo que el Departamento de Educaci¨®n les ofrece para que la integraci¨®n de los ni?os gitanos se realice sin problemas. La admisi¨®n de los tres ni?os en el centro de Barakaldo ha ido acompa?ada de la incorporaci¨®n de tres profesores, un psic¨®logo y un monitor.

Sin embargo, no ha sido suficiente para convencer a los padres. Ayer, en la segunda jornada que los escolares de etnia gitana acud¨ªan a clase, no s¨®lo prosiguieron los padres del resto las movilizaciones anunciadas, sino que las radicalizaron. A las ocho y media de la ma?ana, media hora antes del comienzo de las clases, un grupo numeroso de padres y madres se apostaron, junto a sus hijos en muchos casos, delante del colegio. Su intenci¨®n era que la treintena de profesores que imparte clase en el centro religioso apoyara su rechazo a la presencia de los ni?os gitanos. No lo consiguieron.

Los tres hermanos, el ni?o K, que acaba de cumplir cuatro a?os, y sus hermanas R., de siete, y R., de ocho, volvieron a clase en medio de la pol¨¦mica. Como el d¨ªa anterior, el presidente del colectivo Iniciativa Gitana, Jes¨²s Gim¨¦nez, traslad¨® a los nuevos alumnos en su veh¨ªculo. Eran las 8.50 cuando llegaron. Los tres escolares miraban at¨®nitos los rostros escrutadores de los manifestantes y preguntaron a Gim¨¦nez: "T¨ªo, qu¨¦ pasa". Les cont¨® "un cuento de hadas", seg¨²n sus propias palabras. Que no era contra ellos, que era una protesta y que no se preocuparan. Los peque?os entraron entre la multitud, de la mano de una profesora y de Gim¨¦nez. Los tres miraban hacia abajo.

"Os invitamos a que no entr¨¦is", espet¨® un padre a los profesores que trataban de hacerlo. Lo que parec¨ªa una invitaci¨®n termin¨® en increpaciones y forcejeos con la Ertzaintza: "A m¨ª ni me toques", le grit¨® una madre delante de su hijo a un agente. Hubo momentos de tensi¨®n, pero los ertzainas y los polic¨ªas municipales consiguieron formar un pasillo para que los docentes pudieran entrar. Los manifestantes continuaron unos minutos profiriendo gritos contra el director del colegio, Mikel Uriarte: "Mikel, as¨®mate, da la cara". Despu¨¦s, el grupo se dirigi¨® hacia Bilbao para concentrarse de 10.30 a 12.30 frente a la Delegaci¨®n de Educaci¨®n del Gobierno vasco.

El alcalde de Barakaldo, el socialista Carlos Pera, anunci¨® que la polic¨ªa municipal de la localidad volver¨¢ hoy "y todos los d¨ªas que sea necesario" para permitir la normalidad en el centro escolar. La Ertzaintza tambi¨¦n estar¨¢ hoy presente antes de que se abran la aulas.

Por su parte, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, asegur¨® ayer a Servimedia que la sociedad espa?ola "debe felicitarse del grado de integraci¨®n de los ni?os gitanos en colegios". Resalt¨®, en referencia a Barakaldo, que existe "una inmensa mayor¨ªa de situaciones regularizadas, en las que se est¨¢ produciendo con absoluta normalidad la integraci¨®n".

Los padres del colegio afirmaron ayer que decidir¨¢n el lunes en asamblea si continuar¨¢n con las movilizaciones y la desescolarizaci¨®n de sus hijos.

Un hermano, integrado sin problemas

Los tres ni?os gitanos que sufren el boicot de sus compa?eros en el colegio San Juan Bosco de Barakaldo tienen un hermano mayor, P., de 12 a?os. Desde hace dos meses, P. est¨¢ escolarizado, "perfectamente integrado" y sin problemas, en el colegio p¨²blico Juan Ram¨®n Jim¨¦nez de la localidad.

El alumno se relaciona con sus compa?eros con normalidad. El padre, de etnia gitana, se dedica a la venta de coches usados. La madre acude a las reuniones con los tutores como una m¨¢s. Ayer, cuando vio las im¨¢genes televisivas en las que aparec¨ªan sus hijos en medio de gritos de rechazo a los ni?os, se estremeci¨®. Tambi¨¦n se pregunt¨® qu¨¦ har¨ªan esas mujeres si a sus hijos los trataran como a los tres de ella. Lo cuenta Jes¨²s Gim¨¦nez, el presidente de Iniciativa Gitana.

Sin embargo, a los padres del colegio San Juan Bosco la normalidad con que acude a clase P. no es una referencia que les sirva. Ayer se concentraron frente a la Delegaci¨®n de Educaci¨®n del Gobierno vasco en Bilbao y corearon consignas durante dos horas, meg¨¢fono en mano. No estaban solos. Junto a los padres y madres se encontraban sus hijos. Ni?os de 5 a 10 a?os, fundamentalmente, y algunos un poco mayores. "Unidos en la lucha, no nos mover¨¢n"; "en clase hay tres, fuera 633"; "Garmendia [la delegada de Educaci¨®n en Vicaya] dimite, Salesianos no te admite", fueron algunos de los gritos coreados por los ni?os. Todos llevaban pegado al ch¨¢ndal del colegio una octavilla en la que se le¨ªa "Salesianos Cruces, 633 ni?os y ni?as en la calle desde el 17 de abril".

El alcalde de Barakaldo, Carlos Pera, denunci¨® este comportamiento "inc¨ªvico" de los padres y madres y les acus¨® de impedir el "derecho fundamental a la educaci¨®n". Pera record¨® que ¨¦ste no es el primer caso que se produce en Barakaldo de confrontaci¨®n entre las etnias paya y gitana, "aunque quiz¨¢ nunca con esta gravedad", asegur¨®.