Virus sin fronteras

El virus I love you es un buen ejemplo de los desaf¨ªos a los que se enfrenta la aplicaci¨®n de las leyes en la era del delito inform¨¢tico. En la ¨¦poca de Internet, una persona con preparaci¨®n t¨¦cnica no s¨®lo puede causar un grave perjuicio a escala internacional, sino que, adem¨¢s, puede hacerlo en un mundo en el que existen diferentes interpretaciones respecto a su investigaci¨®n y a su procesamiento. Por ejemplo, el lanzamiento del virus Ilove you es un delito en EE UU, pero en Filipinas no est¨¢ prohibido de forma espec¨ªfica por ninguna ley. (...) Las autoridades legales de EE UU han expresado su satisfacci¨®n por la cooperaci¨®n que han recibido en este caso por parte de Filipinas, pero esto no cambia el hecho de que no se haya podido encontrar con rapidez al sospechoso. En resumen, es necesario adecuar las infraestructuras de la comunicaci¨®n global con una mayor armonizaci¨®n de los c¨®digos penales. (...) Algunas organizaciones internacionales, (...) as¨ª como el Departamento de Justicia de EE UU, han prestado una gran atenci¨®n a este problema. El Consejo de Europa ha preparado un tratado que obligar¨¢ a sus signatarios a promulgar leyes m¨¢s efectivas contra el delito inform¨¢tico y a coordinar su aplicaci¨®n. (...) Pero estos esfuerzos s¨®lo implican a los pa¨ªses desarrollados. (...) No es f¨¢cil convencer a los pa¨ªses en los que Internet no est¨¢ todav¨ªa generalizado de que consideren el delito inform¨¢tico como un problema urgente. Un ataque inform¨¢tico puede ser realizado con la misma facilidad desde el Tercer Mundo como desde Europa, y la red no ser¨¢ m¨¢s fuerte que el m¨¢s d¨¦bil de sus eslabones.Washington, 13 de mayo